La historia cuenta la historia de una familia afectada por las cajas de juguete heredadas de los abuelos. El abuelo sufrió una discapacidad tras la guerra que le sumió en una depresión. Sus cajas de soldaditos y la caja musical de la abuela se convirtieron en objetos de maldición que parecen perseguir a los miembros de la familia a través de los años, provocando fenómenos paranormales y un destino desastroso para cualquiera que las posea.
Varias piezas de teatro breve que nacen del encuentro de los personajes de mi obra VEINTE MONÓLOGOS ESTUDIANTILES Y UN DIÁLOGO INESPERADO. Teatro juvenil.
Varias piezas de teatro breve que nacen del encuentro de los personajes de mi obra VEINTE MONÓLOGOS ESTUDIANTILES Y UN DIÁLOGO INESPERADO. Teatro juvenil.
Revista Leer por Leer # 3 Interiores. Uriel Amaro Ríos.Uriel Amaro
Revista con publicaciones de niños, jóvenes y señoras de la región serrana del estado de Durango, México.
Una experiencia de lectura y escritura en un contexto rural marginado.
Un cuento estilo gótico, basado en un hecho real que me platicara mi mejor amigo, Alejandro Lucero, a quien agradezco compartirme su experiencia y acercamiento con el sufriente mundo de los fantasmas.
A la memoria de las relaciones amorosas que se convierten en fantasmas que encuentran la luz en la belleza del recuerdo y en la experiencia y el aprendizaje.
A Gaudencio Escamilla, en los recuerdos de mi madre.
Ponencia en I SEMINARIO SOBRE LA APLICABILIDAD DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSITARIA. 3 de junio de 2024. Facultad de Estudios Sociales y Trabajo, Universidad de Málaga.
Presentación de la conferencia sobre la basílica de San Pedro en el Vaticano realizada en el Ateneo Cultural y Mercantil de Onda el jueves 2 de mayo de 2024.
IMÁGENES SUBLIMINALES EN LAS PUBLICACIONES DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁClaude LaCombe
Recuerdo perfectamente la primera vez que oí hablar de las imágenes subliminales de los Testigos de Jehová. Fue en los primeros años del foro de religión “Yahoo respuestas” (que, por cierto, desapareció definitivamente el 30 de junio de 2021). El tema del debate era el “arte religioso”. Todos compartíamos nuestros puntos de vista sobre cuadros como “La Mona Lisa” o el arte apocalíptico de los adventistas, cuando repentinamente uno de los participantes dijo que en las publicaciones de los Testigos de Jehová se ocultaban imágenes subliminales demoniacas.
Lo que pasó después se halla plasmado en la presente obra.
Documento sobre las diferentes fuentes que han servido para transmitir la cultura griega, y que supone la primera parte del tema 4 de "Descubriendo nuestras raíces clásicas", optativa de bachillerato en la Comunitat Valenciana.
1. TAN SOLO JUGUETES
Mi abuelo fue militar de la II Guerra Mundial. Por desgracia perdió su brazo
izquierdo tras una explosión. Por entonces, mi abuela estaba embarazada de
mi madre, que nació poco tiempo después de que regresara mi abuelo tras
acabar la guerra en 1945. Mi abuelo no superó lo de su brazo. Su discapacidad
le sumió en una enorme depresión. Lo recuerdo muy triste, solo pronunciaba
ordenes de guerra. Mi abuela no convivía con mi abuelo, pues se había vuelto
agresivo, arisco y obsesivo. Mi madre me contó cómo Justa, mi abuela, lloraba
por él. El tiempo hizo que esta separación llevara a mi abuelo Antonio a un
estado completamente fuera de la cordura y de toda razón, lo que acabó con
su vida.
Una caja extraña, totalmente dorada contenía en su interior una colección de
soldados tallados en madera, que servían de elementos para planificar ataques
durante la guerra. Se encontraba en un cajón del sótano de la casa de mis
abuelos. Mi abuela Justa me lo regaló, para ella no tenía valor, y mi interés por
estos era excesivo. Un día, estando en el sótano jugando con los soldaditos, mi
abuela comenzó a sentirse mal , murió de infarto.
Mi hermana tiene desde hace años una gran cantidad de muñecas, pero mi
abuela le regaló una preciosa cajita musical con una pequeña bailarina que
daba vueltas al son de la música. Jugábamos durante largas horas con los
juguetes heredados de nuestros abuelos. Pero su casa, vacía se convirtió en un
lugar inhóspito. Me recordaba muchos malos momentos ver la butaca donde se
sentaba mi abuelo. Mi madre hoy en día sufre alzhéimer y solo recuerda
nuestras cajas de juguete. Mis hijos disfrutan con ellas tanto como lo hacíamos
mi hermana y yo.
Rebuscando entre los cajones encontré una foto. Mis abuelos, uno con el
soldadito en la mano y mi abuela poniéndole su caja en la oreja de mi abuelo
para que escuchara la música. Guardé la foto en la cartera, después de
habérsela mostrado a mi madre que se asusto y se puso nerviosa. Le di sus
pastillas, quizás el no poder recordarlo bien la puso inquieta.
Una noche, mientras dormía con mi mujer, escuché un sonido familiar que
provenía del salón, era una música dulce, pero durante la noche se hacia
desasosegante y bajé a comprobar que era aquello. La caja de mi abuela, que
se había abierto y sonaba esa musicalidad. Por otra parte, todos los soldaditos
se encontraban esparcidos por el suelo. Me extrañó , pero pensé que pudo
haberse caído del estante. Pues bien, esto ocurrió durante las siguientes cuatro
noches. Me empezaba a asustar y no entendía este fenómeno que se producía
cada noche. Decidí dormir en el salón y ver que ocurría, nada ocurrió esa
noche. Hablé con mi madre, y a pesar de su enfermedad me facilitó una
información muy jugosa que me dejó aterido.
Ambas cajas eran muy preciadas por mis abuelos, pues pertenecían a sus
antepasados, pero sobre estas caía una maldición. Mi madre me dijo que
buscara fotos mías de pequeño junto a las cajas, así que telefoneé a mi
hermana que tenía una foto conmigo y con las dos cajas. Justo detrás de
2. nosotros dos manchas blancas a aparecieron. Eran extrañas manchas que
cuando las miramos fijamente conformaban la imagen de mis abuelos. Una
sensación de miedo me invadió
Decidí que mis hijos no jugaran más con estas y creí conveniente quemarlas
para que no las utilizaran nadie más. Se consumió todo en el fuego. Esa noche
volvió a sonar el mismo ruido de la caja musical y los soldaditos espaciados
por el suelo. No podía deshacerme de ellos. Una fuerza sobrenatural me
derribó y sentí escalofríos. Nadie en mi casa escuchaba nada. Me sumí en un
profundo sueño. Ahora estoy viendo cómo mis hijos juegan con las cajitas que
les conducirán a un final desastroso, pues todo aquel que posee las cajas
quedará encerrados en estas, como un alma errante, sin vida. La siguiente
será mi hermana. Cajas malditas que persiguen a una familia, maldita desde
hace siglos.
AUTORES: AGUSTÍN NARVÁEZ Y CARMEN PALMERO