Este documento explora diferentes concepciones del tiempo desde perspectivas físicas, psicológicas y biológicas. Describe el tiempo físico según criterios astrofísicos como una dimensión relativa que fluye en una sola dirección. Explica el tiempo psicológico como una percepción subjetiva y el tiempo biológico como el que regula los procesos vitales. Finalmente, discute la relación entre el uso ético del tiempo y la calidad de vida.
3. ¿QUÉ ES EL TIEMPO...
REAL?
PSICOLÓGICO?
BIOLÓGICO?
¿EXISTE OTRA CLASE DE TIEMPO? ¿FLUYE EL TIEMPO O
LOS ACONTECIMIENTOS?
¿POR QUÉ PERCIBIMOS EL TIEMPO SOLO HACIA
DELANTE?
EL BUEN USO DEL TIEMPO DA CALIDAD A LA
VIDA
4. .
LA ÉTICA Y EL TIEMPO
Existen diversas concepciones
del tiempo que van desde el
punto de vista de la física,
pasando por el de la psicología,
de la biología e inclusive el de la
ética.
TIEMPO “REAL” O FÍSICO
5. Según criterios astrofísicos:
Ø El tiempo es una dimensión que unida a
la dimensión espacial conforman juntas
una entidad física real llamada La Cuarta
Dimensión o dimensión Espacio- temporal.
Ø El tiempo no es una entidad absoluta,
es decir igual para todos, sino que es
relativa, lo cual significa que dependiendo
del observador así mismo se mide.
Observadores distintos pueden medir
tiempos distintos, de acuerdo con la
velocidad de su desplazamiento.
.
6. -
Ø El tiempo va en la misma dirección para
todos en el universo: desde el pasado
hacia el futuro, y no al revés, y esto explica
por qué su sentido y dirección es igual al de
la expansión espacial universal.
Ø El tiempo tuvo su inicio en el Big Bang y
tendrá su final probablemente en el Big
Crouch.
7. TIEMPO PSICOLÓGICO
Es ese tiempo que percibimos como real a pesar de
ser inventado por nuestra mente. Adquiere realidad
al convertirse en expectativa o en recuerdo, según
el caso. Por ejemplo: el ayer como reminiscencia o
añoranza del pasado y el mañana como esperanza
de conseguir lo que ahora deseamos. Los traemos
al hoy (único tiempo real que disponemos), y en
aquellos (el ayer y el mañana) nos ponemos a vivir
nuestras vidas, como si fueran tiempos reales.
También se denomina tiempo psicológico a la
brevedad aparente de los momentos
profundamente placenteros, como por ejemplo una
deliciosa luna de miel, unas placenteras vacaciones
o cuando realizamos una labor de amor y el tiempo
“vuela” sin damos cuenta.
8. TIEMPO BIOLÓGICO
Es el tiempo que regula el metabolismo de los
seres vivos.
Los procesos biológicos se dan en el tiempo,
desde el instante mismo de la concepción
hasta la muerte, pasando por todo el proceso
de crecimiento desde la niñez, la
adolescencia, la madurez y la vejez.
Este tiempo también es inexorable. No lo
podemos detener, aunque sí prolongar un
poco más con la ayuda de la ciencia médica
que aumenta las expectativas de vida.
9. ¿EXISTE OTRA CLASE DE
TIEMPO?
Puesto que tenemos libre albedrío e
inteligencia para construirnos nuestra propia
vida, podemos igualmente ideamos y
creamos a voluntad dentro del lapso de
tiempo que tenemos para vivir trozos de
tiempos personales e íntimos, como islas
privadas, para ir viviendo nuestros momentos
e instantes de privacidad e intimidad, y que
eventualmente podemos compartirlos con
alguien más.
10. ¿FLUYE EL TIEMPO O LOS
ACONTECIMIENTOS?
Sin pensarlo mucho, pareciera que tanto el
tiempo como los acontecimientos van
pasando a través de nuestra vida. Y también
nos parece que es la vida la que va pasando a
través de ellos y que nuestro tiempo se acorta
poco a poco.
Nuestra vida la podemos comparar con una
barca navegando en un río. En este caso, el río
sería el tiempo y la barca la vida, que va
fluyendo hacia el mar. Los acontecimientos
serían el paisaje en medio del cual pasamos.
11. LA ÉTICA Y EL TIEMPO
La calidad de vida tiene una estrecha relación
con la ÉTICA en el sentido de que esta
disciplina implica un acertar permanente para
ir logrando una 'buena vida', una mejor manera
de vivir; por eso debemos ser prudentes y
esmerados, fijándonos bien en todo lo que
hacemos.
En consecuencia, necesitamos de una
programación y un aprovechamiento
permanente de nuestro tiempo como premisa
para conquistar esa buena vida, como meta
máxima a la que aspiramos todos y que
definimos como la ética de una buena vida.