El Templo de Edfú en Egipto fue construido entre los años 237 a.C. y 57 a.C. por varios gobernantes de la dinastía Ptolemaica. El templo sigue el estilo arquitectónico egipcio clásico pero con mayor armonía y equilibrio debido a las influencias helénicas. Es el templo mejor conservado de Egipto, con características como un gran pilono, patios, dos salas hipóstilas y salas dedicadas a diferentes dioses.