Para estudiar correctamente, es importante mantener una buena salud física y mental, alimentarse adecuadamente, descansar y estudiar en un lugar tranquilo. Además, es necesario organizar bien el tiempo, distribuir las materias, empezar con las más difíciles y utilizar métodos como prelectura, lectura analítica, síntesis y socialización. También es útil subrayar, resumir e hacer mapas conceptuales.