El documento clasifica los siete sacramentos católicos en tres categorías: los sacramentos de Iniciación (Bautismo, Comunión y Confirmación), los sacramentos de Sanación (Unción de los enfermos y Penitencia) y los sacramentos de Servicio (Orden sacerdotal y Matrimonio). También proporciona una breve descripción del bautismo cristiano como un rito de iniciación o purificación que implica la aplicación de agua invocando a la Trinidad.