2. “Entender la economía mejora la
imagen de los abogados y
enriquece el Derecho mismo, Este
ayuda a comprender que el
derecho es solo de las ramas del
conocimiento”.
3. Bullad considera que el análisis económico del
derecho nos hace tomar conciencia de cuanta
responsabilidad tiene el Derecho en el
desarrollo. Hoy ya sabemos que “el mal
Derecho” nos cuesta varios puntos en el
crecimiento del PBI y reduce las inversiones.
Hoy sabemos que “el mal Derecho” no solo
genera injusticia, sino además, subdesarrollo.
4. En relación al conflicto que algunos ven entre derecho y economía
Bullad señala:
Como el análisis económico del derecho se basa en
un análisis costo-beneficio, se tiende mucho a
pensar que es un análisis deshumanizante: es
convertir en números el Derecho, que tiene que
ver con la Justicia, con la conducta humana y con
los valores.
Sin embargo, no es lo que persigue el análisis
económico del derecho. Lo que persigue es
evitar que los sistemas jurídicos, a la hora de
legislar generen desperdicios.
5. Lo que se busca es por tanto, un
derecho que, sin olvidar otros aspectos
o valores a los cuales se deba, sea un
Derecho eficiente, es decir, un Derecho
que ante el uso inadecuado de los
recursos, cree incentivos de conducta
correctas para lograr su fin.
6. Alfredo Bullad hace un análisis económico muy
acertado sobre la propiedad intelectual.
Considerando a la propiedad intelectual
como un bien intangible no se debe a juicio
de este colega protegerse de la misma
manera que la propiedad física. Respecto a la
propiedad intelectual, su fin es proteger la
creatividad.
7. bullad Culmina con una afirmación radical
respecto a que no se puede demostrar que la
protección mediante propiedad intelectual es
fundamental para la creación no hay razón
para la existencia de la misma.
Esto puede ser debatido a nivel de patentes
donde las empresas que realizan e invierten
en el desarrollo de nuevos productos esperan
un retorno de su investigación. Lo mismo
podría alegarse para la producción musical.
Sin embargo la producción musical por
ejemplo no requiere de grandes firmas
productoras o de grandes capitales para
funcionar