Boletin Tesape Arandu Academia de Ciencias de Bolivia Capitulo Santa Cruz
1. 01TESAPE ARANDU
AÑO 4 No. 16
Julio de 2014
CONTENIDO
1. Los Memes
2. Presencia en los Valles
Cruceños de pueblos
originarios del Oriente
Boliviano hace 2.000
años (Cerámica incisa
Grey Ware en los Valles
Cruceños)
ACADEMIA NACIONAL DE
CIENCIAS DE BOLIVIA
DEPARTAMENTAL SANTA
CRUZ (ANCB-SC)
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de Santa Cruz de la Sierra - UPSA
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En una de mis clases sobre Ética y Moral en la
Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra, para
estudiantes de Ingeniería y de Arquitectura, propuse
realizar un ensayo sobre las implicaciones de un
concepto relacionado con la evolución socio-cultural,
generado en la última década del siglo XX, llamado
Meme, palabra acuñada por Richard Dawkins (ver El
Gen Egoísta) quien postula, además, que estas no son
metáforas de transmisión de ideas sino estructuras
vivas y que constituyen una estructura física en la red
neuronal de cada persona.
El resultado del ensayo muestra que un meme, según
las modernas teorías sobre la difusión cultural, es la
unidad teórica de información cultural transmisible
de un individuo a otro o de una mente a otra, o
dicho de otra forma, son patrones contagiosos de
información cultural que pasan de mente en mente
y configuran y propagan directamente acciones y
mentalidades clave de un grupo social, intermediando
entre lo innato y lo adquirido.
En este contexto, como resultado de las
investigaciones realizadas, se determinó que en el ser
humano hay información, palabras e instrucciones que
son elementos básicos para constituir estas unidades
culturales y, más aun, se encontró que para el
conjunto de Memes, se dan las características de todo
proceso evolutivo: fecundidad (ideas especialmente
efectivas), longevidad (persisten por largo tiempo) y
fidelidad en la réplica (hay conservación de la idea
original) pero que estos son indiferentes a la verdad.
Por otra parte, se estableció, en palabras del biólogo
Jacques Monod, ….que las ideas pueden comportarse
como los genes humanos. Tienden a perpetuar su
estructura, pueden fusionarse, recombinarse y
segregar su contenido y evolucionar…. y a replicarse
utilizando el lenguaje como vector de transmisión, así
como también con el ejemplo personal, inicialmente
en el campo de la educación y ahora en el creciente
espacio del internet.
Se encontró que se propagan saltando de cerebro en
cerebro mediante un proceso que se llama imitación
y compiten entre ellos para conseguir recursos como
tiempo de cerebro, es decir, para obtener atención,
proceder emergente de que la conducta imitativa
está presente siempre en todo.
Por otra parte, en todos los casos, una transmisión
eficaz de los meme, según varios autores, depende
críticamente de las preferencias, atención, emociones
y deseos humanos (la blogósfera es un vehículo ideal
para transmitir memes) más, independientemente de
las intenciones, los efectos materiales de los memes
no siempre son beneficiosos para los protagonistas
mostrando efectos sobre la conducta de una persona,
en los procesos de decisión previos a una acción y
sobre la organización social.
Sobre el particular, los trabajos que tienen lugar en
los campos de la ciencia cognitiva y la meta cognición
muestran claramente la importancia del saber
en relación a lograr una práctica competente en
describir y en controlar la aplicación de sus propios
conocimientos o su actividad cognitiva, competencia
que hoy se denomina como Metaconocimiento,
capacidad que al estar en una persona poco
desarrollada, según Brown et al, determina un bajo
nivel de aprendizaje y rendimiento.
Si nos trasladamos a La vida en línea (comunicaciones
vía internet u otros medios), el estar activo
implica una serie de metaconocimientos, es decir,
saber cuándo subir o poner en línea o no hacerlo,
información personal, saber examinar la veracidad de
lo que está en línea en relación con la información
real o la verdad, identificar engaños que se generan
y envían vía internet, saber qué buscar en avisos de
virus de ordenador enviados por correo electrónico.
