Tras el Congreso de Viena de 1815, se reorganizó el mapa político de Europa, con el Imperio austriaco, Rusia y Prusia ampliando sus territorios, mientras que Gran Bretaña aseguró su dominio de los mares. La Confederación Germánica se estableció para unir a los 41 estados alemanes bajo la influencia de Austria y Prusia. Sin embargo, los sentimientos liberales y nacionalistas que habían surgido durante las guerras napoleónicas no fueron contemplados, lo que llevó a la