La nube ofrece almacenamiento y procesamiento remotos de datos que pueden ser accedidos desde cualquier dispositivo a través de Internet. Los usuarios pueden compartir información globalmente y acceder a servicios como música, videos, procesadores de texto sin necesidad de software o hardware específicos. Sin embargo, la información almacenada en la nube puede estar sujeta a piratería y los derechos de autor pueden ser ambiguos.