6. enfermedad del sistema nervioso central (SNC) en el que se
diferencian dos partes principales: cerebro y médula
espinal. Envolviendo y protegiendo las fibras nerviosas del
SNC hay un material compuesto por proteínas y grasas
llamado mielina que facilita la conducción de los impulsos
eléctricos entre las fibras nerviosas.
En la EM la mielina se pierde en múltiples áreas dejando en
ocasiones, cicatrices (esclerosis). Estas áreas lesionadas se
conocen también con el nombre de placas de
desmielinización.
La mielina no solamente protege las fibras nerviosas si no
que también facilita su función. Si la mielina se destruye o
se lesiona, la habilidad de los nervios para conducir
impulsos eléctricos desde y al cerebro se interrumpe y este
hecho produce la aparición de síntomas. Afortunadamente
la lesión de la mielina es reversible en muchas ocasiones.
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10. Dentro del Sistema Nervioso Periférico podemos distinguir dos partes:
Sistema Nervioso Somático: Controla los actos voluntarios.
Sistema Nervioso Autónomo o Vegetativo: Responsable del funcionamiento
de las vísceras.
Para controlar esos órganos se necesitan órdenes contrarias, por eso
tenemos:
Sistema Nervioso Simpático: Dilata las pupilas, aumenta la fuerza y la
frecuencia de los latidos del corazón, dilata los bronquios, disminuye las
contracciones estomacales, estimula las glándulas suprarrenales. Prepara
a las vísceras para una situación de acción.
Sistema Nervioso Parasimpático: La función principal del sistema nervioso
parasimpático es la de provocar o mantener un estado corporal de
descanso o relajación tras un esfuerzo o para realizar funciones
importantes como es la digestión. Actúa sobre el nivel de estrés del
organismo disminuyéndolo.
11. Los nervios periféricos son aquellos que se encuentran fuera del cerebro y de la médula
espinal. Como la estática en una línea telefónica, los trastornos de los nervios periféricos
distorsionan o interrumpen los mensajes entre el cerebro y el resto del cuerpo.
Existen más de 100 tipos de trastornos de los nervios periféricos. Estos pueden afectar a
uno o a muchos nervios. Algunos surgen como resultado de otras enfermedades, como
los problemas neurológicos de los diabéticos. Otros, como el síndrome de Guillain-
Barre, ocurren después de una infección viral. Otros más, a consecuencia de la
compresión de un nervio, como el síndrome del túnel del carpo o el síndrome de la
salida torácica. En algunos casos, como el síndrome de dolor regional complejo, el
problema se inicia a partir de una lesión. Algunas personas nacen con trastornos en los
nervios periféricos.
Los síntomas suelen comenzar gradualmente y después empeorar. Entre ellos se
encuentran:
Entumecimiento
Dolor
Ardor u hormigueo
Debilidad muscular
Sensibilidad al tacto
El tratamiento busca tratar cualquier problema subyacente, mitigar el dolor y controlar
los síntomas