La vena porta transporta sangre pobre en oxígeno pero rica en nutrientes del intestino, bazo, páncreas y vesícula biliar al hígado. Se bifurca en ramas derecha e izquierda antes de entrar al hilio hepático y se ramifica de manera segmentaria dentro de este. Cuando la circulación portal se obstruye, surgen anastomosis portosistémicas que permiten que la sangre fluya en ambas direcciones y puedan causar varices o hemorragias graves.