3. 1º: obtener el Módulo medio anual: M
∑
1,64+1,52+1,56+2,09+3,66+4,66+3,4+3,1+2,1+2,77+
2,15+1,57= 30,17
∑/12= 2,51
M= 2,51
MÓDULO : 1,6 M3/S ¿QUÉ SIGNIFICA?
2º Hacer gráfico con los módulos u obtener la
media en el mismo gráfico
4.
5. e 0,62
f 0,6
m 0,62
a 0,832
my 1,45
jn 1,856
jl 1,354
ag 1,235
sep 0,8366
oc 1,1
nov 0,856
dic 0,605
7. Comentario
1º conceptualización: Es un perfil hídrico…
2º descripción: Máximos y mínimos
3º análisis del gráfico: Los
máximos…,debido…
4º comentario y conclusión: Es un río de
tipo…
10. Cliserie del Sistema Central: Sierra de Guadarrama
La cliserie del Sistema Central muestra el escalonamiento de la vegetación en función de la altura. Las causas del
escalonamiento son las variaciones climáticas ocasionadas por el progresivo incremento de la altura. Las temperaturas disminuyen
una media de 6° por cada 1000 metros de ascenso y las precipitaciones se incrementan por el enfriamiento del aire. Ello determina
un escalonamiento climático desde la base a la cima y, como consecuencia, un escalonamiento de la vegetación. El mayor o menor
número de escalones depende de la mayor o menor altitud de la montaña.
En el Sistema Central podemos distinguir los siguientes tipos de vegetación:
Los Bosques son la primera formación vegetal que nos encontramos, según ascendemos en altitud. Se extienden hasta los
2.000 metros y van variando sus especies según la altura:
Entre los 600 y los 1200 metros dominan las encinasen ambas laderas.
Es una especie característica de los bosques perennifolios mediterráneos. Toleran bien el calor y mal el frío excesivo, por eso
no se encuentra a mayor altitud.
Es una especie arbórea resistente a la sequía y se adapta a todo tipo de suelos. Tradicionalmente se aprovechaba la bellota
para el ganado, y su madera, muy dura y resistente, para ruedas, carpintería exterior, utensilios y carbón, muy apreciado por su
buena combustión y su alto poder calorífico. Hoy ha perdido buena parte de estos usos (salvo el marginal de la bellota para
alimentar al cerdo ibérico).
Entre los 1200 y los 1700 metros se encuentra el robledal, que no soporta veranos calurosos, no tiene demasiada tolerancia
al frío y exige bastante humedad. Su madera, dura, se aprovechaba tradicionalmente para hacer carbón y útiles y actualmente para
la construcción (vigas y parquet), muebles, traviesas de ferrocarril, barcos y leña.
Por encima del robledal, a unos 1800 metros de altura, quedan algunos hayedos residuales. El haya tolera mal el calor y
muy bien el frío, exige gran humedad y prefiere los suelos calcáreos, lo que explica su poco desarrollo en el Sistema Central. Su
madera, dura y de buena calidad, se aprovechaba tradicionalmente para carboneo, celulosa o construcción; su fruto, el hayuco,
servía para alimento del ganado y para extraer aceite.
Actualmente la madera se emplea para muebles, utensilios y leña.
Entre los 1800 y los 2000 metros, dominan los pinares de pinus silvestri. de gran porte, que tolera muy bien el frío, por eso
los encontramos a esta altura. Además, es un árbol exigente con la humedad del suelo.
Su madera es la más apreciada de entre todas las especies de pinos y se aprovecha para el mueble y la construcción.
También se utiliza la resina.
El matorral y los prados aparecen por encima de los 2000 metros, donde el frío impide el crecimiento de los árboles. El
matorral de altura está formado por especies como codesos, piornos y citisos; los jarales por jaras y los céspedes de las cumbres
por vegetación herbácea. Su principal aprovechamiento es como pastos de diente para el ganado
Lo más característico de esta cliserie es la disposición casi paralela de ambas vertientes, debido no coinciden con a que
sotavento y barlovento no coinciden con el corte del perfil. La vertiente de la derecha coincide con el norte y con la solana, la
izquierda con el sur y la umbría, se aprecia por la situación de la hayas, unos metros más bajas que en la otra ladera, debido al
menor número de horas expuestas al sol. El barlovento se da en la sierra de Guadarrama en la cara NE y el sotavento con SO. De
ahí esta disposición.
