1. UNIVERSIDAD TÉCNICA DE AMBATO
Discurso
“La juventud y su participación en la política”
Alumno: Jairo Díaz
AMBATO – ECUADOR
MARZO-AGOSTO
2012
2. Una definición planteada por Balardini: "política de juventud es toda acción que se
oriente tanto al logro y realización de valores y objetivos sociales referidos al período
vital juvenil, como así también, aquellas acciones orientadas a influir en los procesos de
socialización involucrados. Trátese tanto de políticas reparatorias o compensatorias,
como de promoción y orientadas al desarrollo o construcción de ciudadanía".
Para Touraine, en cuanto a la finalidad de una política de juventud, expresa que "el
principal objetivo de una política de la juventud es incrementar en los jóvenes la
capacidad de comportarse como actores sociales, o sea de modificar su entorno social
para realizar proyectos personales reafirmando que el objetivo principal de la política de
la juventud, ha de ser "el fortalecimiento del espíritu de ciudadanía, que comprende a la
vez la confianza en las instituciones y la conciencia de poder hacer escuchar su voz en
ellas".
En la perspectiva de Bango, una política de juventud debe considerarse "en sentido
estricto, esto es, en su dimensión programática; la política de juventud como política de
legitimación; la política de juventud como promotora de construcción de ciudadanía...
En otras palabras, la perspectiva implícita de estas consideraciones sobre política desde
un punto de vista programático, a nivel del diseño y ejecución de "programas juveniles o
para jóvenes", donde se ha tendido a pensar que una política de juventud es la
sumatoria de la mayor oferta posible de aquellos hacia ciertos sujetos jóvenes con ética
juvenil, es la revalorización de otras dimensiones de política juvenil, más allá del sólo
diseño de acciones determinadas características ; dejando muchas veces de lado el
componente de lo político que subyace a las definiciones programáticas y la dimensión
de la participación de los mismos jóvenes en la perspectiva de construcción de
ciudadanía" .
La política de juventud trata de ir generando cambios en una forma ética en las cuales
los jóvenes puedan realizarse en cuanto tales y, al mismo tiempo, participar en la
configuración de la sociedad en la que viven
El Ecuador ha sido caracterizado por muchos politólogos como una democracia en
“crisis”. Con instituciones representativas fracasadas y deslegitimizadas, con la
persistencia de desigualdades, injusticias, y exclusiones sociales que se reproducen en la
esfera política, el sueño que propulsó la transición a la democracia en el Ecuador no ha
sido realizada, resultando en los índices más bajos de apoyo y de participación
democrática en la región. Los patrones en la nueva generación de ciudadanos y
ciudadanas de Latinoamérica indican que esta actitud no cambiará en un futuro cercano.
Con índices de desempleo y de inseguridad casi doblando los de la población adulta, los
jóvenes y las jóvenes de hoy muestran rechazo y apatía frente al sistema político, y
desmotivación para participar en él. Mientras en los años setenta y ochenta la
preocupación en América Latina se centraba en la transición a la democracia, en las
últimas décadas la cuestión se vuelve sobre qué hacer para que las democracias
latinoamericanas funcionen y, consecuentemente, se Juventud, Democracia y
Participación Ciudadana en el Ecuador mantengan.
En este artículo examino esta cuestión “from below” (Jelin, 1996, p.101), enfocándome
en los ciudadanos y ciudadanas que representan el futuro de la democracia ecuatoriana:
los sujetos jóvenes de hoy en día. Entendiendo que el funcionamiento de la democracia
depende no sólo de un “marco institucional” suficiente sino también del “como las
personas actúan dentro de este marco institucional” (Jelin & Hersheberg, 1996, p. 2),
pongo a un lado la evaluación de las instituciones estatales, y en su lugar exploro las
3. maneras en las cuales los sujetos jóvenes ecuatorianos se relacionan con estas
instituciones. Las preguntas clave son: ¿cómo entienden las personas jóvenes el
concepto de la “democracia”? y, ¿de qué manera están dispuestas a participar en ella?
Mi propuesta es discutir estos asuntos dentro del marco teórico de los debates actuales
sobre los riesgos de la democracia.
