La casi extinción de los indios de las fronteras de México y Estados Unidos se debió principalmente a las Guerras Apaches. Aunque las enfermedades traídas por los europeos y la conquista española causaron muertes, la mayoría de los indígenas murieron en los conflictos armados con el ejército estadounidense como las Guerras Apaches, dejando solo a un 1% de la población indígena original.