La rata negra es el transmisor más común de la peste bubónica, una enfermedad infecciosa causada por la bacteria Yersinia pestis que se transmite a los humanos a través de las pulgas de las ratas. La peste bubónica ha causado varias pandemias mortales a lo largo de la historia, incluida la Peste Negra del siglo XIV que mató a aproximadamente un tercio de la población mundial.