1. “AÑO DE LA UNION NACIONAL FRENTE A LA CRISIS
EXTERNA“
ESCUELA DE INGENIERIA DE SISTEMAS
PROBLEMA NO ESTRUCTURADO SOCIAL:
“DROGADICCION“
La finalidad del siguiente trabajo
es proporcionar soluciones viables
para resolver el problema social
con ayuda de la metodología de
sistemas suaves.
HERRERA MOGOLLON HECTOR MARTIN
Dr. (c) CARLOS CHAVEZ MONZON
Piura, 05 de noviembre del 2009
1
2. Dedicatoria:
El presente trabajo es dedicado
a mis padres que siempre me han
brindado su apoyo y con ayuda
de ellos e podido lograr todas
las metas que me e trazado
a lo largo de mi vida.
3. Índice
Pág.
Carátula 1
Dedicatoria 2
Índice 3
Introducción 4
Cap. I: Realidad Problemática de la Drogadicción 5
Cap. II: Marco Teórico y conceptual 10
Cap. III: Aplicación de la M.S.S. para plantear
Soluciones viables al P.N.E.S. 38
Estadio 1: 38
Definición del Problema no estructurado
Estadio 2: 39
La situación problema expresada
Estadio 3: 44
Definición raíz de los sistemas de actividad humana
Estadio 4:
Modelos conceptuales del S.A.H.P.D. para el P.N.E.S.
Estadio 5
Ccomparación del estadio 2 y estadio 4
Estadio 6
Cambios deseables y sistemicamente viables de SAHPD
Estadio 7
Aacciones a seguir para mejorar el sistema de actividad humana
Conclusiones
Anexos
Linkografía
4. Introducción
El problema de la drogadicción en nuestro país es grave, desde países vecinos
Colombia y Perú, se introducen grandes cantidades de drogas y por supuesto
que Machala, nuestra ciudad también recibe su parte.
Una de las muchas razones por las cuales la juventud se dedica al uso de las
drogas, es la falta de espacios deportivos y de recreación; al no haberlos busca
otras formas de diversión y al no encontrarlas es cuando se lanza al mundo de
las drogas.
El joven cree que está haciendo bien el usar drogas para olvidarse de sus
problemas. Hace falta alguien que le haga comprender que ese no es el camino
a recorrer, podrá lograr cosas sin la necesidad el uso de alucinógenos que solo
provocan placer y estados supuestamente felices; sin darse cuenta de los
daños que les causa.
Es lamentable observar a nuestra juventud femenina involucrada en el mundo
de la droga.
La mujer, la futura mujer, la actual jovencita, la adolescente de nuestros días, al
igual que el hombre tiene que prepararse, porque más tarde su rol en los
campos de trabajo y de responsabilidad social son trascendente.
Todas las personas deben decir “NO A LAS DROGAS” y preferir estudiar,
trabajar, practicar el deporte, porque no sacarán nada usando drogas.
Las personas que están vinculadas con el procedimiento de las drogas y con la
distribución no piensan en el daño que ocasionan, les interesa hacer crecer sus
economías individuales ilícitamente adquiridas.
Los consumidores de drogas no se dan cuenta que al hacerlo se convierten en
gentes vendedores, y ayudan al enriquecimiento de los narcotraficantes y lo que
es peor convierten en nuevas víctimas de la drogadicción.
La ciudadanía mira a un drogadicto con desprecio.
Por ello es preciso darle al joven una orientación adecuada, incentivándolo al
estudio y al deporte y otras actividades sanas de mucho valor única forma de
convertirse en el futuro de la patria.
Con ayuda de la metodología de sistemas suaves plantearé soluciones viables
para poder hacer frente al problema no estructurado social.
CAPÍTULO I: REALIDAD PROBLEMÁTICA DE LA DROGADICCIÓN
5. Vivimos en una cultura de la
droga, desde la mañana cuando
tomamos cafeína o tefilina, al
desayuno, hasta la noche, en
que podemos relajarnos al
volver a la casa, con un aperitivo
alcohólico, o un inductor del
sueño con un somnífero,
recetado por el médico, estamos
utilizando diferentes sustancias,
que afectan sobre el Sistema
Nervioso Central, para enfrentar
estas peripecias de la
cotidianeidad. Muchos además
nos activamos a medida que
trascurre el día, aspirando
nicotina. Aun cuando las drogas
han estado presentes en todas
las culturas y en todas las
épocas, hoy son más las
personas que consumen drogas, hay más cantidad y hay más facilidades para
conseguirlas. Cuando se realiza una encuesta y se pregunta por los mayores
problemas de la sociedad actual siempre sale nombrado dentro de los 5
primeros lugares el "problema de drogas". Y cuando se consulta a la gente el
porque de este problema siempre se nombra como un problemas de pobres y
marginales. Y hace mucho tiempo que dejo de ser un problema callejero y de
marginales, y esto ocurrió cuando las drogas fueron el mejor negocio para
algunos y la peor desgracia para otros. El consumo de sustancias es cada vez
más permisivo, esto hace creer a las personas "que no sucede nada si se
consume". La drogadicción y todo lo asociado a hechas es una gran perdida de
plata para quienes están en contra, sobre todo para los estados quienes deben
combatirlas desde muchos puntos a la vez. Vivimos en una cultura de la droga,
desde la mañana cuando tomamos cafeína, al desayuno, hasta la noche, en
que podemos relajarnos al volver a la casa, con un aperitivo alcohólico, o un
inductor del sueño con un somnífero, recetado por el medico, estamos
utilizando diferentes sustancias, que afectan sobre el Sistema Nervioso Central,
para enfrentar estas peripecias de la cotidianeidad.
El consumo de sustancias es cada vez más permisivo, esto hace creer a las
personas "que no sucede nada si se consume".
La pregunta principal que da inicio a esta discusión es ¿es lo mismo desvío que
adicción?, ¿todo adicto es un desviado o delincuente?
Para uno de los padres de la sociología francesa, Emile Durkheim la desviación
y el crimen tenían un carácter si bien normal, ya que estaban inextricablemente
unido a la sociedad como un todo orgánico, también patológico por sus efectos
disgregadores. El crimen se debía comprender como parte del mismo grupo, el
cual a su vez por medio del castigo al delincuente (o desviado), reforzaba su
cohesión moral.
6. En este mismo sentido, podríamos sostener (temporalmente) que la adicción
como acción de desvío, también es un fenómeno propio (normal) de ciertas
sociedades (Durkheim, 1995) (Durkheim, 2004a) (Cambiasso; Grieco y Bavio,
2000). Por el contrario, para el psiquiatra Erving Goffman, el desviado se
constituye en cuanto a tal no sólo por sus acciones sino por la imposición social
de un rol determinado (Goffman, 2006). Según estas premisas, entonces el
adicto se valora como tal debido a la auto-percepción e internalización impuesta
por su propio grupo, ora por medio de un estigma o través de un estereotipo.
Sin embargo, habrá que considerar en primera instancia o repensar si es
realmente la adicción a cierta sustancia un hecho propio del desvío? ¿Qué se
entiende por drogadicción?
Las drogas (farmacológicas) y los estupefacientes ilegales han estado
presentes (a lo largo de la historia) y se encuentran a disposición de consumo
de la población en general. La mayoría de las civilizaciones, han hecho uso de
estas sustancias en rituales religiosos o para generar algún tipo de estímulo;
por lo tanto la droga en sí no es sustancialmente un problema actual; por el
contrario, la tendencia compulsiva (obsesiva) a consumir estupefacientes (sean
legales o ilegales) si parece ser un fenómeno del mundo urbano moderno.
