3. Una exhortación a examinar las
Escrituras
La importancia de este tema
El propósito de las profecías de
Cristo
Algunas Profecías seleccionadas
sobre Cristo y su cumplimiento
Lecciones practicas de nuestra
presente lección
13. Luigi Cascioli es un ex
estudiante a sacerdote
católico, autodidacta en
temas religiosos, estudioso
de libros sagrados,
Luigi Cascioli agrónomo, propietario de
una empresa constructora y
hoy jubilado. Nacido en
1934, quien hoy esta
jubilado y ateo.
14. “Deseo terminar con el cristianismo
porque nos ha llevado al
oscurantismo y está contra el
progreso y la evolución. El
cristianismo ha sido negativo en
todos los sentidos para la humanidad
y se ha basado en puras mentiras. Si
libro a la sociedad de este mal, sería
un favor para la futura generación.”
15. “En mi libro 'La fábula de Cristo' demostré
que Jesús no existe. Mi objetivo es tener
una sentencia que confirme esta tesis. Si
Cristo no existió, automáticamente cae la
Iglesia porque no puede demostrar la
crucifixión de alguien inexistente. No
existe el cuerpo (refiriéndose al cuerpo del
personaje mitológico Jesús), ni hay
tampoco el pecado original, ni la
eucaristía, ni el pan de Cristo y la teología
se derrumba. Esto significa que la Iglesia
está basada en nada”, basada en mentiras
diríamos nosotros.
27. Los eruditos han documentado
más de 300 profecías
mesiánicas en el Antiguo
Testamento
(Lockyer, 1973, p. 21).
28. Para mostrar que el cumplimiento de las
profecías por Cristo es mucho más que
una coincidencia, se ha usado la ciencia
moderna de la probabilidad a 8 de las 300
profecías que registra el Antiguo
Testamento que fueron cumplidas en la
persona de Jesús de Nazaret.
Encontramos que la probabilidad de que
un hombre haya vivido hasta el tiempo
presente y cumplir 8 de estas profecías es
de 1 en 1017 o sea 1 en
100.000.000.000.000.000
29. Isaías profetizo
aproximadamente 700 años
antes de Cristo
Zacarías aproximadamente
400 años antes de Cristo
Salmos aproximadamente
1000 años antes de Cristo
31. Y pondré enemistad entre ti y
la mujer, y entre tu simiente
y su simiente; él te herirá en
la cabeza, y tú lo herirás en
el calcañar.
32. Pero cuando vino la plenitud
del tiempo, Dios envió a su
Hijo, nacido de mujer,
nacido bajo la ley…
33. Pero tú, Belén Efrata, aunque eres
pequeña entre las familias de Judá, de
ti me saldrá el que ha de ser
gobernante en Israel. Y sus orígenes
son desde tiempos antiguos, desde los
días de la eternidad.
34. Y también José subió de Galilea, de la
ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad
de David que se llama Belén, por ser él
de la casa y de la familia de David, para
inscribirse junto con María, desposada
con él, la cual estaba encinta.
35. Por tanto, el Señor mismo os dará
una señal: He aquí, una virgen
concebirá y dará a luz un hijo, y
le pondrá por nombre Emmanuel.
36. Y al sexto mes, el ángel Gabriel fue
enviado por Dios a una ciudad de
Galilea llamada Nazaret, a una virgen
desposada con un hombre que se
llamaba José, de los descendientes de
David; y el nombre de la virgen era
María.
37. Regocíjate sobremanera, hija de Sion. Da
voces de júbilo, hija de Jerusalén. He
aquí, tu rey viene a ti, justo y dotado de
salvación, humilde, montado en un
asno, en un pollino, hijo de asna.
38. Entonces trajeron el pollino a
Jesús y echaron encima sus
mantos, y Jesús se sentó
sobre él.
39. Aun mi íntimo amigo en quien
yo confiaba, el que de mi pan
comía, contra mí ha levantado
su calcañar.
40. Y enseguida se acercó a Jesús y dijo:
¡Salve, Rabí! Y le besó. Y Jesús le
dijo: Amigo, haz lo que viniste a
hacer. Entonces ellos se acercaron,
echaron mano a Jesús y le
prendieron.
41. Y les dije: Si os parece bien,
dadme mi paga; y si no,
dejadla. Y pesaron como mi
salario treinta piezas de plata.
42. Entonces uno de los doce, llamado
Judas Iscariote, fue a los principales
sacerdotes, y dijo: ¿Qué estáis
dispuestos a darme para que yo os lo
entregue? Y ellos le pesaron treinta
piezas de plata.
43. Puedo contar todos mis huesos.
Ellos me miran, me observan;
reparten mis vestidos entre sí,
y sobre mi ropa echan suertes.
44. Y habiéndole crucificado, se
repartieron sus vestidos,
echando suertes; y sentados,
le custodiaban allí.
46. Juan 19:36
Fueron, pues, los soldados y quebraron las
piernas del primero, y también las del
Porque esto sucedió para
otro que había sido crucificado con
que se cumpliera la Escritura:
Jesús; pero cuando llegaron a Jesús,
NO SERA QUEBRADO HUESO SUYO.
como vieron que ya estaba muerto, no le
quebraron las piernas;
47. Se dispuso con los impíos su
sepultura, pero con el rico fue en
su muerte, aunque no había
hecho violencia, ni había engaño
en su boca.
48. Y al atardecer, vino un hombre rico de Arimatea,
llamado José, que también se había convertido
en discípulo de Jesús. Este se presentó a Pilato
y le pidió el cuerpo de Jesús. Entonces Pilato
ordenó que se lo entregaran. Tomando José el
cuerpo, lo envolvió en un lienzo limpio de lino, y
lo puso en su sepulcro nuevo que él había
excavado en la roca, y después de rodar una
piedra grande a la entrada del sepulcro, se fue.