2. BIOGRAFÍA
Profesó en los Agustinos Recoletos el 21 de septiembre de 1864 en
Monteagudo (Navarra), donde llegó a ser prior del monasterio. Fue ordenado
sacerdote en Manila (Filipinas) el 3 de junio de 1871 y llegó a ser un misionero
reconocido. Sirvió como vicario Apostólico de Casanare y fue nombrado
Obispo de Pinara (Colombia) el 23 de octubre de 1893. Fue obispo de Pasto
(Colombia) el 2 de diciembre de 1893. Fue querido en su diócesis por su
generosa caridad. Juan Pablo II lo proclamó santo en 1992.
3. San Ezequiel Moreno y Díaz O.A.R. (Alfaro, 9 de
abril de 1848 - † Monteagudo, Navarra, 19 de
agosto de 1906) fue un sacerdote agustino
recoleto español, venerado como santo en la
Iglesia católica. Hoy, el Santo es invocando como
patrón de los que padecen cáncer.
Como la mayoría de jerarcas de la Iglesia católica
colombiana, Ezequiel Moreno se alineó con las
ideas del gobierno conservador del momento.
Durante la Guerra de los Mil Días usó sus
escritos y predicaciones para atacar al Partido
Liberal Colombiano y para llamar a los católicos
a "defender su religión con Remingtons y
machetes", prometiendo absolución automática.1
4. INTERVENCION EN LA POLITICA
COLOMBIANA
La Orden de Agustinos Recoletos tiene una de sus raíces fundacionales en Colombia. A
principios del siglo XVII surgió entre los agustinos neogranadinos un movimiento espiritual
muy afín al que a partir de 1588 dio origen a la Orden en Castilla». Y tanta era la
afinidad, que «los colombianos acomodan su tenor de vida a la Forma de vivir de los
españoles y en 1629 se funden con ellos en una misma Congregación» (Mtz. Cuesta 69).
La Provincia colombiana se desarrolló normalmente durante dos siglos, pero con motivo de
la guerra de la Independencia y el expolio de los bienes religiosos dispuesto por el Gobierno
republicano, fue viniendo a menos, de modo que en 1882 sólo quedaban trece
miembros, que vivían aislados, cada uno en su parroquia, más vinculados a la diócesis que a
su Orden. Dos de ellos mantenían el sagrado fuego agustiniano. El anciano padre Victorino
Rocha atendía La Candelaria en Bogotá, iglesia que él había sabido salvar de expolios
gubernativos y de ciertas avideces diocesanas. Y el padre Juan Nepomuceno
Bustamante, que en 1876 y en 1884 viajó a Roma y a España, buscando refuerzos para
restaurar la Orden en Colombia.
5. OBRAS
La misión del Profeta Ezequiel consistió principalmente en combatir la idolatría, la corrupción por las malas
costumbres, y las ideas erróneas acerca del pronto regreso a Jerusalén. Para consolarlos pinta el Profeta, con
los más vivos y bellos colores, las esperanzas de la salud mesiánica.
Divídese el libro en un Prólogo, que relata el llamamiento del profeta (caps. 1-3), y tres partes principales. La
primera (caps. 4-24) comprende las profecías acerca de la ruina de Jerusalén; la segunda (caps. 25-32), el
castigo de los pueblos enemigos de Judá; la tercera (caps. 33-48), la restauración.
"Es notable la última sección del profeta (40-48) en que nos describe en forma verdaderamente geométrica la
restauración de Israel después del cautiverio: el Templo, la ciudad, sus arrabales y la tierra toda de Palestina
repartida por igual entre las doce tribus" (Nácar-Colunga).
Las profecías de Ezequiel descuellan por la riqueza de alegorías, imágenes y acciones simbólicas de tal
manera, que S. Jerónimo las llama "mar de la palabra divina" y "laberinto de los secretos de Dios".
6. MILAGROS
San ezequiel ayudaba a las personas enfermas que tenian cancer, el era muy ge
generoso y humilde
TESTIMONIO
La saludo cariñosamente deseándole salud y bienestar.
Soy AMPARO ECHAVARRIA GARGIA. c.c. 30.279.001 de Manizales.
Ingresé a la Fundación San Ezequiel Moreno en condiciones lamentables de salud y de ánimo, ya que padezco
de cáncer de tiroides. Desde que estoy asistiendo a esta Institución, he aprendido a superar mí enfermedad y a
sacar adelante a mis hijos vendiendo el Kit de aseo que me enseñaron a preparar en los talleres que dictan en
la fundación.
En estos momentos gracias a Dios y a San Ezequiel Moreno, que han hecho en mí el milagro de gozar la vida
y ánimo para salir adelante.
La Fundación San Ezequiel Moreno directivas, voluntariado y colaboradores han jugado un papel muy
importante en mí recuperación.
Cordial saludo
Amparo Echevarria García