(Rodríguez-Cabello, 1986) (Romaní, 1992) (Saiz Galdós, 2007)
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud define a las drogas como
una sustancia (natural o química) que introducida en un organismo vivo es
capaz de actuar sobre el sistema nervioso central produciendo ciertos cambios
en la percepción o estado psíquico.
Sin embargo, la dependencia a una de estas sustancias es puramente humana
e intra-psíquica. La drogodependencia se vincularía más bien a un estado
psíquico de dependencia con respecto a una droga determinada (natural o
artificial). La dependencia, se conforma en ese sentido como vínculo de
subordinación entre el ego y la sustancia que por medio del hábito y el consumo
se traduce en una alteración (neurosis) de la realidad. Una clase de efecto
sustitutivo y compensatorio de lo que Freud (1988) llamó principio de realidad y
neurosis. Por ese motivo, el pensamiento colectivo vincula al problema
específico con el desvío social; pero lo cierto, es que no necesariamente tienen
relación.
Ciertos estereotipos o prejuicios tienden a señalar que cuando disminuye la
solidaridad familiar por razones económicas (falta de trabajo) o sociales
(costumbre a no trabajar), aumenta la posibilidad de consumo. Estas
afirmaciones corren vigentes para ciertos grupos llamados así “marginales”;
como pueden ser los “villeros o los delincuentes”. Según esta posición
ideológica, la cultura de estos actores “determina” sus actitudes y prácticas con
respecto a la violencia y la drogadicción (Puex, 2003) (Rossini, 2003).
Un grupo de delincuentes puede utilizar parte de su botín en el consumo de
drogas como en la compra de “otros tipos de diversión” bajo una forma
“recreativa”; o robarle a sus propios vecinos y auto-justificarse aduciendo haber
estado “pasado” (modalidad eufórica) (Kessler, 2002) (Rossini, 2003). En el
7. segundo caso, el sujeto ha roto una regla básica de su grupo de pertenencia: no
robar en el barrio.
Por tal motivo, en cuanto al uso de drogas, establecemos existen dos
modalidades teóricas posibles: 1) una “recreativa”, “estimulante” o “placentera”,
cuyo objetivo es buscar nuevas sensaciones de descanso y placer; bajo esta
modalidad, las drogas se consumen en forma privada/pública y moderada; y 2)
una “eufórica y alocada”, cuya manifestación se da en las etapas de adicción
severa, y responde a la necesidad de romper con toda normativa y justificar
dichas prácticas por medio del consumo. (Uso, 1996) (Saiz Galdós, 2007)
(Kessler, 2002) (Rossini, 2003)
Es posible, que en una etapa avanzada de la adicción se recurra al delito como
forma de conseguir dinero para el consumo; como advierte el investigador
Gerardo Rossini: “paralelamente a la crisis del empleo y a la persistencia de la
baja escolarización, sucede la introducción de la droga que se superpone a la
fuerte presencia del alcohol en estos barrios. La droga, a su vez, trae aparejada
una mayor necesidad de dinero para acceder a ella, e influye en la conflictividad
de la convivencia con los vecinos, en cuanto que no es tolerada por los
mayores y en cuanto facilita comportamientos disruptivos” (Rossini, 2003:82).
No obstante, suponer a la drogadicción como hecho vinculado al desvío (in
facto esse) parece una idea sin mucho fundamento (aunque en algún punto se
vinculen); o por lo menos, encontraría muchos obstáculos para explicar las
causas por las cuales ciertas sustancias se convierten de ilegales e legales y
viceversa, como por ejemplo el tabaco, los psicofármacos o el alcohol.
Otro aspecto que el binomio legal/ilegal no puede explicar, es la convivencia
(aún en la clandestinidad) de subsistemas legales de reciprocidad junto a los no
legales, como por ejemplo el uso dinero de circulación corriente (el billete). La
ley de estupefacientes provee sanciones severas para quienes incurran en el
tráfico de ciertas sustancias (acción ilegal), aunque los motivos por los cuales
éstas se trafican sean legales (acumulación de dinero).
Al momento, dentro de la Ciencias Humanísticas existe una división entre
quienes consideran a todo el consumo de drogas vinculados a las mismas
causas psico-sociales y aquellos que por el contrario, advierten en la modalidad
de consumo como variable distintiva del problema que lo genera. (Secades Villa
et al, 2007)
Algunos estudios realizados apuntan a que el consumo de drogas disminuye
cuando los factores externos no son favorables para dicha acción. Utilizando
ciertas nociones de la economía clásica, esta corriente supone que existen tres
elementos capaces de regular al consumo de sustancias: los esfuerzos puestos
en conseguir la droga (demanda), el precio de la misma (precio) y los
reforzadores internos (costo de oportunidad). (Nader y Wolverton, 1992)
(Secades Villa et al, 2007). Según mencionara, Sahlins el oportunismo del
adicto en buscar el mayor placer al menor costo, puede sugerir una
“reciprocidad negativa”. (Sahlins, 1972) (Puex, 2003) (Saiz Galdós, 2007)
8. Por otro lado, según la posición de Secades Villa et al (2007), la actitud adictiva
prefiere los reforzadores inmediatos en detrimento de los demorados. En clase
de casos, el individuo manifiesta una tendencia al consumo en el presente y
abstenerse de experimentar a largo plazo sensaciones positivas.
Algunos estudios en animales y humanos sugieren que en momentos de
“situación inescapable”, de “presión” o “estrés”, el sujeto aumenta sus
posibilidades de buscar sensaciones placenteras y evasivas. Nuevos espacios y
lugares se buscan como modos alternos de exploración, asociados en una
etapa posterior al consumo. (García y Armario, 2001) (Leyton et al, 2002)
(Nadal- Alemany, 2008). Otros apuntan a la impulsividad no sólo como una de
las causas principales de consumo, sino de sustentabilidad del mismo en un
lapso de tiempo determinado. (Forcada Chapa et al, 2006)
El problema que sugiere esta hipótesis de trabajo es atribuir al fenómeno una
característica exclusivamente personal. En otras palabras, gran parte de la
psicología si bien admite a la drogadicción como inserto en una trama social,
fundamenta su génesis en procesos intra-psíquicos de compensación y
refuerzo; en otros términos, más allá de la drogodependencia se debe analizar
la personalidad adictiva (a diferentes sustancias). En los adictos, existe una
evidente falta de habilidad en afrontar determinadas situaciones (carencia de
asertividad). Esta postura considera que existen ciertos desequilibrios
cognitivos (internos) los cuales ameritan ser re-ordenados (por medio de la
terapia y el ordenamiento racional del mundo). (Monti et al, 1995)
Dentro de los grupos humanos, los rituales de situación se configuran contrarios
a una autoridad estatal simbólica, inserta en la tradición y el conocimiento. Son
la inmediatez de la experiencia y la vivencia entre los integrantes del grupo, los
que dan propia identidad y solidaridad. A diferencia de otros rituales (vitales o
de aflicción) donde predominan el linaje o el parentesco, en los rituales de
situación se rompe la línea temporal entre pasado y presente, dando origen a
un nuevo presente cargado de una fidelidad temporal (Duschatzky y Corea,
2002).
Los diferentes consumos, modernos y postmodernos, se inscriben dentro de
ésta lógica; incluyendo el uso de drogas. Estas últimas pueden estar presentes,
como formas complementarias simbólicas o ser parte referente del ritual. En
efecto, fumar un cigarrillo de marihuana en determinados contextos frente al
grupo de pares, se ha transformado en un rito de situación característico de
algunos jóvenes y adolescentes. A partir de ese momento, el individuo pasa a
formar parte de una red específica con sus propios manejos ideológicos,
territoriales, represivos y filiales con arreglo a ciertos valores, mitos y héroes.