El metasaber para vivir en línea, según especialistas
en la materia, requiere saber sobre blogs que le darán
prestigio si enlaza con determinados post; saber
cómo utilizar los buscadores para ver quién enlaza
con su blog y refuerza las redes; saber que lo raro, lo
humorístico y lo extravagante cuentan con una mayor
probabilidad de lograr la atención de los que viven en
línea que otros modos y formas de hacerlo; saber que
la exploración y el asumir riesgos en línea recompensan
y estimulan cosa que casi no ocurre con esa intensidad
en nichos del aprendizaje y la enseñanza.
Por otra parte, se indagó sobre la validez de la teoría
de los memes, encontrando conceptos contrarios a su
existencia: ser solo una nueva manera de denominar
cosas, constituir una nueva etiqueta para cosas
familiares, que no son los memes sino las personas las
que inventan cosas, ser un brillante envoltorio para
un montón de ideas convencionales.
En conclusiones, mediante este artículo, en este
momento que usted lo lee, estoy transmitiendo
memes que irán saltando de su mente a otra mente y
qué mejor experimento para probar que son realidad.
Acad. Gastón Mejía Brown
Presidente ANCB-SC
Los Memes
2. 02 TESAPE ARANDU
Presencia en los Valles Cruceños de pueblos originarios del Oriente Boliviano
hace 2.000 años (Cerámica incisa Grey Ware en los Valles Cruceños)
INTRODUCCIÓN
En base a los restos materiales que dejaron, se sabe que los valles
interandinos del oeste del Departamento de Santa Cruz en Bolivia
fueron habitados a lo largo del tiempo por gentes diversas. Sin
embargo, sólo encontramos dos culturas bien diferenciadas al
final del período formativo y en el intermedio temprano, hace
aproximadamente dos mil años. Los pueblos portadores de estas
culturas fueron el Grey Ware (1) y el Mojocoya (2, 3). Ellos son los
habitantes más antiguos identificados en la región.
La cultura Mojocoya tiene un área amplia de distribución (4, 5, 6).
Ocupa zonas de los Departamentos de Chuquisaca y Cochabamba,
además del de Santa Cruz.
La Grey Ware se distribuye en un área más restringida que
prácticamente se limita al extremo occidental del Departamento
de Santa Cruz (1, 7, 8).
Ambas culturas son características y sus asentamientos son
fácilmente identificables debido a la originalidad de su cerámica.
Ésta se caracteriza por una decoración pintada sobre todo con
dibujos de espirales y escalones. Las vasijas frecuentemente
llevan soportes trípodes (4, 6).
Fig. 1. Cuenco Mojocoya de Mataral
La cerámica Grey Ware está decorada a base de líneas incisas y
carece de soportes (1, 4, 6, 9).
Fig. 2. Fragmento cerámico Grey Ware de Mataral
Con estos antecedentes, he localizado una serie de asentamientos
arqueológicos prehispánicos (10) y un sitio con pinturas rupestres
(11) en los alrededores de Mataral, provincia Florida en el
departamento de Santa Cruz. Los asentamientos en su totalidad
pertenecen a las culturas Mojocoya y Grey Ware y siempre
corresponden a una sola de estas culturas, sin mezclarse. Se
distribuyen en dos series que por sus características espaciales
y decorativas podemos llamar Mataral Incisa y Mataral Pintada.
El hecho de que los yacimientos de una u otra serie mantengan
su individualidad indica que corresponden a dos pueblos distintos
(7, 10). Por ciertos detalles de alguno de estos yacimientos he
llegado a la conclusión de que no solo son dos pueblos distintos
si no, que de alguna manera, estaban enfrentados entre sí
presumiblemente por competencia territorial (10).
Con excepción de la cerámica, los restos materiales de estos
dos pueblos son similares (10). Corresponden a grupos humanos
relativamente pequeños que siempre vivían cerca del agua y
basaban su subsistencia en la caza y pesca, en la recolección
de productos vegetales y en una incipiente agricultura. Sus
abundantes útiles de piedra, tanto tallada como pulimentada,
hablan de esas actividades. Los asentamientos carecían de
construcciones de piedra. Los materiales perecederos que usaron
para hacer sus viviendas no se han conservado.
