La fábula describe cómo un equipo de japoneses llamados Takatakas derrotó a un equipo de colombianos en una competencia de remo. Los Takatakas tuvieron éxito porque trabajaron como un equipo bajo el liderazgo de su capitán, mientras que los colombianos fracasaron porque no se distribuyeron las responsabilidades de forma equitativa y no cooperaron entre sí.