Generalmente, como observa Duschtazky y Corea (2002:37) “el rito del
bautismo se constituye en una forma de afirmación del yo. El pasaje (haber
superado las pruebas) implica alcanzar un estatuto de respetabilidad dentro del
grupo. Atravesar estas prácticas significa pasar a un nuevo estatuto…”.
En este punto, los aportes de la etnografía nos ayudan a comprender que
dentro de las dinámicas colectivas, los individuos o consumidores articulan una
9. serie de jerarquías y roles culturales los cuales exacerban el propio consumo.
En este caso, a mayor consumo y auto-control de los efectos, mayor es el
respeto de los integrantes del grupo por el líder. Esta dinámica, que se observa
claramente en diferentes situaciones legitima una práctica sistémica y adictiva
en lo que respecta a varias sustancias. Particularmente, se puede ir
consumiendo una de menor impacto mientras se es un “principiante” y
aumentar las dosis o incurrir en drogas más pesadas “a medida que se va
haciendo carrera”. (Rossini, 2003)
Esto sugiere otra cuestión de mayor envergadura. ¿Qué problemas encuentra
el tratamiento cognitivo clásico en adicciones cuando el paciente se inserta en
el mundo social?
En concordancia con la pregunta planteada podemos afirmar que existe todavía
una gran laguna a la hora de explicar porque ciertas personas se hacen adictas
a las drogas y otras no. Más específicamente, “la mayoría de las personas han
consumido alguna vez en su vida drogas legales. Otras muchas, incluso, se han
expuesto a los efectos psicoactivos de las ilegales. Afortunadamente, aún
después de un tiempo considerable de exposición a estas sustancias, el
porcentaje de individuos que llegan a ser adictos es pequeño. Al preguntarnos
porque unos sujetos se hacen dependientes y otros no, la respuesta es que aún
no lo sabemos”. (Flores, 2003:187).
A esto se le suma que, gran parte de los adictos en recuperación no terminan
correctamente su tratamiento o recaen en ciertos períodos de inserción o
exposición ambiental. Aun cuando la técnica economicista del refuerzo provea
al sujeto de ciertos métodos para regular su ansiedad y frustración ante el
principio de realidad; éstos no parecen ser mecanismos preventivos suficientes
(Rodríguez-Cabello, 1986). En primera instancia, el principal problema que esta
corriente teórica omite es la relación entre las normas, las instituciones como
formas reguladoras de la conducta humana y la capacidad del sujeto de
aceptarlas o rechazarlas según sus propios intereses (Perrow, 1984)
(Malinowski, 1985) (Turner, 1999).
Segundo, se subestima el poder y la influencia mítica que los grupos de
referencia tienen sobre el sujeto, invocando y trayendo a su recuerdo “los
buenos tiempos”. Como sugieren algunos autores, la urbanidad presupone
fenómenos específicos a su estructura organizativa como las adicciones, no por
el hecho de que sólo su consumo se encuentre en la ciudad (aunque así
parezca) sino por las condiciones de anonimato y falta de coacción que la
misma ciudad provee (Bahrdt, 1970) (Clarke et al, 1997).
Los grupos humanos insertos en las grandes ciudades no tienen un
conocimiento certero del otro sino parcial; esta posición le permite a un sujeto
estar condicionado a un pluralidad de normas institucionales (a veces
contradictorias entre ellas) y establecer estrategias de adaptación diversas o
ambiguas. La sanción moral sobre un individuo en un grupo (esfera laboral), no
implica un gran impacto en otro. En la ciudad, ante cualquier desviación la
exposición social es siempre menor que en un medio rural. En este contexto,
aún las instituciones terapéuticas que recuperan adictos tienen muchos
10. obstáculos para aplicar sus métodos de refuerzo y castigo; por cuanto deben
competir con otras instituciones.
Por último, existe una gran contradicción en la misma tesis cognitiva. Si
partimos de la base (axioma), que la “personalidad adictiva” dirige su atención
al refuerzo presente, el “recuperado” actual va a recaer (en un futuro) si se
encuentra expuesto a condiciones que exacerben el consumo de
estupefacientes u otras sustancias. Suponer que el adicto es tal por su
personalidad, es como creer que un individuo es “pobre” por características
propias de su cultura. (Lomnitz, 1999) (Castells, 1999) (Korstanje, 2008)
Esto, explicaría, en parte teórica el porque de las recaídas de los adictos en
recuperación (aún finalizado su tratamiento). Pero es realmente la adicción un
hecho social propio del mundo urbano?, ¿qué datos comprueban esa
afirmación?
CAPÍTULO II: MARCO TEORICO Y CONCEPTUAL
1. Definición de drogadicción:
Adicción a cualquier tipo de droga, pero referida especialmente a las
drogas ilegales. En el SIDA ha sido factor importante de transmisión el
uso compartido de jeringas con agujas contaminadas con el VIH entre
drogadictos que utilizan drogas por la vía intravenosa. Este riesgo
desaparece si antes de cada uso la jeringa y aguja se llenan con una
solución diluida de cloro y después con varios enjuagues de agua limpia
o bien mediante el uso de agujas desechables, política que están
siguiendo las autoridades sanitarias de algunos países que regalan
jeringas desechables entre los drogadictos, a riesgo de ser acusadas de
fomentar la drogadicción.
La organización mundial de la salud (O.M.S.) define las drogas como una
sustancia (natural o química) que, introducida en un organismo vivo por
cualquier vía de administración (ingestión,
inhalación, por vía intravenosa o
intramuscular), es capaz de actuar sobre el
cerebro y producir un cambio en las conductas
de las personas debido a que modifica el
estado psíquico (experimentación de nuevas
sensaciones) y tiene capacidad para generar
dependencia.
2. Historia
La penetración del opio en el círculo cultural de Occidente tuvo lugar
decorosamente, por medio de las más altas esferas literarias. Nada
menos que con el canto cuarto de la Odisea, de Homero, donde en sus
versos 219 a 233, nos describe entre líneas, al opio no sólo como
narcótico sino también como un psicofármaco. El dolor que según el
11. poema está llamado a mitigar, es de tipo espiritual, psíquico diríamos
hoy.
El efecto del jugo extraído de las cápsulas inmaduras de la adormidera
(papaverácea somnífera) era ya conocido en el país del Nilo desde
muchos años antes. Ocho siglos antes de Homero, en 1600 a. de C. la
traducción de un papiro nos dice que hubo un médico que recomendaba
el opio como "un medicamento para mitigar el llanto exagerado de los
niños pequeños". Había que tomar "cápsulas de amapola y granos que
se mezclan con la suciedad que las moscas dejan en las paredes, hasta
formar con él toda una masa que se filtra y se da a los niños a partir del
cuarto día".
Cuando Yago, en la tercera escena del tercer acto del Otelo de
Shakespeare, habla sobre su intriga, menciona también dos drogas:
Ni la adormidera ni la mandrágora
Ni todos los adormecedores jugos de la naturaleza
Te ayudarán a recuperar el dulce sueño
que hasta ayer fue tuyo.
Que el opio y otras drogas sean mencionadas por Shakespeare más de
doscientas veces no tiene nada que ver con una pasión personal del
escritor -los sabios del Renacimiento, en todos los países, siempre
estuvieron decididos a investigar de nuevo el mundo, y las drogas tenían
para ellos un especial interés-.
García da Horta, informa, en su Historia de las drogas, de ciertas
contradicciones: el opio es un "veneno estimulante que los turcos toman
para vencer el cansancio, pero no como afrodisíaco, como algunos creen
estúpidamente, pues el opio no sólo no aumenta el apetito carnal, sino
que apacigua la llamada de la carne".
