La Luna y Marte ofrecen recursos naturales valiosos para la colonización humana. La Luna contiene agua, oxígeno, hierro, níquel, titanio y otros minerales. Marte tiene atmósfera hostil pero podría ser habitable para humanos y ofrece recursos para colonias autosuficientes. Ambos cuerpos celestes son candidatos para exploración y establecimiento de bases espaciales permanentes debido a sus recursos naturales.