Un terremoto de magnitud 9.0 sacudió la costa de Japón el 11 de marzo de 2011, generando un tsunami de hasta 10 metros que causó grandes daños en Japón y otros 20 países costeros. El tsunami destruyó infraestructura, viviendas y negocios en varias prefecturas japonesas, cobrando más de 9,000 vidas. Además, el terremoto provocó la erupción de un volcán en Indonesia y pequeños daños en Chile, Ecuador e Indonesia por olas causadas.