Este poema describe a doña Teresa, una señora presumida que pasa horas en la peluquería y le encanta tomar el té con pastas finas con sus amigas. Todos la describen como elegante y coqueta, siempre va a reuniones con guantes y chaqueta. Los sábados, queda con su amigo Roberto para ir a bailar el vals, al teatro o a un concierto. Su perro se llama Teté y mueve su cola cuando lo saludan.