El niño llega a la escuela con moretones en el rostro en dos ocasiones. La primera vez explica que dormía en la misma cama que sus padres y hermano, y que su padre lo golpeó cuando le preguntó si estaba dormido mientras tenía relaciones con su madre. La maestra le aconseja que se quede callado la próxima vez. Al día siguiente llega con el otro ojo morado, explicando que se quedó callado pero su padre lo golpeó de nuevo. La tercera vez llega más golpeado, contando que se quedó call