México es un destino atractivo para la inversión extranjera directa debido a su estabilidad macroeconómica, tamaño de mercado, red de acuerdos comerciales, costos competitivos, infraestructura moderna, mano de obra capacitada y su industria automotriz líder mundial. El documento también destaca que México es un importante exportador de manufacturas avanzadas y que ofrece oportunidades para las empresas a raíz de las reformas económicas recientes.