El análisis es una ayuda válida para imitar a la naturaleza y para evitar el riesgo de crear formas nuevas y poco naturales o de estancarse sobre formas preferidas subjetivas. El estudio de las formas de superficie resulta facilitado por algunos detalles:
El dibujar con lápiz sobre el modelo, crestas marginales (bandas o lóbulos laterales), ángulos de transición, máxima convexidad cervical, las concavidades y las convexidades determinadas por los lóbulos (ranuras y surcos).
Aplicando polvo de plata sobre el modelo.
Observando fotografía en blanco y negroEl análisis es una ayuda válida para imitar a la naturaleza y para evitar el riesgo de crear formas nuevas y poco naturales o de estancarse sobre formas preferidas subjetivas. El estudio de las formas de superficie resulta facilitado por algunos detalles:
El dibujar con lápiz sobre el modelo, crestas marginales (bandas o lóbulos laterales), ángulos de transición, máxima convexidad cervical, las concavidades y las convexidades determinEl análisis es una ayuda válida para imitar a la naturaleza y para evitar el riesgo de crear formas nuevas y poco naturales o de estancarse sobre formas preferidas subjetivas. El estudio de las formas de superficie resulta facilitado por algunos detalles:
El dibujar con lápiz sobre el modelo, crestas marginales (bandas o lóbulos laterales), ángulos de transición, máxima convexidad cervical, las concavidades y las convexidades determinadas por los lóbulos (ranuras y surcos).
Aplicando polvo de plata sobre el modelo.
Observando fotografía en blanco y negroadas por los lóbulos (ranuras y surcos).
Aplicando polvo de plata sobre el modelo.
Observando fotografía en blanco y negro
2. El análisis es una ayuda válida para imitar a la naturaleza y para
evitar el riesgo de crear formas nuevas y poco naturales o de
estancarse sobre formas preferidas subjetivas. El estudio de las
formas de superficie resulta facilitado por algunos detalles:
El dibujar con lápiz sobre el modelo, crestas marginales
(bandas o lóbulos laterales), ángulos de transición, máxima
convexidad cervical, las concavidades y las convexidades
determinadas por los lóbulos (ranuras y surcos).
Aplicando polvo de plata sobre el modelo.
Observando fotografía en blanco y negro.
3. La curvatura labial en sentido oclusogingival localiza a partir de la
unión amelodentinaria tres planos: facetas cervicales, media e incisal,
que son determinadas por la convexidad cervical (ecuador) y por la
deflexión del borde libre (Figura 8).
4. La curvatura labial en sentido mesiodistal presenta tres lóbulos (mesial,
central, distal) separadas por dos depresiones de desarrollo (denominados
también surcos o ranuras verticales mayores mesial y distal), mientras que
la zona cervical es surcada por 3 a 5 ranuras horizontales menores
separadas por la prominencia de crestas de esmalte (Figura 9).
5.
6. Las crestas o bandas marginales vestibulares son delimitadas por los
ángulos de transición (o desviación de la luz), que marcan el paso de la
superficie labial a las áreas interproximales; la forma de cono invertido
y de disposición radial de estas superficies le confieren redondez y
tridimensionalidad a la pieza dentaria (Figura 10).
7. Los simples elementos morfológicos pueden fundirse en forma
diferente (Figura 11):
Dientes con contorno triangular y dos surcos laterales
prominentes que se extienden desde la región incisal a la
cervical (morfología en W).
Cuadrados con un surco central más desarrollado interrumpido
por una protuberancia cervical.
Ovalados, con toda la superficie labial de forma redondeada;
piezas con toda la superficie recubierta por irregularidades.
8.
9. La superficie del esmalte se distingue por numerosas irregularidades delgadas
que definen a la microtextura de superficie:
Surcos y ranuras menores horizontales, verticales.
Cavidades, pequeñas, fosas, depresiones, aspecto granuloso, facetas.
Crestas, ondeados, protuberancias.
10.
11. Microfracturas por carga y/o traumas, áreas de desgaste,
descalcificaciones (Figura 14).
12. Estructuras lamelares del esmalte, que son anomalías de desarrollo
causadas por un proceso incompleto de calcificación (Figura 15).