Sofía Duarte, de 17 años, describe su experiencia positiva participando en una misión en Río Grande, donde pudo conocer nuevas personas y compartir su fe. La hermana Mónica Cuomo también disfrutó de su primera misión en el sur, a pesar de extrañar a su familia, y apreció conocer las realidades de las personas a las que sirvieron. Belén también quedó conmovida por la gente de Río Grande y agradecida por la experiencia.

1. ENERO 2020
MISION RIO GRANDE
¡con un oído en el pueblo y el otro en el evangelio!
MI NOMBRE ES SOFÍA DUARTE (CIUDAD EVITA),
TENGO 17 AÑOS.HABER PARTICIPADO DE ESTA
MISIÓN FUE UNA DE LAS EXPERIENCIAS MÁS
HERMOSAS PARA MÍ.
FUE LA PRIMERA VEZ QUE ME FUI TAN LEJOS DE
CASA, SI BIEN LA EXPERIENCIA DE ENTREGAR LA
VIDA AL BARRIO Y DE MISIONAR Y SENTIRME
MISIONADA SON COSAS COMUNES EN MI
COMUNIDAD, ESTA VEZ LA SENTÍ EN LO MÁS
PROFUNDO DE MI CORAZÓN. ME TOCÓ ESTAR
CON UN GRAN GRUPO DE PERSONAS QUE TIENEN
MUCHAS GANAS DE CRECER EN SUS ACTIVIDADES
Y EN SU INTERIOR Y QUE TODA LA SEMANA
COMPARTÍAMOS LA VIDA. LO QUE MÁS ME
GUSTÓ FUE HABER VIAJADO TANTOS KILÓMETROS
ENCONTRANDO A JESÚS EN MUCHÍSIMAS CARAS
NUEVAS, TANTO EN LA FAMILIA QUE ME RECIBIÓ
EN SU CASA, LAS PERSONAS QUE NOS HABLABAN
DESDE LA VEREDA Y TODOS LOS JÓVENES Y
ADULTOS DE LA COMUNIDAD DE RÍO GRANDE. ME
ENCANTÓ PODER COMPARTIR CON GENTE QUE
TRABAJA POR LO MISMO QUE NOSOTROS Y
ENCONTRAR EN SUS HISTORIAS DE VIDA A JESÚS.
VOLVÍ CON MUCHAS GANAS DE SEGUIR
COMPARTIENDO LA VIDA TANTO EN MI
COMUNIDAD COMO EN DONDE SEA QUE JESÚS
ME ENVÍE AHORA. ESTOY MUY AGRADECIDA POR
LA GENTE QUE ME TUVO EN CUENTA PARA ESTA
TAN HERMOSA EXPERIENCIA.
Este año misionamos con 11 jóvenes de La Boca, Almagro, San Justo y
Morón y dos Hijas de María Auxiliadora: Hna. Lucila de la Cueva (La
Boca, Bs.As) y Hna. Mónica Cuomo (Mar del Plata). Se formó un hermoso
grupo de misioneros alegres, a los que se sumaron algunos jóvenes de
una margen y otra del Río Grande.
Me impactó el “paso de Jesús”
• que alegró a Antonia en su soledad, sus penas y su sonrisa y sed
de la Palabra de Dios
• aquellos que hicieron una pausa en el trabajo para conversar y
escuchar el Evangelio
• Maxi, que siendo de una familia de las que espera que cada hijo
elija la religión, enseguida aceptó la invitación para hacer
Catequesis
• aquellos que se alegraron por la visita porque, al mudarse, se
dejaron estar en su ser Iglesia…
En el área misionada, muchas familias “invadieron” esas tierras que
están del otro lado del Río Grande y se sienten muy nuevas en el lugar
y, muchas veces, sin amistades, sumado al clima que influye para que
uno se tiente a encerrarse. La mayoría de los pobladores son
Evangélicos, pues se fueron llamando unos a otros para ir a vivir allí. Los
católicos son minoría. En nuestro ir casa por casa saludamos y
respetamos a los evangélicos y ellos hicieron lo mismo. Así sucede
también en algunas familias en que los niños van a la Escuelita
Evangélica, en casa, no siempre lo comparten por ‘respeto’… pero, al
final de la misión me empezó a dar vuelta en la cabeza y en el corazón
que no basta con respetar la ‘jurisdicción’ de cada uno: Jesús es el mismo
y clama por la unidad y nos dice: ‘Soy Yo el que camino por estas calles,
¿no me ven?’ ¿Qué tememos? ¿Quién o quiénes darán el primer paso?
De hecho, un Pastor Evangélico nos preguntó si teníamos algún grupo
de la Renovación Carismática Católica ya que en Corrientes habían
trabajado mucho juntos.
Hermana Mónica Cuomo
ESTÁ FUE MI PRIMERA MISIÓN, MI PRIMERA
VEZ EN EL SUR Y PRIMERA LEJOS DE MI
FAMILIA, PERO CREO QUE FUE UNA HERMOSA
EXPERIENCIA. CONOCÍ GENTE QUE HIZO QUE
ME CONMOVIERA EL CORAZÓN, QUE
QUISIERA GRITAR POR ELLOS Y QUE QUISIERA
QUEDARME, PERO COMO NO PUDE
QUEDARME HIZO QUE NACIERA EL OTRO
SENTIMIENTO, EL QUERER VOLVER. ME LLEVO
SONRISAS, ABRAZOS, MATES Y CHARLAS
PARA SEGUIR CRECIENDO Y
RECORDANDOLOS ACÁ EN MI REALIDAD,
CONOCER SUS REALIDADES FUE UN ANTES Y
UN DESPUÉS, QUE HICIERA QUE ME DIERA
CUENTA DE MUCHAS COSAS. SINCERAMENTE,
CREO QUE MAMÁ MARÍA ME PROPUSO ESTO,
ELLA LO HA HECHO TODO, QUE SABÍAS
PALABRAS USÓ DON BOSCO... CONFÍEN EN
ELLA Y VERÁN QUE SON LOS MILAGROS Y
POCO A POCO LO COMPRENDO, NO SÉ QUÉ
ME DEPARA EXACTAMENTE LA VIDA, NI CON
QUIÉNES ME VOY A ENCONTRAR PERO TENGO
UNA BUENA GUÍA QUE ME ACERCA CADA VEZ
MÁS A ESE JESÚS AMIGO QUE TODOS
MERECEMOS CONOCER. AGRADEZCO DE
CORAZÓN A LAS HERMANAS QUE NOS
RECIBIERON Y A ESAS DOS FAMILIAS QUE ME
DEJARON BENDECIR SUS CASAS, A ESE
HUMILDE ORATORIO Y LA MARAVILLOSA
GENTE DE RÍO GRANDE. CON MUCHO
CARIÑO,
BELÉN (ALMAGRO)