Las relaciones interespecíficas se establecen entre especies diferentes dentro de un ecosistema y generalmente involucran la satisfacción de necesidades como alimentación, ayuda, competencia o defensa. Estas relaciones pueden darse entre individuos muy distintos e incluso de reinos diferentes, como plantas y animales, y a menudo involucran competencia por recursos como alimento y espacio entre especies depredadoras y presas.