El documento describe los cuatro caballos del Apocalipsis mencionados en Apocalipsis 6: 1-8. El caballo blanco representa a Cristo resucitado que combatirá y vencerá a los otros tres caballos: el caballo rojo trae violencia y guerra, el negro trae hambruna e injusticia social, y el amarillo trae muerte y pestilencia. Los cuatro caballos simbolizan las grandes plagas de la humanidad.