Los Tratados de Libre Comercio (TLC) son acuerdos que regulan el intercambio entre países para incentivar el comercio y la inversión. Los TLC benefician sectores como la agricultura, lácteos, textiles y servicios pero perjudican a la agricultura local que no recibe subsidios como en EEUU. El TLC con EEUU abre el mayor mercado mundial pero también genera competencia para sectores sensibles y puede afectar a pequeños agricultores.