Este documento resume la historia del movimiento ambiental en Venezuela desde las primeras organizaciones en la década de 1920 hasta la actualidad. En los años 80, el activismo ambiental en Venezuela comenzó a enfocarse en problemas cotidianos más que en la conservación, dando lugar a nuevas organizaciones. En las décadas de 1990 y 2000, el número de organizaciones ambientales creció exponencialmente debido a importantes cumbres internacionales sobre el medio ambiente y una mayor conciencia pública. Sin embargo, el movimiento ambiental venezolano aún enfrenta retos como falta de
Documento realizado en el marco del Proyecto "Fortalecimiento y articulación del sector ambiental en tres regiones de Venezuela". Co-financiado por la Unión Europea. Ejecutado conjuntamente por Fundación Tierra Viva, Fundación Aguaclara, BioParques y Vitalis.
Aportes de las ONG Ambientales al Conocimiento y a la InvestigaciónRed ARA Venezuela
Presentación realizada por Omar Hernández, Director Ejecutivo de FUDECI, el 16 de septiembre de 2009 en el auditorio de la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales (El Marqués, Caracas).
Para escuchar el audio de esta presentación, visite este enlace:
http://bit.ly/BnMJW
Para más información escriba a:
redara.venezuela@gmail.com
Fundación Tierra Viva empezó en 2010 la ejecución del Proyecto Redes Ambientales, fortalecimiento y articulación del sector ambiental en tres regiones de Venezuela con el co-financiamiento de la Unión Europea, teniendo como socios a las ONG venezolanas BioParques, Vitalis y Fundación Agua Clara, y de aliados – entre otros - a la Red de Organizaciones Ambientales No Gubernamentales de Venezuela (Red ARA). El objetivo general del proyecto es fortalecer el sector ambiental en Venezuela para mejorar la incidencia de los procesos de divulgación y educación ambiental orientados a la conservación de los recursos naturales y mejoramiento de la calidad de vida. Entre las actividades realizadas está la edición del Directorio de ONG Ambientales de Venezuela, el cual cuenta con dos ediciones, la de 2010 y 2012. En la edición de 2012 se registraron 152 organizaciones, y se presenta información detallada de 76, que equivale, respectivamente, a un 16% y 24% más que en el directorio de 2010.
Saludos, mi nombre es Rafael Peñaloza Montilla, soy de Maracaibo – Venezuela, Sociólogo de Profesión y Ambientalista de Acción.
En esta oportunidad presento mi trabajo para ser evaluado el Modulo 2 del curso «Búsqueda y Gestión de la Información en la Web», escogiendo como referencia de búsqueda “Sociología Ambiental”
Aquí les dejo mi trabajo
Jardín Botánico - El Único Bosque que le queda a Maracaibo
Un repaso histórico al movimiento ambiental venezolano
1. Un Repaso Histórico al Movimiento Ambiental Venezolano
A propósito de los 25 años de la organización
Azul Ambientalistas el 01 de septiembre de
2011, que se ha convertido en referencia en el
Occidente de Venezuela, es apropiado hacer
una revisión histórica del movimiento ambiental
en este país suramericano.
En Venezuela se puede considerar como
organizaciones pioneras en el área ambiental,
ecológica o conservacionistas a la Sociedad
Venezolana de Ciencias Naturales (1929), la
Sociedad de Ciencias Naturales La Salle (1940),
la Fundación Phelps (1949) y la Fundación La
Salle de Ciencias Naturales. Todas ellas se dedicaron al estudio, investigación y
conservación de especies naturales propias de este país. No tenían la intención, en ese
momento, de sensibilizar o concientizar a la población de la importancia del medio ambiente
en la vida del ser humano.
En las décadas siguientes no cambio mucho el carácter conservacionista y de investigación
del movimiento ambiental venezolano, aunque no se debe desmeritar los aportes del mismo
hasta ese momento. La importancia que tomaron los parques nacionales en Venezuela fue
inculcada por estas organizaciones, gracias a los aportes que dieron para resaltar la
importancia de conservar estos espacios naturales. Las organizaciones más resaltantes en
esa época fueron la Fundación Científica Los Roques (1963) Audubon de Venezuela (1970)
la Sociedad Ecológica-Conservacionista de Aragua (1972) y la Sociedad Conservacionista de
Sucre (1975).
Pero todo cambio en la década de los 80’s, ya las acciones de Greenpeace y Amigos de la
Tierra estaban repercutiendo en el mundo y las personas veían con mas preocupación la
degradación de la naturaleza y lo importante que es tomar acciones al respecto. En
Venezuela comienza el activismo ambiental distinto a lo científico-conservacionista, y posa
su mirada hacia problemas más cotidianos y que muchos venezolanos viven día a día. En
este periodo nacen organizaciones como la Sociedad Amigos del Arbol-SADARBOL (1984),
Azul Ambientalistas (1986), Provita (1987) y la Sociedad Científica Amigos del Parque
Nacional Henri Pittier (1988).
Ya en la última década del siglo XX y la primera del XXI, la creación de organizaciones
ambientales, ecológicas y conservacionistas se dispara exponencialmente. Esta situación es
gracias a la madurez del discurso y el agotamiento político-ideológico del Estado Interventor
y Benefactor en esta materia. Además que se celebraron en 1992 y 2002 importantes
cumbres sobre el medio ambiente que impulso con fuerza la concientización adecuada para
organizar a la ciudadanía alrededor del ambiente y el público en general comenzó a exigir
medidas ambientales para sus problemas cotidianos. Para estas décadas nacen la
Fundación Tierra Viva (1992), el Programa Andes Tropicales (1995), la Fundación Agua
Clara (2000), Bioparques (2002), la Fundación La Tortuga (2000) y la Sociedad Venezolana
de Derecho Ambiental (2007).
2. Los aportes han sido innumerables, desde resaltar la importancia de la conservación de la
naturaleza, hasta los diagnósticos ambientales de Venezuela, pasando por los significativos
aportes en la Educación y Gestión Ambiental, Comunicación Ambiental, Legislación
Ambiental, y un largo e incontable etcétera. Pero sin duda los grandes retos del movimiento
ambiental venezolano para que afronte los retos que se le presentan son la falta de
presupuesto, personal insuficiente para sus labores y la poca cooperación entre las
instituciones.
Ojala que en las décadas que vengan se vea un movimiento ambiental venezolano
superando estos retos y maximizando sus virtudes y logros. No queda otro camino ante una
ciudadanía consciente de su realidad ambiental y un Estado empeñado en basarse en una
economía minero-extractiva con énfasis en la explotación del petróleo y de otros recursos
naturales no renovables.
Rafael Peñaloza Montilla | ANCA24