14. Para analizar las diferentes morfoestructuras así como su evolución geológica y sus paisajes, se hará un recorrido por todas ellas en el sentido (NO – SE) de la
flecha.
La primera unidad a analizar es el sector oeste de la cordillera Cantábrica. . es de materiales paleozoicos que formaban parte del zócalo de la Meseta y
rejuvenecieron en la orogénesis alpina. En su extremo oriental hay afloramientos de calizas primarias que constituyen Los Picos de Europa, donde se
encuentran las mayores alturas como el Naranjo de Bulnes.
La Submeseta Norte es una cuenca sedimentaria formada tras el hundimiento de un bloque del zócalo herciniano durante la Orogenia Alpina. Al hundirse
constituyó en un primer momento lagos, que debido a a la sedimentación de la era terciaria y cuaternaria se fueron colmatando de sedimentos de distinta
dureza (margas,arcillas, arenas y calizas que suelen formar una costra encima de los anteriores).
Se disponen de forma horizontal ya que no han sufrido ninguna deformación posterior, y debido a la erosión diferencial se han creado paisajes como los
páramos, los cerros testigo, las campiñas y las cuestas; casi todos ellos originados por las aguas de la Cuenca del Duero que recorren toda la submeseta.
Dividiendo a la Meseta en dos partes se encuentra el Sistema Central. En este caso se trata de un bloque elevado del zócalo durante la Orogenia alpina. Los
materiales, las estructuras y los paisajes ocasionados por la erosión son similares a los del Macizo Galaico, al tener los dos su origen en el Macizo Herciniano
paleozoico.
En este caso los relieves son un poco más elevados, superando algunos de ellos los 2500 metros. Entre los más importantes están Ayllón, Somosierra,
Guadarrama, Gredos, Béjar y Peña de Francia.
Al sur del sistema Central se localiza la Cuenca del Tajo. Forma parte de la Submeseta Sur junto con la Cuenca del Guadiana, separadas ambas por los
Montes de Toledo. Se trata en los dos casos de cuencas sedimentarias formadas por el hundimiento de una parte del zócalo durante la Orogenia Alpina.
Al igual que ocurriera con la Cuenca del Duero, estas cuencas sedimentarias fueron ocupadas en un primer momento por agua, formando zonas de lagos
interiores, que se fueron colmatando y rellenando de sedimentos de la era terciaria y la cuaternaria. En la actualidad forman relieves horizontales donde
abundan los paisajes de erosión diferencial: páramos o mesas, (como La Mancha, La Alcarria o la Mesa de Ocaña) cerros testigo, campiñas y cuestas.
Entre las dos cuencas sedimentarias se hayan como ya se ha mencionado los Montes de Toledo. Se trata también de un macizo antiguo, que surgió al
levantarse un bloque del zócalo en la Orogenia Alpina. Formado también por materiales silíceos es uno de los ejemplos que existen en la península de relieve
apalachense ocasionado por la erosión diferencial. Su sierra más importante es Guadalupe.
Al sur de la Cuenca del Guadiana se encuentra el último sistema montañoso que atraviesa la flecha. Son los Sistemas Béticos, una cordillera de plegamiento
alpino formada en la era terciaria debido al pliegue y elevación de los materiales depositados por el mar en el surco bético durante la era secundaria. Se trata
de un relieve muy complejo tanto en sus estructuras (pliegues, mantos de corrimiento, pliegues desplazados…) como en los materiales (paleozoicos en el
penibético, calizos en el subbético, y arcillos y margosos en la depresión intrabética).
