Este cuento trata sobre un mono llamado Quico que vivía en la selva. Sus padres le enseñaron a columpiarse y caminar sin pisarse. Un día, otros monos le dieron dinero para comprar golosinas. Quico decidió comprar castañas asadas y se encontró a un niño descalzo en el camino, a quien le dio el dinero para que pudiera comprarse zapatos.