El momento actual en el Ecuador ofrece un campo de estudio interesante para indagar
sobre estos temas. Dentro de la denominada crisis, surge la “Revolución Ciudadana” del
Gobierno de Rafael Correa que, por un lado, representa un momento de esperanza para
el Ecuador, al prometer una ruptura con un pasado político de corrupción por parte de
las élites dominantes, abriendo espacios de participación directa y extendiendo una
invitación especial a los individuos jóvenes, que se presentan como portadores de
nuevas ideas para remplazar la vieja y desacreditada clase dirigente. Por otro lado, el
discurso y las acciones de la administración de Correa —al condenar la “partidocracia”
por ejemplo, y disolver el Congreso anterior— infundan preocupaciones que podrían
llevar a la caída del sistema representativo.
Empiezo el artículo con una discusión sobre la crisis democrática en el Ecuador, los
peligros del debilitamiento del sistema representativo que replica las exclusiones de una
sociedad de “differentiated citizenship” o “ciudadanía diferenciada”, usando la
terminología del antropólogo James Holston, y la aparición de nuevas formas de
participación e incidencia en el espacio político. En esta sección problematizo el
concepto “joven”, y reconsidero su sentido en el contexto actual ecuatoriano. En la
segunda sección, presentaré la metodología y los hallazgos del estudio cualitativo. En
ella discutiré las percepciones juveniles de la democracia y la participación, mostrando la
desconexión, que para ellos y ellas existen entre la democracia y la política, y su
concepto de participación democrática, local y directa, como algo personal o
interpersonal. Al ver canales de participación política cerrados, ellos y ellas buscan lograr
cambios a través de acciones por fuera de la institucionalidad política. En la sección final,
discutiré las implicaciones de estos hallazgos para el futuro de la democracia
ecuatoriana, tomando en cuenta las preocupaciones teóricas discutidas en la primera
parte.
RECOMENDACIONES
Aprovechar la estructura educativa para fomentar en los escolares el asociacionismo y la
participación, sobre todo cuando existe dentro de los propios estudiantes un potencial
importante con perspectivas de participar, haciendo uso de un legítimo derecho que les
asiste por ley.
Los centros educativos deberían crear un área especial de Ciencias Sociales, destinadas a
reforzar la Educación Ciudadana, con teorías, metodologías diversas que incluyan
talleres, dinámicas, paneles, etc. y estrictamente orientado al sentido práctico del
ejercicio ciudadano, adecuándolo a cada realidad, ya sea individual, grupal o comunal.
Pensamos que los datos obtenidos en la investigación pueden constituirse en valiosos
insumos para futuras investigaciones o proyectos, por tal motivo, los dejamos a vuestra
disposición, conscientes que el buen uso que se haga de ellos redundará en beneficio de
los jóvenes.
4. CONCLUCIONES
Sociológicamente la investigación demuestra que un amplio número de jóvenes
beneficiarios cuyas edades fluctúan entre los 15 y 17 años quedan excluidos de una ley
que teóricamente los incluye y los debería integrar.
Los directores de los centros educativos y los docentes conocen sobre el CONAJU de
manera simbólica, a pesar de que los colegios de educación secundaria de menores
deben contar con l0s 8 representantes a nivel de la Región Lambayeque al Consejo de
Participación Juvenil (CPJ), que es un estamento del CONAJU.
Se está desaprovechando una importante herramienta legal como es la ley del
CONAJU, que fomenta la Participación y el Asociacionismo; y la escuela como agente
de socialización y espacio donde se concentra el mayor número de jóvenes
beneficiarios de la ley, comprendidos entre los 15 y 17 años, para la difusión de la
misma con sus prerrogativas y beneficios.
Hasta el momento el CONAJU se ha convertido en una especie de elefante blanco ,
creado por la prisa de cumplir con una promesa electoral, pero con escasa visión de
futuro y planificación; tornándose en una suerte de freno que buscó por un lado,
reconocer el rol trascendental de la juventud en la caída del régimen anterior , y por
otro lado posicionar en la mente de los jóvenes la idea que después de un siglo , por
fin un gobierno se acordó de ellos y promulgó una ley que los incluye , los integra y los
favorece. Finalmente el CONAJU no encaja en ningún rubro de la tipificación de
Políticas de Juventud propuestos.
http://www.monografias.com/trabajos26/politicas-juventud/politicas-juventud.shtml
http://revistaumanizales.cinde.org.co/index.php/Revista-
Latinoamericana/article/viewFile/57/16