Los sistemas Béticos se dividen en tres sectores. En el sentido de la flecha el primero que encontramos es el subbético, que se localiza en el interior. Está
formado por la alternancia de calizas y margas. Sus sierras más importantes son Grazalema, Ubrique y Cazorla. La depresión intrabética es la siguiente
unidad, se encuentra entre la cordillera subbética y la penibética y se encuentra fragmentada en diferentes hoyas: la de Baza, la de Guadix, la de Antequera, la
de Ronda) Estas cuencas se rellenaron de materiales terciarios que debido a la erosión y a la aridez del clima de la zona han dado lugar a paisajes de Bad
Lands.
La última unidad, ya paralela a la costa es la Cordillera Penibética. En ella podemos encontrar materiales paleozóicos del antiguo macizo Bético – Rifeño que
se levantaron en la Orogenia Alpina .Los relieves son escarpados y elevados (más de 3000 metros) de hecho aquí encontramos las altitudes más elevadas de
toda la península, destacando el Mulhacén y el Veleta.
En este recorrido por la península de NO – SE se atraviesan todos los tipos de unidades morfoestructurales: macizo antiguos, zócalos, cuencas sedimentarias
y relieves jóvenes. En él se puede apreciar la gran diversidad de paisajes, estructuras y materiales que pueblan nuestra península y que son el resultado de
una larga evolución geológica y de unos procesos de erosión en los que se conjugan, además de las estructuras y los materiales, los diferentes tipos de clima
que encontramos a lo largo y ancho de la geografía peninsular. No es de extrañar por eso que se nos compare con un continente en miniatura.
19. PRÁCTICA DE GEOGRAFÍA: LA ENERGÍA EN ESPAÑA
1. Aspectos generales.
La tabla presenta datos estadísticos sobre la producción y consumo de energía primaria en España en 2000 y 2007, en
tantos por ciento. La energía primaria está constituida por las fuentes de energía tal y como se encuentran en la
naturaleza, sin ninguna transformación. La producción y consumo de energía primaria se basan en fuentes de energía no
renovables (nuclear, carbón, petróleo y gas), que desaparecen al usarse para producir energía final. La fuente de
información corresponde al
Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
2. Comentario de tabla.
– En la producción española, el primer lugar lo ocupa la energía nuclear, que experimentó un enorme desarrollo entre la
crisis del petróleo y el año 1984 como forma de disminuir la dependencia del petróleo. La moratoria nuclear impuesta
desde entonces hace que su producción se encuentre estabilizada, aunque el porcentaje de su contribución a la
producción energética tiende a disminuir, debido al incremento de la participación de otras fuentes, como el gas natural y
las energías renovables. Los problemas a los que se enfrenta la producción nuclear son la dependencia externa en el
enriquecimiento del uranio y en la tecnología, el riesgo de accidentes a pesar de los sistemas de seguridad existentes, y
el almacenamiento de un volumen creciente de residuos radiactivos.
El segundo lugar en la producción de energía primaria lo ocupa el carbón, que procede de trece grandes cuencas entre
las que destacan la asturiana-leonesapalentina y la turolense. Su aportación a la producción energética tiende a disminuir
debido a los problemas que padece, como la difícil extracción del carbón en minas subterráneas y con filones fracturados
y de escasa potencia; el agotamiento de algunos yacimientos y la baja calidad de otros; los altos precios que lo hacen
poco competitivo; y la reconversión del sector, que supone el cierre progresivo de minas hasta llegar a la producción
mínima necesaria para el mantenimiento de una reserva estratégica.
La producción de energía hidráulica se localiza en las áreas donde existen caídas de agua con la suficiente altura y
energía, como el norte peninsular, el Pirineo, algunas áreas de montaña del interior peninsular y las caídas de los ríos
Duero y Tajo al abandonar la Meseta. La producción presenta considerables fluctuaciones entre unos años y otros, dado
que depende de la hidraulicidad del año.
20. La producción de petróleo y gas natural es insignificante, dada la escasa dotación española en hidrocarburos. El petróleo procede de
Tarragona y Ayoluengo y el gas de los yacimientos localizados en el suroeste peninsular.
