2. Edith Hellewell tenía 16 años y una madre que trabajaba en
televisión. Tenía un máster en maestría en manipulación
mediática, y era experta en prensa, retórica y relaciones
públicas lo que la había colocado como una celebridad de
los medios de comunicación. Presentaba el programa
doméstico “Cocina de Helle” donde cada lunes y miércoles
por la mañana enseñaba a los telespectadores una nueva
receta. Su trabajo la tenía completamente absorbida
descuidando la educación de su hija.
Debido a ese desapego y falta de interés de su madre, Edith
comenzó a rebelarse, mostrando un comportamiento
inadecuado, desoyendo los consejos de su madre y de las
amigas de su madre que se metían en todas las cosas que
ella hacía o dejaba de hacer.
3. Tenía continuas broncas con los profesores, con
prácticamente todos y se llevaba muy mal con una
compañera de colegio: Bertha O'Connell. Su archienemiga.
Una día a la hora de la comida Edith vertió un plato de
espaguetis a la carbonara por encima del pelo y cara de
Bertha que se puso a llorar y chillar histérica llamando a los
profesores. Expulsaron a Edith una semana del colegio, así
que tomó la decisión de abandonarlo definitivamente
porque su sueño era convertirse en una modelo famosa.
Pero dejar la escuela no fue suficiente para Edith en su
intento de conseguir la atención de sus padres, por lo que al
poco tiempo comenzó a incursionar en el mundo de las
drogas y la promiscuidad. Con dieciséis años se dedicaba a
flirtear con todo el que se le pusiera por delante ganándose
mala fama en el barrio.
4. Era la comidilla de todas las reuniones de vecinas y a ella le
daba absolutamente igual. En una de sus salidas nocturnas
conoció a un chico con el que comenzó una relación que no
duró mucho, pero si lo suficiente para que Edith
descubriera lo que de ahí en adelante sería una de sus
grandes pasiones: el sexo. Más de un marido de sus vecinas
la tuvo de compañera de jueguecitos, así que cuando Edith
oía cuchicheos a sus espaldas se reía.
La relación de sus padres estaba muy deteriorada porque la
famosa Sra. Hellewell estaba más tiempo delante de las
cámaras y de coctel en coctel que en su casa. Su marido
pidió el divorcio y se largó con una camarera que conoció
en el De Beer Garden, el local de moda del Londres de la
época.
5. Edith se quedó viviendo con su madre pero todos esos
esfuerzos de llamar la atención fueron en vano, por lo que
su siguiente paso fueron los actos de vandalismo, incendio,
robo y otros delitos… incluso acabó pasando condena
durante catorce días en una cárcel de Moscú por
desobediencia civil a la autoridad.
Para cometer este tipo de delitos es necesario conocer un
montón de habilidades como crimen, carterismo, arte &
diseño, pintar grafittis e incluso provocar incendios, pero
como sus padres no le hacían caso Edith a los 16 años tenía
mucho tiempo para estudiar todas esas habilidades que le
parecían mucho más interesantes que las tareas que en el
colegio le ponían los profesores cada lunes.
De hecho las botellas de Stolichnaya se convirtieron en sus
preferidas, siempre tenía dos o tres en casa vacías por si le
hicieran falta.
6. Todos esos delitos eran cubiertos rápidamente por su madre,
quien en vez de dedicarle más tiempo a su hija, solo se
limitaba a tapar sus errores y seguir ignorándola,
demasiado ocupada en ella misma para prestar atención al
rumbo que iba tomando la vida de su hija.
Cuando salió de la cárcel de Moscú, la madre empezó a
cansare de los problemas de su hija y sin tiempo para poder
corregirla, decidió enviarla a una escuela para niñas “con
problemas”.
En ese internado Edith pasaba la mayor parte del tiempo sola,
hasta que conoció a Dafne de Groot, una niña que al
parecer sufría del mismo abandono por parte de sus padres.
