La educación ambiental surgió en los años 70 como respuesta a la crisis ambiental. Debe entenderse como un proceso de aprendizaje que facilita la comprensión de las realidades ambientales y del deterioro del medioambiente. Su propósito es que cada individuo tenga conciencia de su dependencia del entorno y se sienta responsable de su uso y mantenimiento. Es importante elevar el nivel de conocimiento e información sobre educación ambiental para lograr un modo de vida sostenible.