Los tsunamis son generalmente causados por grandes alteraciones submarinas como terremotos o erupciones volcánicas que desplazan grandes cantidades de agua. Aproximadamente el 90% de los tsunamis son causados por terremotos. Los terremotos oceánicos pueden generar tsunamis al elevar o hundir repentinamente el fondo marino. También pueden producirse tsunamis por deslizamientos de tierra, meteoritos o explosiones submarinas.