La energía primaria obtenida a partir de las nuevas fuentes de energía renovables es todavía escasa, ya que no resultan tan
competitivas como las fuentes de energía tradicionales debido a su menor desarrollo tecnológico. Las principales son las minicentrales
hidráulicas, el viento y la biomasa. No obstante, las energías renovables tienden a aumentar su participación en la producción
energética, pues presentan las ventajas de ser inagotables y limpias; reducir la dependencia del petróleo; y tener un elevado grado de
dispersión. Por eso, el nuevo Plan de Energías Renovables 2005-2010 se propone incrementar la producción energética con este tipo
de fuentes.
– El consumo de energía primaria en España se basa en el petróleo, utilizado especialmente para la obtención de derivados para el
transporte y la industria, y en una medida cada vez menor, para la obtención de electricidad en centrales de fueloil.
Su consumo tiende a disminuir debido a la sustitución por el gas en las centrales termoeléctricas; a la implantación de una mayor
eficiencia energética; y al incremento de la producción de biocarburantes para el transporte. No obstante, representa casi la mitad del
consumo de energía primaria de España.
Al consumo de petróleo sigue en importancia el de gas natural, que se ha incrementado considerablemente, gracias a las ventajas que
ofrece: alto poder calorífico, precio más bajo y menor contaminación al carecer casi de azufre, por lo que se han ampliado las
infraestructuras para favorecer su consumo. Este se centra en el uso calorífico en la industria y los hogares; en la obtención de
derivados en la industria petroquímica, y cada vez más en la producción de electricidad en centrales térmicas, y en un número
creciente de centrales de ciclo combinado y de cogeneración.
El consumo de energía hidráulica se mantiene estabilizado, aunque con fluctuaciones dependientes de la hidraulicidad del año. Se
basa fundamentalmente en la producción de electricidad, que compite con la demanda de agua para el consumo agrario y de los
hogares.
El consumo de carbón tiende a reducirse. Se emplea principalmente en la producción de electricidad en centrales térmicas, y en
menor medida en la industria siderúrgica y en la construcción.
El consumo de energía nuclear es bastante estable, aunque desde 2005 descendió debido a los paros temporales de algunas
centrales para realizar labores de puesta a punto y al cierre de la central de Zorita. Se destina fundamentalmente a la producción de
electricidad, y en menor medida a otros usos como la medicina, la conservación de alimentos y la biotecnología.
21. El consumo de las nuevas fuentes de energía renovables es muy reducido, aunque tiende a
incrementarse, dado que el nuevo Plan de Energías Renovables se ha propuesto que en 2010
alcancen el 12,5% del consumo de energía primaria, incluyendo la energía hidráulica. Su
destino principal es proporcionar energía eléctrica, térmica o mecánica.
– El autoabastecimiento energético de España es muy escaso. La energía nuclear, lahidráulica
y las nuevas fuentes de energía renovables permiten un autoabastecimiento del 100%. Sin
embargo, los escasos porcentajes de autoabastecimiento de carbón y, sobre todo, de petróleo y
de gas natural, que sumaban entre los tres el 85,6% del consumo energético en 2007, obligan a
realizar costosas importaciones. Estas implican dependencia externa en el abastecimiento y un
coste mayor en la producción económica que reduce la competitividad.
Frente a estos problemas se trata de garantizar la seguridad en el abastecimiento mejorando
las relaciones con los países productores; diversificando los abastecedores y las fuentes de
energía utilizados y también se procura abaratar el coste de la energía, mediante la
liberalización del mercado y el aumento de la eficiencia energética.
