1. PRO-RECONSTRUCCIÓN
A UN AÑO DEL DESASTRE
27|02|2010
27|02|2011

2. INTRODUCCIÓN
La magnitud de la catástrofe generada el 27.02 obliga, a un año de ocurrida, evaluar lo
hecho e intentar estructurar un camino a recorrer para, en el mediano-largo plazo, dar por
superada la tragedia, de modo material, y reiniciar la vida normal como país.
El problema real es que a un año de ocurrido el terremoto, las ciudades y pueblos siguen
en el suelo, los damnificados viven en precarias condiciones, las soluciones se demoran
en la maraña burocrática y quienes, por parte del Estado, tienen la obligación de actuar
(Ministros, Intendentes, Gobernadores, Alcaldes) se encuentran dedicados principalmente
a obtener dividendos políticos.
La Comisión de Vivienda y Ordenamiento Territorial del Partido Progresista (PRO) estima
que el proceso de reconstrucción durará un periodo de varios años para dejar el país en
similares condiciones a las anteriores al 27.02.10, por tanto mantener la situación de
lentitud y entrampamiento de la reconstrucción, no hace más que afectar la calidad de
vida de los miles de chilenos afectados, y por otro lado, la imagen país se verá seriamente
dañada en el concierto internacional.
En este sentido, y con el propósito único de que los plazos se acorten y que la situación
de normalidad llegue pronto a los afectados, el PRO se compromete con el país, y en
particular con nuestros compatriotas afectados, en tener un espíritu colaborativo
con las autoridades del país, con el fin de aunar esfuerzos para la reconstrucción,
en la medida que se de cumplimiento a lo que creemos como “necesidades
fundamentales” de este proceso.

3. PLANTEAMOS COMO NECESIDADES FUNDAMENTALES DEL PROCESO DE
RECONSTRUCCIÓN:
1 Transparentar efectivamente el daño provocado por el sismo
Que el país conozca en forma precisa el catastro, localidad a localidad, vivienda a
vivienda, de los efectos del terremoto y su situación a un año de ocurrida la catástrofe.
Esto referido a vivienda, salud, educación, infraestructura, industria, comercio, servicios.
Esta es la única manera de poder hacer un seguimiento creíble sobre el avance en el
proceso de reconstrucción.
2 Transparentar las adjudicaciones hechas con motivo del desastre
Que el país conozca en forma precisa a quienes se les han encargado los estudios de los
proyectos de planificación, los trabajos de reconstrucción propiamente tal, los materiales e
insumos necesarios para reconstruir y cuáles han sido los criterios para su adjudicación y
los montos involucrados.
Los últimos acontecimientos, que han involucrado a la Intendenta de la VIII Región, en el
uso de instrumentos de reconstrucción para resolver problemas de viviendas heredados
de otros períodos, hace más prioritario este punto.
3 Hacer participativo el proceso de reconstrucción
Crear una mesa de trabajo, que incluya a representantes de todos los partidos políticos y
organismos vivos de la sociedad civil, encargada de recabar, verificar y administrar la
información que, referida a la reconstrucción nacional, se entregue al país.
La fuente de la información debiera ser proporcionada por mesas de trabajo equivalentes
instaladas en regiones, las que a su vez tendrían su fuente de información en mesas de
trabajo pluri-representativas instaladas en cada una de las localidades afectadas.

4. 4 Descentralizar el proceso de reconstrucción
Entregar a las regiones los recursos que les permitan tener una mayor autonomía para
abordar el proceso de reconstrucción.
Crear incentivos tributarios en las regiones afectadas para promover la instalación de
nuevas industrias.
5 Potenciar el proceso de reconstrucción
La idea es no sólo lograr igualar las condiciones de vida anteriores al sismo en las
regiones y localidades afectadas, sino mejorarlas. Ello significa crear espacios más
sustentables en el largo plazo y resilientes ante la manifestación de amenazas latentes,
bajo un concepto de planificación integral, que considere la disminución de espacios
vulnerables desde un punto de vista físico-social y potencie las fortalezas locales. Esto
último debe incluir potenciar la gestión de riesgos en los niveles territoriales sub-
nacionales, con instrumentos e institucionalidad adecuados, que promuevan la prevención
de riesgos, la reducción de la vulnerabilidad y el fortalecimiento de la cohesión social.
6 Humanizar el proceso de reconstrucción
Esto significa no hablar de cifras sino de personas, no hablar de números sino de
localidades, no hablar de montos de inversión sino a quien va dirigida.
Esto significa también, escuchar a las personas y a las organizaciones sociales, de
manera que los cambios que sean necesarios de efectuar sobre la trama urbana y sobre
los instrumentos de planificación tengan una base social importante.
Por último esto también significa hacer una evaluación de cada uno de los campamentos
de emergencia y definir las correcciones que sean necesarias de hacer para afrontar el
próximo invierno.

5. 7 Solidarizar el proceso de reconstrucción
Esto significa:
a) Que el Estado se haga parte de los juicios que los afectados entablen contra los
profesionales y contra las empresas privadas responsables de los edificios dañados
(aunque éstos no hayan sido construidos a solicitud del propio Estado), y también contra
las empresas de servicios que no hayan entregado los servicios comprometidos (luz,
agua, gas, comunicaciones, concesionarias de autopistas, etc) y hayan cobrado dichas
prestaciones de servicios.
b) Atención psicológica gratuita por parte del Estado a las personas afectadas por el
terremoto hasta que sean dadas de alta por el médico tratante.
8 Liberalizar el proceso de reconstrucción
Facilitar la autoconstrucción (sobre todo cuando se cuente con un terreno), mediante el
otorgamiento de créditos y subsidios, en igualdad de condiciones que los otorgados para
los proyectos dirigidos y administrados por el Estado a través del MINVU.
Así, el afectado podría contratar directamente a los profesionales a cargo de los proyectos
y a la empresa a cargo de su construcción.
Además para esta modalidad se debiera1:
a) Eximir del pago de derechos municipales de construcción.
b) Eliminar el pago de impuestos de timbres y estampillas en permisos de edificación
para obras no superiores a 140m2 de superficie, cuando se trate de viviendas y
para obras no superiores a 60m2 cuando se trate de locales comerciales o
talleres.
1
Para una construcción de 140 m2, la eliminación de los impuestos a) y b) permitiría ahorrar alrededor de
$650.000 por vivienda.

6. c) Acelerar el proceso de revisión y aprobación de proyectos en las Direcciones de
Obras Municipales, reduciéndolos a:
o Siete días si cuentan con informe de Revisor Independiente.
o Quince días si no cuentan con Informe de Revisor Independiente
MENSAJE FINAL
A un año de la tragedia que afectó a nuestro país, el Partido Progresista reitera la
necesidad de que este proceso de reconstrucción sea participativo, descentralizado y
llevado adelante con prolijidad y responsabilidad. Cientos de familias, miles de personas,
esperan de sus autoridades y parlamentarios, celeridad a la hora de resolver los graves
problemas generados.
A juicio nuestro, la autoridad ha actuado con lentitud y poca prolijidad. Sin embargo, el
juicio político quedará en manos de los ciudadanos, llegada la hora. Por lo pronto, para
los y las progresistas, la urgencia es aunar esfuerzos para avanzar en llegar con
respuestas y soluciones a las miles de familias que aún esperan en campamentos
temporales, y en potenciar un desarrollo equilibrado, sustentable y equitativo en las zonas
afectadas.
Comisión de Vivienda y Ordenamiento Territorial
Partido Progresista (PRO)
26 de febrero 2011