Rendían culto a los muertos, cuidando con esmero de los
enterramientos sobre todo de los niños. Los entierros se llevaban
a cabo en sus mismos asentamientos o en espacios dedicados
especialmente para ello, es decir, en cementerios. Usaban
urnas funerarias en las que a los restos humanos acompañaban
frecuentemente objetos que debieron tener un significado
especial para el difunto.
Usaban objetos de adorno personal, elaborados con hueso,
concha, cerámica o metal. El metal seguramente lo conseguían
por comercio con gentes de lugares lejanos. Fabricaban armas
contundentes que no siempre eran destinadas a la caza.
Ambas series son originarias de las tierras bajas del Oriente
Boliviano. La decoración incisa, los soportes trípodes y los
enterramientos en urnas, las improntas textiles, son comunes a
las culturas de tierras amazónicas (7, 12, 13).
Si bien la decoración de la cerámica sirve para diferenciar las dos
series de asentamientos, hay detalles que, de alguna manera,
hacen pensar en la existencia de un parentesco entre los pueblos
Mojocoya y Grey Ware. Además de su origen en las tierras bajas
y de ocupar un área geográfica y un periodo de tiempo que
coincidieron al menos en parte, he podido constatar algunos
hechos que inducen a pensar en esa relación. La presencia
de cerámica incisa con motivos decorativos similares a los
empleados en la cultura Mojocoya, el uso de una gama amplia de
colores en el fino engobe de la superficie interior de las vasijas
Grey Ware o la presencia común de ciertas características de la
cerámica como bordes doblados o improntas textiles, no parecen
fruto del azar (10).
Ante este panorama, se abre una serie de incógnitas en el
conocimiento de estos dos pueblos prehistóricos de los valles
cruceños. En primer lugar, determinar el área territorial que
realmente ocuparon. En segundo lugar, conocer las vías que
utilizaron para llegar a los valles desde las tierras amazónicas y,
en tercer lugar, definir la relación que hubo entre ellos.
Las características de la cerámica de la serie Mataral Incisa o
Grey Ware permiten un fácil seguimiento de estas gentes por
3. 03TESAPE ARANDU
lo que la he tomado como base para tratar de dar respuesta a
aquellas preguntas.
Para conocer mejor su área de ocupación he estudiado
detalladamente los valles de los ríos Mizque, Pulquina, La
Ciénaga, Tembladeras y Los Negros.
Para analizar sus posibles vías de acceso a los valles, he distribuido
el área que rodea a la región estudiada en cuatro zonas. La zona
norte, con prospección de la región de San Carlos, al otro lado
del macizo del Amboró. La zona este en la que he estudiado
fundamentalmente el área del Parque Lomas de Arena. La zona
oeste desde Mataral hasta el río Mizque. Y la zona sur, área de
Vallegrande, desde el río Grande hasta Mataral.
Para establecer la relación que existió entre las dos culturas he
estudiado cualitativa y cuantitativamente los restos materiales
de sus yacimientos.
Mapa 1. Yacimientos Grey Ware o Mataral Inciso. En color, área ocupada por
este pueblo en los valles cruceños
1. ZONA NORTE. ESTUDIO DE LAS CARACTERÍSTICAS
ARQUEOLÓGICAS DE LA REGIÓN DE SAN CARLOS
El Municipio y pueblo de San Carlos están situados al norte del Área
Protegida Amboró, en la provincia de Ichilo del Departamento de
Santa Cruz. En línea recta dista unos 100 kilómetros de Mataral.
En esta región, los valles interandinos se abren a las tierras
bajas cruceñas, a la llanura de Moxos. San Carlos es una región
interesante como posible vía de llegada de gentes de las tierra
bajas a los valles cruceños.
En San Carlos existe abundante cerámica incisa y algo de pintada.