23. Estiaje en julio, agosto
y septiembre
Lluvias en
Lluvias otoño e
primaverales invierno
24. Temperaturas de verano: 20º C,
veranos más frescos, debido a la
altitud (1000m)
Temperaturas de invierno: 3º C,
muy fríos
Amplitud térmica: 17º C
Continentalidad
Modificación de la altitud
Precipitaciones: 501mm/año:
Escasas
Invierno en forma de nieve
Factores: borrascas
atlánticas y cantábricas
debilitadas, pero
compensadas por la altitud
25. El gráfico representa a un climograma en el que se pueden ver las precipitaciones mediante barras, cuya medida hay que
buscarla en el eje vertical de la izquierda, expresadas en l/m². Por su parte, las temperaturas están representadas mediante
puntos unidos por medio de una línea, cuya medida hay que buscarla en el eje vertical de la derecha, expresadas en ºC. Tanto
temperaturas como precipitaciones se expresan de cada uno de los 12 meses del año.
La evolución de las temperaturas lleva a una temperatura media de 10,5ºC, una cifra fresca. Así, se parte de una mínima
anual de 2,9ºC en enero, un valor frío, y se llega hasta un máximo de 19,9ºC en julio, un valor cálido, dando una amplitud
térmica de 17ºC, un valor muy elevado.
En cuanto a la evolución de las precipitaciones, el total de lluvias es de 514 mm, una cifra que nos sitúa en la España
Seca. Por otro lado, el mes más seco es agosto, con 24 l/m², mientras que el más lluvioso es noviembre, con 58 l/m². Se puede
apreciar que los meses más lluviosos corresponden al invierno y las estaciones equinocciales, mientras que el verano es la
estación con menor precipitación, con dos meses, julio y agosto, en los que las lluvias sufren una bajada. Así, se puede afirmar
que existe una sequía estival, al igual que una relativa escasez de lluvias en términos generales.
En definitiva, las estaciones que se pueden observar son las siguientes: el invierno, bastante frío, con lluvias que en
muchas ocasiones podrán ser en forma de nieve; el otoño tendrá un máximo relativo de lluvias, además de temperaturas
frescas; el verano es relativamente cálido, con una bajada de precipitaciones; y la primavera será la estación más lluviosa.
Hechos como la temperatura media anual (10,5ºC), así como la amplitud térmica (17ºC), el total de
precipitaciones (514 mm) y su distribución a lo largo del año, ponen de manifiesto las características de un clima de interior, que
al estar hablando de la Península se llamaría Clima Mediterráneo de Interior o Continentalizado. Estaría, por tanto, alejado de la
influencia del mar, por lo que aumenta la amplitud térmica anual y diurna, además de favorecer las heladas invernales. Los ríos
que se asocian a este tipo de clima son, en general, cortos, irregulares y poco caudalosos. La vegetación es de bosque
perennifolio o esclerófilo, destacando la encina y el alcornoque, así como el matorral formado por maquia y garriga.
Teniendo en cuenta la amplitud térmica, que es alta; que las temperaturas del verano no son muy calurosas; y las bajas
temperaturas del invierno, hay que pensar en la Submeseta Norte, especialmente en una zona bastante elevada, puesto que la
zona en cuestión está a 1080 m, por lo que podría tratarse del climograma correspondiente a Soria.
La continentalidad es la circunstancia que más afecta al clima aquí presentado. Así, la zona oriental de la
Submeseta Norte, alejada de la influencia del mar, ve acentuada su continentalidad, con lo que las temperaturas se extreman,
produciéndose inviernos bastante fríos y veranos relativamente cálidos. Por el mismo motivo, las precipitaciones son escasas,
debido a que esta zona está alejada de la influencia de los vientos húmedos procedentes del Atlántico. Sólo las borrascas
asociadas a los frentes procedentes de dicho océano o del Mar Cantábrico, cuando barren toda la Península, alcanzan esta
zona del interior peninsular, por lo que las lluvias más intensas se dan en las estaciones equinocciales.
Otra de las circunstancias que interviene en las características de este clima es la altitud, que modifica la temperatura
con una bajada de 0,6ºC por cada 100 m de altura. De esta manera, la altitud de Soria, unos 1080 m sobre el nivel del mar, trae
consigo que las temperaturas invernales sean bastante bajas y los veranos no demasiado calurosos.