2.
El fenómeno de mayor importancia del siglo barroco
novohispano es cultural y se denomina criollismo.
La definición de criollo va más allá del nacimiento o
aspectos raciales, ya que se refiere a un hecho de
conciencia, cultura y actitud. Por lo tanto, criollo será
aquel que se siente novohispano americano y no
europeo.
3.
Los siglos XVI y XVII se caracterizan por una
incertidumbre causada por la importante disminución
en la población, el fracaso de las encomiendas y, en
general, las crisis materiales y espirituales.
4.
El problema consiste en que, con estos problemas,
terminó un proyecto de vida para la Nueva España ,
dominado por frailes y encomenderos, pero todavía
no se definía el nuevo proyecto de vida de la Nueva
España.
Este problemas es de especial importancia para los
criollos, pues ya no se siente europeo, pero no deja
de ser español. El criollo novohispano es un hombre
en búsqueda de un nombre y rostro.
5.
Sin sustentos precisos, busca justificarse como
alguien en el mundo. En esto consiste la cultura
novohispana del segundo proyecto de vida, es decir,
la cultura es esa búsqueda.
6.
Los criollos decidieron acudir al pasado indígena y
exaltarlo, a la alabanza de la tierra, a sus ingenios, al arte
y a la religión con muestras de piedad insólitas.
En pocas palabras, tuvieron que sentirse orgullosos de la
gente, de las obras, de las tierras y, realmente, expresar
ese orgullo.
En este sentido, la Nueva España barroca puede ser
vista como una metáfora que poco a poco fue
adquiriendo la categoría de verdad.