La cerámica incisa tiene características similares a la descrita en
las tierras amazónicas (Saavedra, 2001) pero no guarda ninguna
relación con la serie Mataral Incisa. Esta discrepancia se observa
tanto en los motivos decorativos como en la presencia de soportes
trípodes, circunstancia que nunca se da en la cerámica incisa
Grey Ware de Mataral.
Fig. 3. Vasijas incisas. Museo Arqueológico de San Carlos
La cerámica pintada del Museo Arqueológico de San Carlos no
guarda relación alguna con la serie Mataral Pintada. Corresponde
a cerámica pintada de tierras bajas o a cerámica posterior a la
cultura Mojocoya.
2. ZONA ESTE. ESTUDIO DE LAS CARACTERÍSTICAS
ARQUEOLÓGICAS DE LA REGIÓN ORIENTAL DE LA CIUDAD
DE SANTA CRUZ DE LA SIERRA. ÁREA PROTEGIDA LOMAS DE
ARENA
La región estudiada al este de los valles cruceños y sur de la
capital departamental, está situada en los municipios de Santa
Cruz de la Sierra y de La Guardia. Esta zona se extiende hasta
unos 35 kilómetros de Santa Cruz e incluye el Parque Regional
Lomas de Arena, teniendo al río Seco como límite.
En esta zona he encontrado siete sitios arqueológicos, todos ellos
en las dunas o en el cauce del río Seco.
El yacimiento más importante, que llamé LA1, corresponde a
un asentamiento con material cerámico, lítico y enterramientos
sobre una superficie de terreno actualmente libre de dunas,
cerca de la carretera de Camiri, a nivel de Guayabas. Los demás
sitios se localizan en el cauce del río Seco y probablemente han
perdido su contexto original pero su material cerámico es similar
al de LA1.
La cerámica de esta zona cuando es decorada lo es por incisión.
Presenta soportes trípodes y en líneas generales recuerda a la
cerámica incisa de San Carlos. No tiene relación alguna con las
cerámicas Mojocoya y Grey Ware de los valles cruceños.
Fig. 4. Fragmento de cerámica incisa de Las Lomas
4. 04 TESAPE ARANDU
Fig. 5. Cuenco trípode dentro de otra vasija de Las Lomas
3. ZONA OESTE. ESTUDIO DE LAS CARACTERÍSTICAS
ARQUEOLÓGICAS DE LA REGIÓN OCCIDENTAL DE LOS VALLES
CRUCEÑOS. VALLES DE LOS RÍOS MIZQUE Y PULQUINA
El río Mizque llega al Departamento de Santa Cruz desde el
de Cochabamba a nivel de Saipina. Desde aquí se dirige al sur
sirviendo de límite entre esos dos departamentos. Recoge las
aguas del río Pulquina y termina desembocando en el Grande.
Esta región de los valles cruceños es interesante por su
riqueza arqueológica y su análisis puede servir a mi objetivo
de aclarar el área de ocupación y origen de las dos culturas
típicas de Mataral.
Saipina
Saipina y sus alrededores son conocidos desde hace un siglo por
sus restos arqueológicos. Aquí se recuperaron materiales tanto
Grey Ware como Mojocoya por Nordenskiöld (7), Rydén (8) y más
recientemente por Bockington, Pereira y Sanzetenea (2). En esta
región se incluyen los sitios Grey Ware de Chilón, Saipina Alta,
Yajo Pampa y La Laja. Igualmente contiene varios sitios Mojocoya.
La Laja, estudiada por Bockington y Sanzetenea (Bockington,
2005) a principios del siglo XXI, sirve de modelo de la cultura
Grey Ware.
El Tambo fue estudiado inicialmente por John Knutson, citado
por Gonzáles Skaric (5) y posteriormente por Brockington y cols.
(2). Es referencia de la cultura Mojocoya en su periodo temprano.
He recorrido la zona desde Vado Hondo hasta la desembocadura
del río Pulquina en el Mizque y he localizado siete yacimientos
arqueológicos, cuatro de ellos con restos cerámicos Mojocoya y
uno con cerámica Grey Ware.