En ningún libro, hasta entonces, se mencionó el peligro de hábito que
implica el consumo del opio. El primero en mencionarlo fue el sacerdote
Samuel Purchas, contemporáneo de Shakespeare.
La droga más extendida en el mundo libre occidental es, actualmente, el
Valium. Uno de cada tres hogares en la República Federal de Alemania
la tiene en sus botiquines caseros. En el caso de abuso, si se toma una
sobredosis, se puede sufrir de mareos y pérdida de conciencia, el
producto es una causa de adicción. Los tranquilizantes son una droga
legal, y aunque pueden producir
algunos accidentes profesionales, han
sustituido a otros productos
preocupantes derivados del opio.
En Inglaterra la mayor parte de los
libros que tratan las drogas, se basan
en la apreciable cantidad de
investigaciones e informes que en su época se editaron y, con ellos, se
llega fácilmente a la impresión de que el opio fue un problema específico
de las Islas Británicas. Esto no es cierto, si se tiene en cuenta la cantidad
12. de opio consumido en Europa. En lo único que los ingleses superan al
resto de los europeos es en la mayor precisión en los informes.
No hay duda de que podrían llenarse muchos metros de estantería con la
literatura que se ha escrito sobre el efecto y estímulo que las drogas
ejercen en la producción de obras de arte. La razón que la pregunta no
haya podido obtener, hasta ahora, una respuesta precisa es muy simple.
En primer lugar no hay ninguna droga capaz de dar vida a un mundo
propio imaginario. Todo lo que puede hacer, en el mejor de los casos, es
juntar y dar forma a una serie de experiencias diversas. Ésta es una
cualidad que las drogas comparten con los sueños y con la fantasía
artística, por lo que el papel de las drogas en la creación artística es sólo
complementario, relativo.
En el caso de las drogas alucinógenas como el hachís, repetidas veces
se ha tratado de descubrir si existen "modelos de fantasía" que sean
fruto específico de la droga. La mayoría de los científicos han llegado a la
conclusión que las drogas alucinógenas lo único que hacen es acentuar
la capacidad de fantasía ya existente en la mente del artista, pero no son
capaces de crear nada por sí mismas. La droga cuyo uso está más
extendido entre los artistas es el alcohol, y tiene al parecer, dos
características peculiares: En la mayoría de los artistas su función se
limita a ayudarles a superar el estado de stress causado por el trabajo
creativo, como una especie de vacaciones psíquicas; en los alcohólicos
graves produce un oscurecimiento de su mundo representativo y una
tendencia a la búsqueda de temas "fantasmagóricos". Del alcohol se
puede esperar más o menos lo mismo que de los narcóticos y, por lo
tanto, no debe sorprender a nadie que en algunas épocas un número
sorprendente de escritores y otros artistas se den al alcohol y acaben por
pasarse al opio y sus derivados.
En 1898 la firma Bayer saca a la venta un producto, (probado por un
período de apenas dos meses) con el nombre de Heroína que según los
científicos los resultados fueron:
• Contrariamente a la morfina, esta nueva sustancia produce un
aumento de la actividad.
• Adormece todo sentimiento de temor.
• Incluso las dosis más pequeñas hacen desaparecer todo tipo de tos,
hasta en los enfermos de tuberculosis.
• Los morfinómanos tratados con esta sustancia perdieron de inmediato
todo interés por la morfina.
Ese mismo año, logran otro importante descubrimiento "Aspirinas" el
sustituto de los salicilatos, y Heroína el medicamento ideal para eliminar
la tos. Años después se
descubrió que la Heroína de
Bayer producía adicción y la
empresa decidió dejar de
vender este producto.
El camino que condujo a las
drogas a la clandestinidad
13. recorre en todos los países civilizados el mismo camino diabólico:
establecimiento de una rigurosa obligatoriedad de recetas especiales
para conseguir todo tipo de derivados del opio; leyes penales muy
severas contra la falsificación de recetas, así como contra los médicos
que las prescriben a la ligera. Con ello, desde luego, no podía hacerse
desaparecer el problema sino, simplemente, sacarlo de la superficie para
pasarlo a la clandestinidad.
La guerra de Vietnam, fue testigo del matrimonio de la heroína con la
política. Las guerras subversivas son por lo general, financiadas con
negocios ilegales y desde la segunda guerra mundial, el mercado de
armas clandestino es en muchos casos idéntico al de la droga. Se dice
que en la guerra de Vietnam, la CIA, manejaba tres compañías de
aviación: Air America, Continental Air Service y Lao Devlopment Air
Service (en Indochina). Estas compañías se las conocía como Air Opium.
De acuerdo con un informe de la CIA a finales de la década del 60, los
ingresos de los gobernantes en Vietnam y Laos provenían de las
siguientes fuentes: 1- Venta de Cargos de importancia en el gobierno. 2-
Sobornos 3- Corrupción militar y 4- El contrabando de opio.
Otro ejemplo de la relación de las drogas con la política es la gran
cantidad de diplomáticos sorprendidos con gran cantidad de drogas entre
su equipaje en los últimos años.
3. Clasificación de las drogas
Narcóticos: Son drogas que producen dependencia física y sicológica,
unos de sus efectos son la euforia, reducción del temor, de la tensión, de
la ansiedad, la actividad física, produciendo insomnio, vómitos, etc.
Sedantes: Son drogas que
deprimen y retardan las funciones
del cuerpo. A menudo, estas
drogas se llaman tranquilizantes y
píldoras para dormir o, a veces,
simplemente sedantes.
Sus efectos oscilan entre calmar a
personas que experimentan
ansiedad y promover el sueño.
Tanto los tranquilizantes como las
píldoras para dormir pueden tener
ambos efectos, según la cantidad
ingerida.
Estimulantes: El término “estimulante” se aplica a varios grupos de
drogas que tienden a aumentar la agudeza mental y actividad física.
Algunas personas emplean los estimulantes para contrarrestar la
somnolencia y el sentimiento de “cansancio” producido por las píldoras
para dormir. Este ciclo de estímulo-depresión es sumamente perjudicial
para el cuerpo y peligroso.
14. Alucinógenos: Son drogas que afectan las percepciones, sensaciones,
capacidad mental, conciencia y emociones de las personas.
4. Tipos de consumidores de drogas.
Consumidor experimental.
Causa más común de su consumo: curiosidad, experimentar un estado
de ánimo diferente.
Características del consumo: consumo esporádico. Individuos que llegan
a probar una vez y luego la dejan y no vuelven a consumirla.
Consumidor
recreacional.
Causa más común de su
consumo: búsqueda de
placer.
Características del
consumo: esporádico, de
tipo social.
Consumidor
circunstancial.
Causa más común de
consumo: necesidad de
lograr un fácil apoyo para
enfrentar una situación
determinada.
Características de
consumo: consume cada
vez más para sentirse
“bien” ante determinadas
situaciones.
Consumidor habituado.
Causa más común de consumo: mantener el estado anímico, psicológico
o físico que produce la droga.
Características de consumo: una o más veces al día.
Consumidor adicto
15. Causas más común de su consumo: necesidad permanente y compulsiva
de experimentar el estado psicológico y/o físico que la droga produce.
5. Métodos de consumo
Método del consumo nasal de la
cocaína: La vía de elección más
frecuente es la nasal, por lo que
es absorbida, en inhalación, bajo
la forma de polvo. Se calcula que
el 80% de consumidores lo hacen
por esta vía.
Método del consumo subcutáneo de la
cocaína: La vía subcutánea, por
inyecciones, es poco usada debido a los
inconvenientes que trae aparejados: uso de
inyecciones y la facilidad de producir
accesos por falta de asepsia.
