La narrativa española ha pasado por varias etapas desde los años 70 hasta la actualidad. En los años 70 surgió la novela experimental que exigía la participación activa del lector para construir el significado. En los años 80 y 90 se cultivaron géneros como la metanovela, novela histórica e intriga policíaca. Actualmente, la narrativa se caracteriza por la fragmentación y se cultivan diversos estilos como la novela histórica, de intriga, lírica y de pensamiento, mezclando autores de diferentes épocas.