El Valle de Pulquina es una región muy rica en sitios Mojocoya por
lo que puede considerarse como el laboratorio de esa cultura. Es
el lugar adecuado para su estudio, de igual forma que la región
de Mataral es el laboratorio de la cultura Grey Ware.
Fig. 6. Fragmento cerámico Grey Ware de Chañara 1
Fig. 7. Material inciso Grey Ware. Museo Arqueológico de Saipina
Dos sitios con cerámica Mojocoya se encontraron en La Tranca y
tres en Chañara, uno de ellos con material Mojocoya temprano
puro. Junto al Tambo de San Isidro, constituyen un núcleo muy
rico de asentamientos de estas gentes que hace entre 1.500 y
2.000 años habitaron la zona.
4. ZONA SUR. ESTUDIO DE LAS CARACTERÍSTICAS
ARQUEOLÓGICAS DE LA REGIÓN SUR DE LOS VALLES
CRUCEÑOS. VALLES DE LOS RÍOS LACIÉNAGAYTEMBLADERAS
A la región de Mataral llegan dos ríos desde el sur.
El río La Ciénaga nace al este de Vallegrande y después de rodear
la ciudad se dirige al norte para unirse con el Zanjón en Mataral.
El río Tembladeras que también nace al este de Vallegrande se
dirige al norte, paralelo a La Ciénaga para unir sus aguas a nivel
de Pampagrande.
Sus valles fueron ocupados por pueblos prehispánicos cuyos restos
cerámicos describiré a continuación.
Valle del río Tembladeras
A lo largo de su recorrido pasa por varias comunidades. En sus
alrededores se encuentran asentamientos arqueológicos siendo
los restos cerámicos más característicos los decorados por líneas
de puntos. En el sitio de la quebrada del Batión he encontrado
este tipo característico de cerámica.
5. 05TESAPE ARANDU
Fig. 8. Fragmentos de un cuenco cerámico con decoración puntiforme.
El Bastión
La cerámica típica del valle del río Tembladeras es incisa con
líneas diseñadas por puntos. No es un tipo de decoración extraña
para la cultura Grey Ware pero difícilmente se puede identificar
a la gente que la utilizó con la Grey Ware o Mataral Incisa. El
elemento decorativo puntiforme no llega al dos por cien en la
serie Mataral Incisa (9), mientras que en el valle de Tembladeras
es prácticamente el único presente.
Valle del río La Ciénaga
A lo largo del valle del río La Ciénaga existen varios asentamientos
prehistóricos. Las localidades deTucumancillo, ElTrigal, Lagunillas
o Cochabambita se relacionan con yacimientos prehispánicos. En
él se encuentra el histórico Valle de Holguín, probablemente el
primer yacimiento Grey Were descubierto y descrito por el sueco
Nordenskiöld hace cien años (7).
Los yacimientos de este valle pertenecen a culturas diversas,
incluidas la Mojocoya, con asentamientos mal definidos y la Grey
Ware del Valle de Holguín. Pero voy a dedicarme especialmente
a un sitio, El Churo, cuyas características lo convierten con
probabilidad en un antecedente de las culturas de Mataral.
Si los ríos Pulquina y Zanjón son los laboratorios para el estudio
de los pueblos más antiguos bien identificados en los valles,
Mojocoya y Grey Ware, el río La Ciénaga tiene un yacimiento que
puede considerarse el eslabón perdido de esos pueblos.
El Churo, en la comunidad de Quirquincho, en la orilla izquierda
del río La Ciénaga, fue el asentamiento de un pueblo que tiene
cerámica tanto incisa como pintada con soportes trípode.
Pero estas formas de decoración presentan rasgos mucho más
primitivos que Mojocoya y Grey Ware de las series de Mataral.
La decoración incisa de la cerámica del pueblo Churo es sobre
todo puntiforme. Las líneas decorativas están formadas por
una sucesión de puntos a diferencia de la Grey Ware que está
constituida por líneas continuas.