Método de consumo intravenoso de la
cocaína: Generalmente esta vía es usada
por consumidores inveterados. Lo más
frecuente es que se trate de un consumidor
de heroína, que utiliza por vía intravenosa
una mezcla de heroína-cocaína.
6. Clases de Drogas
ALCOHOL
Es el nombre abreviado de una clase especial de alcohol, el etanol, que
es utilizado con fines embriagantes, Se obtiene de la fermentación o de
la destilación. El etanol, es uno de los alcoholes producidos
industrialmente que puede ingerirse sin riesgo de envenenamiento
inmediato e inminente. Origina euforia y analgesia. Genera dependencia
psíquica en distintos grados y establece dependencia física después de
reducir el consumo, produciendo síndrome de abstinencia, comprendido
en: temblores, alucinaciones, convulsiones y delirios.
Vale anotar lo señalado por el documento “RUMBOS”, respecto del
alcohol: “…el hecho de contar con una amplia aceptación social, no
cambia en nada la circunstancia de que su abuso ha matado más gente,
enviado más víctimas a los hospitales, provocado más arrestos,
16. destruido mas hogares y costado más dinero a la industria, que el abuso
de anfetaminas, barbitúricos y marihuana juntos…”
ANFETAMINAS
Son compuestos sintéticos con propiedades euforizantes al estimular el
Sistema Nervioso Central, contrarrestando los efectos de los depresores.
Produce dependencia psíquica variable y dependencia física pequeña.
La tolerancia se establece con rapidez.
DROGAS DE DISEÑO
Sustancias sintetizadas químicamente que se utilizan
como droga recreacional, buscando en su consumo una
mayor receptividad hacia aspectos sensuales y mayor
empatía con los otros. La más conocida de ellas es el
éxtasis. El uso continuado puede traer graves daños en
el cerebro humano, a largo plazo.
BARBITÚRICOS
Producen dependencia psíquica variable, si las dosis son mayores a los
niveles terapéuticos, produce dependencia física, causa un síndrome de
abstinencia bien grave, traducido en excitación nerviosa, náuseas,
vómitos, convulsiones y manifestaciones de terror.
COCAÍNA
Es un potente estimulante cerebral, muy
similar en la acción a las anfetaminas, provoca
sensaciones de gran fuerza muscular y viveza
mental. Son capaces de provocar, en altas
dosis, una excitación eufórica y experiencias
alucinatorias. Dependencia psíquica y física
muy intensa, el síndrome de abstinencia se
presenta en ansiedad, náuseas, temblores,
cansancio y síntomas depresivos.
OPIACEOS
Producen supresión en el dolor, entre ellos, está la heroína, morfina,
metadona, entre otros. Dependencia psíquica fuerte, manifestada en el
impulso irreprimible de continuar consumiendo. La dependencia física, se
puede dar luego de la primera dosis suministrada. El trastorno por la
abstinencia, se presenta entre 36 y 72 horas después de la privación y es
muy intenso, sus síntomas son: lagrimeo, sudoración, calambres
17. musculares, espasmos intestinales, diarreas e intensas crisis de
ansiedad y depresión.
7. Drogas legales
Existen varios tipos de drogas,
sustancias que provocan adicción.
Hoy hablaremos del alcohol y el
tabaco que son los que provocan
cambios directos en el organismo.
Hoy son sustancias legales, lo son
desde hace mucho tiempo, pero
quizás algún día las cosas cambien.
El tabaco, empujado por la potente industria tabaquera que con su
marketing y la potente adicción de la nicotina han provocado millones de
adictos en todo el mundo en las últimas décadas. Es una droga cuyo
único efecto no existiría si no existiese la adicción, es decir que provoca
bienestar simplemente porque los adictos están nerviosos cuando no
fuman, en su ausencia se encuentran mal y les es muy complicado
dejarlo. Hoy en día se esta endureciendo la ley en muchos aspectos en
contra del tabaco, quizás dentro de unas décadas se haya erradicado su
consumo, pero será difícil.
El alcohol es otra droga legal muy consumida en todo el mundo, aquí en
España además es el protagonista común en un montón de fiestas
regionales, así como tradición en muchos sitios, en muchos grupos de
gente… El alcohol es peligroso por ser causante de muchos accidentes
de tráfico y de salud, además de provocar adicción y daños en el hígado
y el cerebro. Aunque hay gente que no sufre perjuicios por beber alcohol
de manera moderada, otros empiezan así y acaban acudiendo a centros
de desintoxicación o a alcohólicos anónimos porque la adicción al alcohol
destruye sus vidas, cuerpos y familias.
8. Drogas Ilegales
Cocaína
La cocaína procede de un arbusto cuya denominación botánica es
Erytroxilon coca. Se cultiva, fundamentalmente, en los países del
altiplano andino (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú). Allí, desde hace
siglos se mascan las hojas procedentes de la planta, para liberar así su
principio activo y obtener sus beneficios. Las cantidades absorbidas de
18. este modo son muy reducidas, por lo que apenas se registran
consecuencias adversas asociadas a esta forma secular de consumo.
Las culturas indígenas de los países productores usaban la coca con
carácter ritual y por sus propiedades energéticas, que les permitían
realizar trabajos físicos de excepcional dureza sin cansarse en exceso.
Las carencias alimenticias también eran resueltas gracias a que la coca
quita el apetito.
Si este uso tradicional hubiera sido el único modo de consumir la coca,
probablemente esta sustancia no tendría cabida en una Web como ésta.
Sin embargo, desde que se consiguió aislar su principio activo (a finales
del siglo XIX), aparecieron otras formas de uso con un mayor potencial
dañino.
Durante los primeros años del siglo XX, el principio activo de la coca se
utilizó en la elaboración de tónicos como el vino Mariani y la propia Coca-
cola.
Las hojas de coca, sometidas
a diversos procesos de
elaboración química, dan
lugar a distintos derivados:
- Clorhidrato de cocaína: la
forma principal de consumo
en Europa, conocida
popularmente como cocaína.
- Sulfato de cocaína (pasta de
coca, también conocida como
basuko), que se fuma
mezclada con tabaco o
marihuana.
- Cocaína base (crack), que
se fuma mezclada con
tabaco.
El consumo de las dos últimas es absolutamente minoritario en España,
por lo que no les dedicaremos más espacio y centraremos este capítulo
en la cocaína.
La cocaína se consume fundamentalmente esnifada, mediante la
aspiración nasal del polvo, colocado a modo de línea o raya, a través de
un billete enrollado o una cánula. Su uso es, en gran medida, recreativo.
Al igual que ocurre con las anfetaminas, es utilizada con frecuencia para
aguantar sin dormir las noches de los fines de semana.
Opio
Se conoce con el nombre de opiáceos a
una familia de sustancias que tienen en
19. común su emparentamiento con el opio, bien porque derivan de él, como
es el caso de la morfina, bien porque se elaboran mediante síntesis
química a partir de la propia morfina, como es el caso de la heroína
(químicamente diacetilmorfina).
El opio se extrae de las cápsulas de una planta conocida en botánica
como Papaver somniferum. Es utilizado por la humanidad desde la
Antigüedad, existiendo referencias de su consumo que datan de 4000
años antes de Cristo.
El opio se consumió por vía fumada en diversas zonas de Asia, aunque
su gran poder nace a partir del aislamiento de sus diversos alcaloides. Es
el caso, por ejemplo, de la morfina, un potente analgésico obtenido a
partir del opio, aislado por químicos alemanes en 1806, y utilizado
profusamente en la actualidad en contextos médicos. Debe su nombre a
Morfeo, dios griego del sueño.
