2. sea cual sea la actitud que tome el
Cristiano ante esta fecha, el espiritu
navideño ha de reflegarse en una
conducta ejemplar los 365 dias del
año, lo cual incluye el periodo que nos
ocupa. Esto haria mucho mas creible
la navidad para la mente secular, y la
estimularia a ver la necesidad de
tener tambien un espiritu mas familiar,
mas cordial y mas tierno durante unos
dias --- y, con suerte, el resto del año ---
. Al menos asi fue como influyo sobre
mi cuando yo era secular, agnostica y
remisa a cualquier cosa que tuviera
que ver con religion; pero no insensible
al calor humano y a la influencia de
una persona realmente convertida.
3. EL MENSAJE ES PARA TI
¿Cómo te encuentra este año la época navideña? ¿Ha sido este , tal vez, tu mejor
año? Entonces, tienes tremendo motivo para celebrar. ¿O es, tal vez, tu primera
Navidad tras la muerte de tu madre y lo que quieres es encerrarte a llorar y no tener
que sufrir esas largas y tediosas reunions familiars? ¿Ha sido el 2017 el año de tu
divorcio, y tienes que ir solo o sola a dar la cara y responder una retahila de
preguntas incómodas? ¿Se ha ido de casa tu hijo y no sabes como contactarlo para
que vuelva ? ¿La crisis economica te ha dejado sin trabajo y no tienes dinero ni
para el menu navideño? ¿Todas tus expectativas para el 2017 se han visto
frustradas, asi como las resoluciones de año Nuevo que hiciste hace doce meses?
Entonces, el mensaje del pesebre es para ti. Esta es otra de las grandes paradojas
de esta época; que los que sufren---- cuando todos los demás están contentos --- son
precisamente los que tienen el <<espiritu ideal>> para valorar y celebrar
correctamente la llegada del Mesias.¿Por qué ? Porque son los que más necesidad
sienten de un Salvador que sepa entender su dolor y darle esperanza.Ese Salvador es
Jesús, Dios con nosotros. Cuando nació él, nació nuestra esperanza; llego la luz a
este mundo. Pero no la luz pasajera que alumbra las calles, sino la luz verdadera que
alumbra el camino. Jesús conoce nuestra realidad, llena de conflictos, poque la suya
tambien estuvo plagada de dificultades, pobreza, decepcion, traiciones, injusticias,
torturas y muerte en la cruz. Por eso, para mí, tiene sentido celebrarlo, siempre y
cuando sea con espiritu acorde al suyo. Y no necesariamente el 25 de diciembre,
sino todos y cada uno de los días del año.