La cerámica pintada de los Churos se limita a pinceladas o a
dibujos muy simples.
En el área ocupada no hay útiles líticos que hablen de una
actividad agrícola pero si se han encontrado batanes de piedra y
hogares con restos de carbón y ollas por lo que debió tener una
actividad doméstica importante.
Fig. 9. Restos de un batán. El Churo
Los útiles líticos de El Churo consisten, sobre todo, en lascas de
cuarcita que debieron servir para carnear los animales cazados,
que por los huesos encontrados fueron fundamentalmente
mamíferos, como pecaríes y venados.
Una actividad destacada del pueblo Churo fue la elaboración
de cerámica. Para afinar la superficie de las vasijas usaban
bruñidores y para decorar con puntos, púas de diversas plantas.
Para almacenar estas púas o para calibrarlas, empleaban piezas
de barro sin cocer.
Fig. 10. Bruñidores. El Churo
La relación humana, tanto entre los miembros del grupo como
con los de otros grupos, debió de ser relativamente tranquila
pues apenas existen restos de armas contundentes, como en
otros asentamientos de la zona.
En cambio, es apreciable el uso de elementos decorativos y
ceremoniales. Utilizaban collares de cuentas hechas de hueso o
concha y adornos metálicos.
Fig. 11. Cuentas de collar. El Churo
6. 06 TESAPE ARANDU
También debieron hacer tejidos y redes como pueden verse en las
improntas textiles de su cerámica.
Fig. 12. Fragmento cerámico con improntas textiles. El Churo
Sin negar la posibilidad de enterramientos en urnas, en el Churo
no se han encontrado, al contrario que en los asentamientos
Mojocoya y Grey Ware.
La cerámica incisa de El Churo suele estar decorada con líneas
de puntos frecuentemente rellenos de un material blanco que
realza su belleza.
Fig. 13. Fragmento de cerámica puntiforme. El Churo
Aunque el color de la cerámica puntiforme es fundamentalmente
gris también se usó sobre otros colores como rojo, naranja o marrón.
Fig. 14. Fragmento de cerámica puntiforme. El Churo
Pero la cerámica que combina la decoración pintada e incisa es
relativamente rara y muy sencilla.
Existen algunas líneas incisas rectas, horizontales y verticales.
Son profundas y con un diseño que las aleja claramente de las
utilizadas en la cerámica Grey Ware, recordando, por el contrario
a las de las tierras bajas amazónicas.
Fig. 15. Fragmento de cerámica incisa. El Churo
En cambio utilizaban las pequeñas asas verticales típicas de la
cerámica Grey Ware. Aplicaron este tipo de asas tanto a cerámica
incisa como sin decorar.
Como había indicado, también hay diseños que recuerdan
el Mojocoya.
Fig. 16. Fragmento de cerámica pintada. El Churo
Así mismo existen soportes típicos.
Fig. 17. Soporte trípode. El Churo
Fig. 18. Fragmento de cerámica puntiforme con asa vertical pequeña. El Churo
7. 07TESAPE ARANDU
Vemos por tanto, que este pueblo poseía las dos técnicas
decorativas, pintura e incisión, pero en una etapa evolutiva
muy anterior a la de los Mojocoya y Grey Ware. Probablemente
fue el antepasado de ambos. De alguna manera los dos estilos
se separarían posteriormente por el fraccionamiento de aquella
sociedad primitiva.
Como he descrito, el río Tembladeras tiene varios asentamientos
caracterizados por cerámica decorada mediante puntos como en
El Churo. La región constituida por los valles de La Ciénaga y
Tembladeras pudo ser la vía de entrada del los pueblos Mojocoya
y Grey Ware que posteriormente ocuparían la región de Mataral,
Pulquina y Saipina.
CONCLUSIONES
En los valles interandinos del occidente del Departamento
de Santa Cruz se localizan frecuentemente asentamientos de
pueblos prehistóricos.
He estudiado en la región un total de dieciséis sitios arqueológicos.