Alucinógenas
Las drogas alucinógenas integran lo que hemos llamado sustancias
perturbadoras del sistema nervioso central. Se trata de drogas que, al
llegar al cerebro, provocan alteraciones en su funcionamiento
neuroquímico que afectan particularmente a la manera de percibir la
realidad, pudiendo dar lugar a trastornos sensoriales severos e incluso
auténticas alucinaciones.
Los alucinógenos se han utilizado en distintas civilizaciones: La
modificación de la conciencia que provocan era considerada una vía
efectiva para entrar en contacto con
la divinidad, y de ahí su relevancia
en rituales de corte sagrado.
La mayoría de las drogas de esta
familia proceden de hongos
cultivados en países
latinoamericanos y africanos, como
es el caso del Peyote mexicano, del
que se extrae la mescalina; del
colombiano Yagé; o de la planta
procedente de Gabón conocida
como Tabernanthe iboga, de la que
se extrae la ibogaína. Aquí, en
Europa, es clásica
la utilización de la Amanita muscaria, seta alucinógena utilizada con
carácter ritual.
El movimiento hippy descubre los alucinógenos al ver en ellos una vía de
autoexploración que permitiría al consumidor (convertido así en
psiconauta), de acuerdo con su filosofía mística, entrar en contacto
directo con las galerías subterráneas del inconsciente al que en
condiciones normales sería imposible acceder. Abandonadas estas
creencias, que aún se mantienen en determinados colectivos vagamente
marginales, los alucinógenos, como la mayoría de las drogas, han
pasado a ser recreativas y consumidas sobre todo las noches de los
20. fines de semana.
El alucinógeno más utilizado en Europa es la dietilamida del ácido
lisérgico, LSD (conocido en el argot de la calle como ácido o tripi -del
inglés trip, viaje-). En los años60, algunos gurús de la contracultura
norteamericana hicieron un importante consumo y promoción de la LSD.
La LSD fue descubierta casualmente en 1938 por Albert Hoffman,
químico de la empresa Sandoz, cuando investigaba con el cornezuelo de
centeno. Su ingesta
accidental le sumió en un estado alucinatorio que le llevó a investigar
hasta aislar el principio activo responsable de tal estado.
La LSD se consume por vía oral en diversas formas: micropuntos, hojas
de papel absorbente con diversos motivos gráficos, terrones de azúcar
impregnados, etc.
GHB
El GHB es una sustancia depresora del sistema nervioso central que ha
sido empleada médicamente pero que en los últimos tiempos se ha
introducido en el
mercado ilícito del
consumo de drogas,
donde circula en
pequeños botes
transparentes. En el
argot se le suele
denominar éxtasis
líquido. Aunque suele
creerse que tiene unos
efectos parecidos al
MDMA, es
fundamentalmente
una droga depresora.
No obstante, puede
tener algún efecto
psicodisléptico y
estimulante.
Esta droga líquida se
absorbe por vía oral,
aunque se podría
emplear por vía venosa (lo que eleva aún más el riesgo de sufrir
problemas). Comienza su acción aproximadamente a los quince minutos
de la administración. El efecto suele persistir entre 20 y 40 minutos.
El consumidor suele encontrarse sedado, con ligera euforia, aunque lo
que busca es el aumento de la sociabilidad y el deseo de comunicación.
No obstante, lo que puede aparecer paradójicamente es somnolencia,
obnubilación, cefalea, confusión, etc. El GHB puede llegar a producir
depresión respiratoria, así como delirio y alucinaciones.
21. En cuanto a los efectos más graves hay que tener en cuenta que no
existe un antídoto, por lo que el tratamiento tendrá que ser sintomático,
controlando las constantes y adecuando el tratamiento médico a los
síntomas que el consumidor vaya presentando. El síndrome de
abstinencia suele caracterizarse por un cuadro confusional, con
temblores, insomnio y taquicardia. En los casos más graves puede haber
delirios, agitación, ansiedad e incluso alucinaciones.
POLVO DE ÁNGEL
La fenciclidina, polvo de ángel o PCP, se comenzó a fabricar en los años
50 como anestésico intravenoso.
A mediados de los años 60, se dejó de utilizar debido a que producía en
los pacientes intervenidos agitación, estados de delirio y conductas
irracionales.
Se trata de un polvo blanco, cristalino, que se disuelve fácilmente en
agua o alcohol. Tiene un sabor amargo distintivo y se puede mezclar con
facilidad con colorantes.
Se presenta
en forma de
diversas
clases de
tabletas,
cápsulas y
polvos de
colores. Por
lo general,
se usa
inhalada,
fumada o
ingerida.
Los efectos
del PCP en
el cerebro bloquean la habilidad del usuario para concentrarse, pensar de
forma lógica y articular. Ocurren cambios dramáticos en la percepción,
los pensamientos y el estado de ánimo. Algunos usuarios experimentan
una euforia de leve a intensa, mientras que otros se sienten amenazados
por el miedo, la ansiedad o el pánico.
Las personas que usan PCP de forma crónica tienen pérdida de
memoria, dificultad para hablar y pensar, depresión y pérdida de peso.
Estos síntomas pueden persistir hasta un año después de dejar de usar
PCP. También pueden aparecer trastornos emocionales.
22. El PCP interacciona con otros depresores del sistema nervioso central,
como el alcohol y las benzodiazepinas, pudiendo incluso poner en peligro
la vida.
KETAMINA
La ketamina es un anestésico disociativo y actúa creando en el
consumidor la sensación de estar fuera de sí mismo.
Sintetizada en 1962, se utiliza desde los años 70 en medicina y
veterinaria para producir anestesia. Su presentación farmacéutica es un
líquido inyectable. En la calle se puede encontrar como líquido, polvo,
cristales, pastillas o cápsulas. Esta droga puede estar mezclada con
cualquier cosa (efedrina, cafeína...).
Los efectos dependen de la composición, el contexto en que se
consume, las características corporales de la persona y de la dosis,
aunque se han
constatado
sobredosis aún con
bajos consumos.
A dosis bajas los
efectos se parecen a
una borrachera por
alcohol o sedantes,
con pérdida de
coordinación y
dificultades para
hablar y pensar,
visión borrosa, etc.
Ya a dosis altas
puede producirse un viaje psicodélico muy fuerte, pudiendo aparecer
delirios y pseudoalucinaciones, perdiéndose la noción de quién se es y
de dónde y con quién se está, con pérdidas de la noción del tiempo y del
reconocimiento de lo que pasa alrededor. Algunas personas se ven fuera
de su cuerpo o piensan que han muerto o se van a morir.
Es, por tanto, una sustancia muy peligrosa. Puede provocar depresión
respiratoria, paro cardíaco, trastornos de ansiedad, paranoias y su
consumo de forma continuada, problemas de memoria, concentración y
deterioro de otras habilidades.
La Ketamina provoca una dependencia psicológica muy alta y una rápida
tolerancia.
Como en otras sustancias, la mezcla con alcohol u otras drogas aumenta
las posibilidades de perder el conocimiento, de sufrir una depresión
23. respiratoria y un paro cardíaco. Mezclar ketamina con psicoestimulantes
y/o alucinógenos puede provocar una reacción impredecible y muy
peligrosa.
POPPERS
Los poppers son unas drogas recreativas compuestas por nitrito de amilo
en la mayor parte de los casos, pero también por otros nitritos, como
nitrito de butilo o nitrito de isobutilo. Son líquidos incoloros e inodoros que
se administran inhalados y que se presentan en botes de cristal. El
nitrato de amilo es una sustancia muy volátil e inflamatoria y nunca ha de
ser ingerida porque puede ser mortal.
