Robert Hooke descubrió las células de las plantas usando un microscopio en 1665 y publicó sus hallazgos en su libro Micrographia. Hooke inventó el microscopio compuesto y utilizó ilustraciones detalladas para documentar sus observaciones de organismos como insectos, esponjas y plumas de aves. Su trabajo allanó el camino para la aceptación de los descubrimientos microscópicos de Antonie van Leeuwenhoek.