De ellos diez corresponden a culturas del periodo intermedio
temprano con una antigüedad entre mil quinientos y dos mil
años. Cuatro pertenecen a gentes que decoraban su cerámica
con líneas continuas incisas (Grey Ware). Cuatro pertenecen al
Mojocoya temprano con cerámica decorada mediante pintura a
base de espirales y escalones. En estos ocho yacimientos nunca
hay mezcla de los dos estilos decorativos lo cual se interpreta
como que Grey Ware y Mojocoya eran dos pueblos distintos.
Otros dos sitios se caracterizan por cerámica decorada mediante
líneas incisas de puntos más sencillas que las Grey Ware. Uno
de ellos (El Churo) además presenta cerámica pintada de
características más primitivas que la Mojocoya. Por ello, El Churo
es probablemente el antecesor del Grey Ware y posiblemente
del Mojocoya.
Todos estos yacimientos se localizan en parajes despejados cerca
de ríos o lagunas lo que indica la dependencia de sus gentes del
agua, presumiblemente tanto para el consumo como por ser
lugares propicios para la caza.
Cinco yacimientos presentan materiales tanto Grey Ware o
Mojocoya como perteneciente a culturas posteriores indicando
que son lugares ocupados durante un periodo prolongado por
pueblos distintos. Lo normal es que estos asentamientos no estén
situados en las terrazas inferiores de los ríos si no en lugares
altos desde los que se domina un amplio territorio. Son lugares
adecuados para el controlar la llegada de gentes y animales y, por
ello, estratégicos para la defensa y la caza.
Completa la serie un yacimiento de filiación puramente amazónica.
Del total de los dieciséis yacimientos, cinco presentan materiales
Grey Ware y ocho Mojocoya lo cual indica, que estos pueblos,
junto al Churo, no solamente son los más antiguos si no también
los de más presencia en los valles interandinos cruceños.
Esto es especialmente significativo para las gentes Grey Ware. De
los doce yacimientos Grey Ware conocidos diez se localizan en los
valles cruceños y dos en el departamento de Cochabamba. Cinco
de los yacimientos catalogados hasta ahora se encuentran en los
alrededores de Mataral. Todo ello me ha inducido a denominar
el Grey Ware como Mataral Inciso, nombre que definiría más
adecuadamente al pueblo que poseyó esta cultura.
En contraposición tendríamos la cultura Mataral Pintada,
que en realidad corresponde al Mojocoya, disperso por los
departamentos de Santa Cruz, Cochabamba y Chuquisaca pero
que es muy abundante en yacimientos en los pequeños valles de
los alrededores de Mataral y Pulquina.
Los dos pueblos, Grey Ware y Mojocoya, vivieron en los valles
cruceños en un periodo que puede cifrarse entre los dos mil
y mil quinientos años antes del presente según dataciones
llevadas a cabo en La Laja y Tambo de San Isidro o de Comarapa,
respectivamente.
Desde hace cien años se ha reconocido el origen de ambos
pueblos en las tierras bajas amazónicas. La decoración incisa del
Grey Ware y la presencia de vasijas con soportes trípodes en los
yacimientos Mojocoya, aparte de otros elementos secundarios,
así lo indican.
La vía de llegada de estas gentes desde las tierras bajas a los
valles cruceños parece estar localizada en el sur, desde el río
Grande hasta Mataral pasando por la región de Vallegrade.
He llegado a esta conclusión mediante el estudio de las regiones
que rodean a los valles. Los pueblos que vivieron al norte y este
de los valles cruceños no se relacionan con los Mojocoya o Grey
Ware. Las gentes de Mataral no llegaron desde esas zonas.
Las gentes que habitaron el oeste son las mismas de Mataral. El
área de ocupación de aquellos pueblos se extiende a esta zona.
Como ya he indicado, al sur de Mataral he localizado un
yacimiento que por las características de sus restos cerámicos
puede corresponder al pueblo origen de las tradiciones Grey
Ware y Mojocoya. He llamado a este antecedente, pueblo Churo.