Esta droga produce
estimulación y
vasodilatación, efectos que
se perciben muy
rápidamente. A los pocos segundos de la inhalación se produce una
fuerte sensación de euforia, de ligereza, deseo sexual, etc. Los efectos
desaparecen enseguida, produciéndose de forma posterior depresión y
agotamiento.
Los efectos adversos que se producen con esta sustancia son:
enrojecimiento de la cara y cuello, cefalea, náuseas y vómitos,
taquicardia e hipotensión ortostática. El popper crea tolerancia y una
considerable dependencia física, lo que unido a la breve duración de sus
efectos buscados, lo convierte en una droga peligrosa, con un elevado
riesgo de intoxicación porsobredosis.
9. Infecciones bacterianas en drogadictos
24. Introducción
El uso de drogas ilícitas es un problema sanitario en todo el mundo.
Cerca del 5% de la población global (unos 200 millones de personas)
usan drogas ilícitas. Una encuesta de Estados Unidos muestra que el
8,2% de la población (19,5 millones de personas) de 12 años o más ha
utilizado dichas drogas en el mes anterior. La vía inyectable es una de
las más peligrosas. Se calcula que en el nivel mundial existen unos 13
millones de drogadictos intravenosos, el 78% de los cuales reside en
países en vías de desarrollo.
Las infecciones se hallan entre las complicaciones más graves mientras
que la drogadicción representa un papel importante en la transmisión del
HIV, enfermedades de transmisión sexual y hepatitis viral.
Esta revisión resume la información reciente sobre las infecciones
bacterianas asociadas con el uso de drogas y analiza las interacciones
entre los drogadictos, las drogas de su preferencia y el método de
administración que define la naturaleza de esas infecciones.
Epidemiología
La mayoría de las infecciones en drogadictos están causadas por la flora
comensal del mismo sujeto, siendo el Staphylococcus aureus y las
especies de estreptococos los patógenos más comunes. Los brotes entre
los drogadictos causados por otros organismos menos comunes, como
las especies clostridia y Pseudomona aeruginosas pueden indicar que se
está usando una droga particular o depende del comportamiento del
drogadicto. Las infecciones cutáneas y de los tejidos blandos son
algunas de las más comunes. Su incidencia es difícil de estimar porque
no son consultadas al médico.
La falta de cuidado con las inyecciones puede predisponer a la infección
del tejido blando. Los drogadictos experimentados que ya no tienen
venas aptas para la inyección, lo hacen por vía subcutánea o
intramuscular. Estas vías aumentan el riesgo de infecciones de tejidos
blandos. La inyección de “speedballs” (una mezcla de cocaína y heroína),
realizada más frecuentemente y positiva para la infección por el HIV
también se ha asociado con abscesos cutáneos. El uso de agujas sucias,
la falta de higiene de la piel antes de la inyección y la costumbre de
bombear y succionar durante la inyección también aumentan el riesgo de
abscesos.
Como causa de infección, en California se constataron el S. Aureus
meticilina resistente (MRSA) aislado de la comunidad, como así en
infecciones en presos, militares y homosexuales hombres que usan
metamfetanima, sospechándose una diseminación clonal de la
producción de toxina.
25. La endocarditis infecciosa aparece en 1,5 a 3,3 casos por 1000
drogadictos intravenosos por año. La infección en otros sitios, la
colonización con S. Aureus y el antecedente de endocarditis infecciosa
aumenta el riesgo en los drogadictos. El riesgo es mayor con la cocaína,
quizás por sus efectos vasoconstrictores o la mayor frecuencia de las
inyecciones y la inmunosupresión que sufren los drogadictos sidosos.
Los drogadictos, que suelen ser fumadores o tener infección por HIV,
tienen 10 veces más probabilidad de sufrir neumonía adquirida en la
comunidad (NAC). El riesgo de tuberculosis (TBC) pulmonar (incluyendo
los casos resistentes) es mayor, sobre todo por las condiciones de
vivienda (promiscuidad, intemperie, concurrencia a locales de inyección
[“shooting galleries”]), retardo en el diagnóstico, mal cumplimiento del
tratamiento y la prevalencia de la infección por HIV o SIDA. La TBC y
otros patógenos respiratorios también pueden ser transmitidos a través
de la práctica conocida como “shotgunning” (aspiración e inhalación de
una droga pasando el aire espirado posterior a otra persona en la boca),
una práctica común entre los fumadores de crack. La cocaína inhalada
también predispone a los drogadictos a las infecciones de las vías
respiratorias superiores, incluyendo la sinusitis y, a veces, abscesos
septales.
Existe una asociación
particular entre las
infecciones por clostridios y
el uso de heroína de
alquitrán, una forma de
heroína producida en México.
En 1990, hubo una epidemia
de botulismo en las heridas
en coincidencia con esta
práctica. También hubo un
aumento de los casos de tétanos. En 2003, en Inglaterra, los drogadictos
se vieron contaminados por Clostridium tetani. En California, los usuarios
de heroína de alquitrán también hubo casos de fasciitis necrotizante con
shock tóxico por infección por C. Sordellii. En escocia, en 2000, se
constataron infecciones por clostridios, incluyendo C. Novyi y C.
Perfringens.
Patogenia
Las bacterias responsables de las infecciones en drogadictos son
adquiridas y provienen de la flora comensal del sujeto o de organismos
contaminantes de las drogas, adulterantes o del equipamiento para el
consumo o la inyección.
El papel de la flora comensal
La mayoría de las infecciones bacterianas no pulmonares entre los
drogadictos está causada por S. Aureus o especies estreptococos. Estos
26. sujetos pueden tener mayor colonización del germen en la nariz o la piel,
quizás debido al daño sufrido en el epitelio nasal, secundario a la
inhalación de la droga, o cutáneo, por la inyección, respectivamente.
Tuazon y Sheagren demostraron que la endocarditis infecciosa en
drogadictos internados era provocada por cepas de S. Aureus
colonizadas en el sujeto. La escasez de higiene aumenta el riesgo de
infección con flora comensal.
En un estudio de 1057 drogadictos intravenosos en Baltimore, se
comprobó doble cantidad de abscesos en los drogadictos que nunca
limpiaban la piel antes de la inyección. La inyección en sitios altamente
colonizados, como la vena femoral, también aumenta el riesgo de
infección por flora gram negativa. Muchas veces, los drogadictos rompen
las cápsulas o los comprimidos en la boca antes de prepararlos para la
inyección intravenosa. También “limpian” la aguja en la boca. En ellos, el
riesgo de celulitis o abscesos por estreptococos orales o especies
anaerobias es mayor.
Transmisión bacteriana por compartir el equipo de inyección
El equipo usado por los drogadictos también puede transmitir bacterias
porque puede ser lavado solo con agua, saliva o agua del inodoro o
sanitario. Esto ha sido comprobado en estudios de diversos países. Las
bacterias halladas han sido S. aureus, MRSA, Streptococcus pyogenes
Transmisión mediante las drogas o sus adulterantes
La droga de elección y las técnicas de preparación pueden influir sobre el
riesgo de infección con
organismos particulares. La
asociación entre la heroína de
alquitrán y las infecciones por
clostridios es un ejemplo. Los
investigadores creen que esa
heroína viene contaminada por
esporas cuando son mezcladas
con adulterantes como la
metamfetamina o la estricnina) o
diluidas (“cortadas”) con
sustancias como la dextrosa o
papel teñido. Aunque la heroína
de alquitrán se calienta en agua
antes de usarse, las esporas de
clostridios sobreviven a la
ebullición y aun más, pueden
germinar.
