El documento describe la devastación causada por los incendios forestales en Australia, que mataron aproximadamente a un millón de animales, incluidos koalas. Relata cómo los koalas sedientos se acercaban a los humanos en busca de agua, un comportamiento inusual, debido a las altas temperaturas récord. Advierte que los koalas podrían extinguirse en pocos años debido a la continua pérdida de su hábitat forestal causada por la urbanización, los incendios y el cambio climático. Exhorta a la acción