2. Solas y solos (el club del amor)
Uno está solo cuando en busca de la atracción por lo diferente se da cuenta de que
cuando ella o él están muy cerca es insoportable. La libertad de buscar con quien pasarla
bien pero después ver que la vida es algo serio. El entretenerse y quitarle peso a las
circunstancias metiéndose en otro que no las tiene las mismas y escapando de las
propias. Uno busca esa persona que hace a la violencia de no poder mirarse más que en
la fugaz idea de querer huir en ella. Venir del lugar que se hace al pensarse en que ese
otro no es algo en verdad conocido con lo que es. Solo se puede estar reflejándose en
quien es una verdad. En quien nada separa so pretexto del deseo de la sensualidad. Se
busca lo diferente para romper vínculos familiares con los padres pero no se entiende
que eso es peor que padecer el problema de ese vínculo familiar. La rebeldía y el
disfrutar de los colores del raro convierte a ese otro raro en una pesadilla y una
calamidad. Y se queda uno solo porque saliendo de ese lugar siniestro de libertad se
especula aun con sitios en personas que tiene el mismo u otro tipo de diferencias que
nos dan otro modo de estar solos. Uno está solo con quien está porque lo elige para ello.
El temor a una vida respectiva con proyectos equivalentes de alguien que nos vea ser y
no ser más menos o un objeto hace a lo que llamamos la locura de una vida tranquila
pero que en verdad somete a un sufrimiento y al abandono del otro y del sí mismo. El
usar la carencia del otro para dar lo que no tenemos para darle porque no hay
comunicación verdadera. El olvidar que cuando nos miramos en alguien equivalente nos
da vergüenza o miedo de ser eso en lugar de estar atentos a los porqués y no huir hacia
lo extraño que nos deja de lado. El miedo a sentir amor o cariño como si ello fuera la
cárcel de las prohibiciones en lugar de verlas como las limitaciones del ser maduro que
se afianza ñeque no todo se puede frente a un igual porque es lo que somos y nos lo
hacemos a nosotros y no ya a un extraño de diversiones antojadizas y limites que se
transgreden a sí mismos por generarlos para luego romperlos y sufrirlos. El que fue
estimulado hacia lugares sin más que la excusa de evitar consignas que sin duda eran
equivocadas pero que nos equivocan aun mas al no usar su peso mal aplicado a nuestras
vidas a favor. Es que al otro no se lo piensa como una cosa sino que se lo comprende y
en ello se depende de que tenga lo más posible en común. Las personas no son
curiosidades para la libido sino gente que se aprende a querer. Y la presencia que nos
acompaña hacia problemas es la respuesta de que la vida está para hacerlos nuestros. Si
algo bello nos deja aislados en el alivio no deja de ser algo y lo bello ocurre en la
existencia de lo que no son mas que hechos que se encuentran en la vida de a dos. Y así
como en todo el ser dos se compone de equivalencias y agrupaciones debidas a lo
parecido o semejante que nos lo hacen identificar de esa manera los odios a la verdad
del serlo con otro que depende de ello. La vida genera estos encuentros y más que
huirles hay que tomarlos con la paciencia de lo que no es fácil pero que exige un trabajo
que entre dos es posible. El trabajo que nos da dignidad en la vida empieza por trabajar
en lo que nos une a cosas parecidas sin ser cosas nosotros para evitar ese trabajo.
Aprender a aceptar al que no nos va a hacer sentir más que lo que nos haría estar frente
a una cosa. Será que el objeto no tiene vida y siempre se va a vivir de la ilusión de ser
más que alguien en eso de sacarlo de su sitio humano. Lo humano es conocer hacia
fuera y no mirarnos como extrañezas. Hacia adentro los seres se miran y se estudian en
su connotación de quitarle sentido a lo externo. Entonces la isla los saca de ese mal
menor llamado sistema. Les evita solucionar cosas que suceden al buscar lo que es
necesario agoráis para vivir. Es un error consensuado de consumirse uno al otro y no de
consumir la realidad integrándose a ella. Es la elección equivocada porque mas que
elección es un alguien para justificar quedar solos son nada que los saque a ambos de
3. ello. Es el fetiche que se considera a sí mismo una veta del premio de jugar al
perseguirse luego de tenerse. Al tomarse como se toma una droga o como se ingiere una
curiosidad que excita hacia la desilusión de ser un pobre que no puede. Que se junta
para autoproclamarse poca cosa. Que se encierra entre los barrotes de no querer estar en
donde se está libre de verdad para hacer. La seguridad de no entender porque no se
entiende a quien no es como se es. La seguridad de no tener que buscar una seguridad.
La intención de esquivar el acompañamiento de alguien como se quiere ser. La excusa
de que nada importa porque el otro no nos importa más que en lo casual de no estar
solos sin una noción que nos permita decir que igual se está solo. Usar la mala elección
como excusa para aceptar que todo es igual. La soledad, solos y solas, es el miedo a no
estarlo.