El documento contiene varias oraciones y lecturas para el primer domingo de Adviento. Celebra la llegada de Jesús y la espera de su venida. Insta a los fieles a mantener la esperanza y la vigilia mientras aguardan el retorno de Cristo. Concluye reflexionando sobre el nuevo año litúrgico y la oportunidad que ofrece para detenerse y examinar el propio camino de fe.
01. GUIÓN CON CANCIONES DEL DOMINGO 1º DE ADVIENTO. CICLO C. DIA 29 DE NOVIEMBRE DEL 2015
1. CANTO DE COMUNION
1. Cruzando el inmenso desierto
peregrina el pueblo de Dios,
en busca de cielos abiertos, a la luz, la paz y el amor.
Yavé cambiará sus cadenas, por la tierra de promisión;
allí será el fin de sus penas
y hallará consuelo el dolor.
Por ti, Patria esperada, encuentra ligera su cruz.
Por ti, Patria esperada, no apaga el desierto su fe.
Por ti, Patria esperada,
enciende su marcha el amor.
Por ti, Patria esperada. Por ti.
2. El nuevo Israel peregrino
va siguiendo en pos de una cruz:
la nube que alumbra el camino
a través de un mundo sin luz.
El cielo es el reino futuro, nueva tierra de promisión,
que orienta los pasos seguros
de este nuevo Pueblo de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN.
Ven pronto, Señor, y no tardes.
Ven a este mundo hermoso y terrible.
Hermoso, como salido de manos divinas,
y terrible por la fealdad que en él acumulamos
cada día.
Ven al corazón y al rostro de los niños,
ven y llena los corazones de todos.
Ven a este mundo del amor y del odio,
del cariño y la violencia.
Pon en el corazón de todos, hombres y mujeres,
un deseo de justicia, de amor y de paz.
Pero, hablando claro,
¿para qué te pedimos que vengas,
si Tú estás ya aquí con nosotros?
Estás en la inocencia y frescura de los niños
y te marchitas en el rostro cansando de los
ancianos.
Pero nosotros no sabemos descubrirte,
no sabemos reconocerte en el mundo.
Por eso, te repetimos: “Ven pronto, Señor y no
tardes”.
BENDICIÓN Y DESPEDIDA.
Canto.
La Virgen sueña caminos,
está a la espera;
la Virgen sabe que el Niño
está muy cerca.
De Nazaret a belén
hay una senda;
por ella van los que creen
en las promesas.
Los que soñáis y esperáis El señor cerca está;
la buena nueva, Él viene con la paz.
abrid las puertas al Niño El Señor cerca está.
que está muy cerca. Él trae la verdad.
Parroquia de san
Diego de Alcalá.
MADRID
29 DE NOVIEMBRE DE 2015
DOMINGO 1º DE ADVIENTO
«c»
CANTO DE ENTRADA.
Ven, ven Señor, no tardes.
Ven, ven que te esperamos.
Ven, ven Señor, no tardes.
Ven pronto Señor.
El mundo muere de frío,
el alma perdió el calor,
los hombres no son hermanos,
el mundo no tiene amor.
Envuelto en sombría noche,
el mundo sin paz no ve,
buscando va una esperanza,
buscando, Señor, tu fe.
Al mundo le falta vida,
al mundo le falta luz,
al mundo le falta cielo,
al mundo le faltas Tú.
DESPUÉS DE ENCENDER LA VELA DE LA
CORONA DE ADVIENTO.
Ven, ven Señor, no tardes.
Ven, ven que te esperamos.
Ven, ven Señor, no tardes.
Ven pronto Señor.
ORACIÓN COLECTA.
Lectura del profeta Jeremías 33, 14-16
Mirad que días vienen-oráculo de Yahveh-
en que confirmaré la buena palabra que dije
a la casa de Israel y a la casa de Judá.
En aquellos días y en aquella sazón haré
brotar para David un Germen justo, y
practicará el derecho y la justicia en la
tierra. En aquellos días estará a salvo Judá,
y Jerusalén vivirá en seguro. Y así se la
llamará: "Yahveh, justicia nuestra."
Palabra de Dios.
2. Salmo responsorial
Sal 24, 4bc-5ab. 8-9. 10 y 14.
R/ A ti, Señor, levanto mi alma.
Señor, enséñame tus caminos,
instrúyeme en tus sendas,
haz que camine con lealtad;
enséñame porque tú eres mi Dios y
Salvador.
El Señor es bueno y recto,
y enseña el camino a los pecadores;
hace caminar a los humildes con rectitud,
enseña su camino a los humildes.
Las sendas del Señor son misericordia y
lealtad,
para los que guardan su alianza y sus
mandatos.
El Señor se confía con sus fieles
y les da a conocer su alianza.
Lectura de la primera carta del apóstol
San Pablo a los Tesalonicenses 3, 12-
4,2
En cuanto a vosotros, que el Señor os haga
progresar y sobreabundar en el amor de
unos con otros, y en el amor para con todos,
como es nuestro amor para con vosotros.
Sabéis, en efecto las instrucciones que os
dimos de parte del Señor Jesús.
Palabra de Dios.
+ Lectura del santo Evangelio según
San Lucas 21, 25-28. 34-36.
"Habrá señales en el sol, en la luna y en las
estrellas; y en la tierra, angustias de las
gentes, perplejas por el estruendo del mar y
de las olas, muriéndose los hombres de
terror y de ansiedad por las cosas que
vendrán sobre el mundo; porque las fuerzas
de los cielos serán sacudidas. Y entonces
verán venir al Hijo del hombre en una nube
con gran poder y gloria. Cuando empiecen a
suceder estas cosas, cobrad ánimo y
levantad la cabeza porque se acerca vuestra
liberación."
"Guardaos de que no se hagan pesados
vuestros corazones por el libertinaje, por la
embriaguez y por la preocupaciones de la
vida, y venga aquel Día de improvisto sobre
vosotros, como un lazo; porque vendrá
sobre todos los que habitan toda la faz de la
tierra. Estad en vela, pues, orando en todo
tiempo para que tengáis fuerza y escapéis a
todo lo que está para venir, y podáis estar
en pie delante del Hijo del hombre."
Palabra del Señor
ORACIÓN DE LOS FIELES. A cada intención
respondemos: “Te rogamos, óyenos”
1.- Por nuestra Iglesia, que su preocupación por
los más pobres y desfavorecidos le lleve a ser
lámpara encendida que ilumina las esperanzas de
los hombres.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
2.- Por las autoridades y gobernantes de todos los
países del mundo, para que busquen siempre
promocionar y alentar a los movimientos que
luchan a favor de la justicia, la paz y la libertad.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
3.- Por los hombres y mujeres que caminan por la
vida sin meta ni objetivo, para que encuentren al
Dios que nos mantiene despiertos y nos llama a la
vida en plenitud.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
4.- Por todos los que sufren en su cuerpo o en su
espíritu, para que sus dolores no apaguen en ellos
nunca la esperanza.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
5.- Por nosotros y por nuestra comunidad, para
que en este Adviento vivamos despiertos en la fe,
firmes en la oración y atentos a las necesidades de
los hermanos.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
Con el primer domingo de Adviento
comienza un nuevo año litúrgico. El
Evangelio que nos acompañará en el
curso de este año, ciclo C, es el de
Lucas. La Iglesia acoge la ocasión de
estos momentos fuertes, de paso, de un
año al otro, de una estación a otra, para
invitarnos a detenernos un instante, a
observar nuestro rumbo, a plantearnos
las preguntas que cuentan: «¿Quiénes
somos? ¿De dónde venimos? Y sobre
todo, ¿adónde vamos?».