Posiblemente las gentes de Mataral llegaron desde el sur.
En la región de Pampillas del Chullpar, cerca de San Lorenzo se ha
encontrado indicios de cerámica similar a la de El Churo abriendo
la posibilidad de que este pueblo alcanzara los valles interandinos
cruceños desde el río Grande, al sur de Vallegrade. Este extremo
debe comprobarse mediante nuevas investigaciones en la región.
Encontramos, por tanto, dos pueblos ocupando un mismo
territorio y periodo de tiempo. Entre esos pueblos existieron
elementos comunes, como son su forma de vida que intuimos
por los restos materiales de sus yacimientos, útiles líticos
y de adorno, subsistencia basada en la caza y una agricultura
incipiente, tratamiento de sus muertos, enterramientos en urnas.
Pero también elementos diferenciados representados
fundamentalmente por la técnica empleada en la decoración de
sus cerámicas. Y este factor es absolutamente específico ya que
nunca se mezclan las dos técnicas decorativas.
8. 08 TESAPE ARANDU
De inmediato surge la incógnita de la relación que existió entre
los dos pueblos.
He observado un fenómeno que aclara en buena medida esta
incógnita. En el centro de un yacimiento de Mataral de unas tres
hectáreas de extensión, rico en material pintado Mojocoya y con
ausencia total de material inciso, he localizado una pequeña
fosa de aproximadamente un metro de diámetro por treinta
centímetros de profundidad conteniendo unos mil fragmentos
cerámicos. El lugar corresponde a una fosa de desecho o
basurero. Al analizar su contenido cerámico encontré más de una
veintena de fragmentos de cerámica incisa Grey Ware típica y ni
un solo fragmento pintado tan abundantes en todo el yacimiento.
El origen de este basurero tuvo que ser la recogida selectiva del
material inciso y su posterior ocultamiento. La posible intención,
la eliminación de los restos materiales característicos de un
pueblo. Y el motivo, una relación conflictiva entre dos pueblos.
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Nº 22. Ethnographic Museum of Sweden, Gothenburg: 7-137.
9. Gutiérrez Iturriza Roberto, 2014, “Análisis de la decoración
de la cerámica Grey Ware de los yacimientos de la región de
Mataral”. Arqueoantropológicas. Año 4, Nº 4. Cochabamba:
Universidad Mayor de San Simón, Instituto de Investigaciones
Antropológicas y Museo Arqueológico (en presa).
10. Gutiérrez Iturriza Roberto, 2013, “Mojocoya y Grey Ware
en la región de Mataral, Provincia Florida, Departamento
de Santa Cruz, Bolivia” en Tierras Bajas, Jornadas de
Antropología, Historia y Arqueología, Museo de Historia de
la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, Santa Cruz de
la Sierra, Bolivia: 23-24.
11. Gutiérrez Iturriza Roberto, 2012, “Pinturas rupestres del
Abrigo Quebrada del Tirino en Mataral (Provincia Florida,
Departamento de Santa Cruz, Bolivia)”, El Patujú. Boletín
Informativo Institucional, Nº 11 U.A.G.R.M, Museo de Historia
Natural Noel Kempff Mercado. Santa Cruz de la Sierra, Bolivia: 6
12. Jaimes Betancourt Carla, 2012, La cerámica de la Loma
Salvatierra. Beni, Bolivia. Kommission für Archäologie
Aussereuropäischer Kulturen des Deutschen Archäologischen
Instituts. La Paz-Bolivia: 52
13. Saavedra Carlos Gonzalo y otros, 2001, Al este de los Andes,
al sur del Amazonas. Descubrimientos arqueológicos en los
bosques secos de los Llanos de Bolivia. Santa Cruz de la
Sierra, Bolivia.
Roberto Gutiérrez Iturriza
Consejero de Investigación ANCB-SC
Resumen de la Investigación presentada para la 3ra. Convocatoria de
Proyectos de Investigación de la Academia Nacional de Ciencias de
Bolivia, departamental Santa Cruz en Convenio con la UPSA.