Los volcanes se forman cuando el magma, la roca fundida en el interior de la Tierra, sale a la superficie. Existen tres tipos de volcanes clasificados según la viscosidad del magma y la violencia de sus erupciones: volcanes hawaianos con erupciones tranquilas, estrombolianos con erupciones más violentas, y peleanos con erupciones muy explosivas. Incluso cuando no hay erupciones, se manifiesta el vulcanismo atenuado a través de fumarolas, fuentes termales y géiseres.