El alcalde de Penáguila, un pueblo de Alicante con 400 habitantes, tuvo que lidiar con las travesuras de un mono escapado de un safari cercano durante 15 días. El mono saltaba por los tejados tirando tejas, se columpiaba en las antenas de televisión y sorprendió a los asistentes a misa entrando por la cristalera del campanario de la iglesia, donde hizo volteretas por el pasillo antes de escapar. Los cuidadores del safari declararon que el mono habría regresado antes si