El documento presenta una reflexión sobre cómo la sociedad moderna tiene más bienes materiales pero menos bienestar emocional y espiritual. Se argumenta que tenemos casas más grandes pero familias más pequeñas, más conocimientos pero menos juicio, más medicinas pero menos salud. Finalmente, se anima al lector a vivir cada día como una ocasión especial y a expresar su aprecio por los seres queridos.