El documento describe una nueva tecnología de trenes llamada Hydrail que usa hidrógeno en lugar de combustibles fósiles para impulsarse. Esta alternativa podría reducir significativamente la contaminación de los trenes y ayudar a cumplir los objetivos globales de reducción de emisiones de carbono, al tiempo que requiere poca nueva infraestructura. Hydrail está siendo investigada y desarrollada actualmente en varios países como una solución ecológica potencial para el transporte público.