La evolución de la web se divide en cuatro etapas: La Web 1.0 permitía a los usuarios conectarse y consumir contenido de forma pasiva. La Web 2.0 introdujo aplicaciones interactivas como blogs, wikis y redes sociales que permitieron a los usuarios crear y compartir contenido. La Web 3.0 aporta inteligencia a la información a través de aplicaciones como bases de datos y dispositivos móviles. Finalmente, la Web 4.0 permitirá una comunicación ubicua entre personas y sistemas a través de tecnologías como el