Kyle estaba a punto de suicidarse el día que conoció a su futuro mejor amigo. Cuando unos matones lo atacaron, el narrador lo ayudó y se hicieron amigos, salvando a Kyle de una decisión fatal. Años más tarde, en el discurso de graduación, Kyle contó esta historia para agradecer a su amigo por cambiar su vida con un simple acto de bondad.