Este documento discute la importancia de educar a los niños y adultos sobre los derechos humanos y los derechos de la niñez para promover una cultura de paz. Resalta que cada niño debe conocer sus derechos para protegerlos a sí mismos y a los demás, y que cada adulto debe respetar estos derechos. También describe la educación para la paz como un proceso activo en el que los participantes se convierten en protagonistas del cambio y la transformación positiva, enfocándose en valores como la dignidad humana, la libertad