7. Edith y Dafne se hicieron muy buenas amigas, juntas
aterrorizaron al resto de la escuela hasta que lo profesores
no soportaron más y la historia se repitió: Edith fue
expulsada. Decidió no volver a casa y se mudó a Los
Ángeles para buscarse la vida como modelo. Se movió por
algunas agencias haciendo contactos, pero su carrera nunca
despegó por lo que al poco tiempo y arrepentida regresó a
casa con su madre.
Pasaron unos años y Edith conocio muchas amistades en
Londres, a los 19 años formó su primera banda con Alysa
Wellman, Vera Feltham, Glennie Belanger, Thomas Banks,
y Barker Leighton se hacían llamar los “Damn Hot”.
8. Edith se encargaba de tocar el bajo o por lo menos hacer que
tocaba algo porque sus habilidades musicales eran un poco
escasas. Para suplir esas habilidades se entretenía con
Thomas y Barker. Uno a cada rato. Al poco tiempo Thomas,
cansado de la situación y sintiendo algo más fuerte por
Edith y no ver su amor correspondido tomó la
determinación de abandonar la banda y nombrar a Edith
nueva líder. Debido a la extraña personalidad de Edith,
terminó por aburrirse de la banda y sus compañeros, así
que los despidió a todos. Empezando su carrera solista en la
banda “Helle en la Tierra”. La banda tenía un contrato
discográfico con “Comadreja Registros” empresa que
pertenecía a Clemens Jericho.
Clemens era un tipo rico, por lo que despertó el interés de
Edith, que antes de terminar de firmar el contrato con
Comadreja Registros ya se había liado con él un par de
veces, de su affaire nació Pandora que ya de bebé
acompañaba de su gira a su madre. Edith pasaba más
tiempo en su backstage que encima del escenario. Como
ella misma dijo en varias ocasiones: lo único que me
interesa de la música son los groupies.
9. Clemens era un tipo rico, por lo que desperto el interes de
Edith, que antes de terminar de firmar el contrato con
Comadreja Registros ya se había liado con él un par de
veces, de su affaire nació Pandora que ya de bebé
acompañaba de su gira a su madre. Edith pasaba más
tiempo en su backstage que encima del escenario. Como
ella misma dijo en varias ocasiones: lo único que me
interesa de la música son los groupies.
De ellos se llevó varios recuerdos: tangas que le tiraban
durante la actuación, algún que otro tomatazo y, de lo que
estaba más orgullosa Edith: varias cepas de cándidas de
todos los números y colores que engrosan su largo historial
médico, más largo incluso que el historial delictivo.
Además de bajista, Edith sobresalió en su faceta de
compositora, suyas son las letras de canciones que están en
la memoria de los que disfrutaron el Londres de aquella
época: My Vagina Smells Like Jackie, When I Think About
You I Shit Myself o Anal Hatesex sonaron como hits en los
bares de peor reputación de la ciudad.
10. Después de haber mantenido multitud de relaciones
promiscuas se vio involucrada en la muerte de Travis
Kauser mientras cenaban juntos en De Beer Garden, la
causa oficial fue envenenamiento por marisco pero no
faltan voces que insinúan que Edith tuvo algo que ver.
El último blog de Travis fue sobre la cita con Edith
A pesar de todas sus aventuras, Edith necesitó emociones
fuertes casi a diario hasta el final de su vida, falleció a
consecuencia de una enfermedad de trasmisión sexual (o
unas cuantas).
11. Siendo reconocida para la
posteridad como la Diosa del
Sexo Salvaje, y tratar a sus
amantes como esclavos siendo
ella una Domina o Ama en
potencia, es gracias a ella que en
hoy por hoy podemos ir a la
tienda y encontramos látigos,
esposas y demás parafernalia
sado además de existir objetos
especiales como Fluffy Fluffy
Handcuffs, Sexy Toy, Latex
Catsuit, Leatherman Costume o
Masquerade Mask.
12. Como recuerdo de la
vida alocada y salvaje
de Edith, sus fans
siguen tatareando la
canción que Anton
Taylor le dedicó:
Romantic Date With
Edith