27. El uso intravenoso de heroína de alquitrán causa esclerosis venosa y
promueve la práctica de la vía subcutánea al perder las venas su
viabilidad. La inyección repetida de droga en el tejido blando provoca
isquemia y necrosis, creando un ambiente anaerobio favorable a la
germinación de clostridios y elaboración de la toxina. El uso de
“speedballs” puede potenciar la formación de abscesos y el crecimiento
de organismos anaerobios.
Preparación de la droga
La manera particular de preparación de la droga puede predisponer al
usuario a infecciones inusuales. La combinación intravenosa de
pentazocina (un analgésico) y tripelennamina (un antihistamínico)
conocido en inglés como “Ts and Blues” o TaBs, popular en Chicago en
la década de 1970, se asoció con un brote de endocarditis infecciosa
causada por P. aeruginosas. Los comprimidos son rotos y luego
mezclados con agua corriente caliente antes de la inyección. A diferencia
de las mezclas que contiene heroína, la mezcla era soluble y no requería
calentamiento antes de la inyección. La asociación entre TaBs y la
infección por P. aeruginosas se atribuyó a la presencia de P.
Aeruginosas en el agua de la canilla usada con frecuencia para lavar las
jeringas.
En Escocia, donde es común romper buprenorfina (un opioide) y
temazepam (una benzodiazepina) entre los dientes para luego hacer la
inyección lavada con saliva, se publicó una serie de casos con abscesos
de la ingle por S. milleri.
Susceptibilidad del huésped
Además de la importancia de la higiene,
las condiciones habitacionales, el trauma
tisular, existen otros factores como la
malnutrición y las afecciones coexistentes
que puede alterar las defensas del
huésped y exacerbar el riesgo de
infección entre los drogadictos. La
infección por HIV, y también la tasa de
muertes, aumentan la susceptibilidad de las infecciones bacterianas en
los drogadictos.
Manifestaciones clínicas
En general, la presentación clínica de las infecciones bacterianas en los
drogadictos es similar a la hallada en personas no drogadictas.
Organismos responsables de infecciones bacterianas en
drogadictos
28. Infecciones de la piel, tejido blando y esqueléticas
Staphylococcus aureus (incluyendo MRSA de la comunidad)
Especie Streptococcus¾grupos A, C y G; S. anginosus (milleri)‡
Otras bacterias gram negativas (E. coli, enterobacter, klebsiella, proteus)
Anaerobios orales (especie bacteroides, Eikenella corrodens, especie
fucobacterium)‡
Mycobacterium tuberculosis
Endocarditis infecciosa
S. aureus (incluyendo MRSA de la comunidad)
Especie Streptococcus¾grupos A, C, G y otros
Enfermedades mediadas por toxinas
Clostridium botulinum, C. tetani
Otros especies de clostridios (C. sordellii, C nevyi, C. prefringens)
Estreptococos del grupo A y S. aureus
Infecciones pulmonares
S. pneumoniae, S. aureus, H. influenzae, Chlamydia pneumoniae,
Micoplasma pneumoniae, Legionella Pneumophilia
Flora orofaríngea (por aspiración)
Infecciones oportunistas (asociadas al HIV)
M. tuberculosis (incluido la multirresistente), complejo M. aviae, P.
aeruginosas,
especies nocardia, Rhodococcus equi
Infecciones de transmisión sexual
Chlamydia trachomatis, Neisseria
gonorrhoeae, Treponema pallidum, y
otros
Esta es una selección de patógenos
bacterianos posibles. Otros
patógenos
bacterianos o no bacterianos
también pueden estar presentes y
deben ser
considerados en el diagnóstico
diferencial.
Estos organismos suelen corresponder a la contaminación oral
Los drogadictos intravenosos tienen mayor riesgo de endocarditis
infecciosa
polimicrobiana
Infecciones de piel y tejidos blandos
29. Aunque los abscesos asociados con el MRSA adquirido en la comunidad
suelen ser similares a otros abscesos, en ocasiones se confunden con
picaduras de arañas. Dicho germen debe ser considerado como una
causa potencial en pacientes con abscesos que tienen el antecedente de
ese tipo de infecciones, o pertenecen a grupos de riesgo potenciales que
viven en regiones de alto riesgo y en pacientes con infecciones que no
responden a los antibióticos convencionales.
Infecciones músculoesqueléticas
Estas infecciones incluyen las artritis sépticas y la osteomielitis, en
general, en los drogadictos, como resultado de la diseminación
hematógena o, en ocasiones, a la extensión local de una infección de la
piel o los tejidos blandos. Pueden ser indolentes o tener como único
síntomas el dolor, sin fiebre. Los drogadictos inyectables son
susceptibles a las infecciones esqueléticas en sitios poco habituales
como las articulaciones esternoclavicular o sacroíliaca, además de los
sitios comunes como la columna vertebral y la rodilla. Estas infecciones
pueden resultar, en parte, de la inyección en áreas de alto riesgo como la
vena yugular o la vena femoral. Las infecciones musculoesqueléticas
también tienen más probabilidad de ser polimicrobianas o anaeróbicas,
por la presencia de contaminantes en el sitio de inyección, el quipo o la
saliva del drogadicto.
Infecciones endovasculares
Las infecciones endovasculares, incluyendo la endocarditis, la
tromboflebitis séptica, los aneurismas micóticos y la sepsis, se hallan
entre las complicaciones más graves. Todo drogadicto intravenoso que
presente bacteriemia debe ser estudiado en busca del foco
endovascular. Aunque la endocarditis infecciosa de las cavidades
izquierdas es similar a la de los sujetos no drogadictos, la causa más
común en los drogadictos intravenosos es S. aureus y afecta la válvula
tricúspide en el 70% de los pacientes. Puede haber fiebre, diseña, dolor
torácico de tipo pleurítico y tos. Puede no existir soplo. La tasa de
mortalidad es menor al 5% pero es mayor en drogadictos
inmunocomprometidos, con menos de 200 CD4/mL. La endocarditis
infecciosa de cavidades izquierdas puede causar abscesos cerebrales o
esplénicos, por embolización séptica. La endocarditis infecciosa en
drogadictos intravenosos es uno de los raros casos en los cuales la
endocarditis es polimicrobiana.
30. Infecciones del tracto respiratorio
Las infecciones del tracto respiratorio son la consecuencia más frecuente
del uso de drogas, y los pacientes pueden presentar cuadros clínicos y
radiográficos atípicos. La historia clínica tiene como meta descartar la
TBC, la infección con HIV y los factores de riesgo de aspiración. La
causa más común de internación es la neumonía, incluida la neumonía
por aspiración, causada por S. pneumoniae, Haemophilus influenzae, S.
aureus y Klebsiella pneumoniae. La infección por HIV puede hacerse
evidente recién a partir de una infección oportunista como la neumonía
por P. carinii. Las infecciones endovasculares pueden causar embolia
pulmonar séptica produciendo neumonías y abscesos pulmonares. En un
drogadicto con neumonía e infección por HIVA (confirmada o
sospechada) debe descartarse la TBC. En este caso, existen cuadros
atípicos (lesiones no cavitadas) y el test con derivado proteico purificado
puede ser negativo. Pueden encontrarse linfadenopatías hiliares o
mediastinales como hallazgo único.
Otras infecciones
Entre las infecciones inusuales
más importantes en drogadictos
se hallas las infecciones por
clostridios, que se han hallado
asociados al uso de heroína de
alquitrán. Pueden producirse
presentaciones típicas como en
los casos de tétanos, o inusuales,
como en las infecciones por C.
Sordellii, las que se manifiestan
con shock tóxico (con lesiones
cutáneas o sin ellas). En estos
casos, se debe investigar el uso
de inyecciones subcutáneas o
intramusculares y la fecha de la
última inmunización antitetánica. Otras enfermedades por toxinas, como
el botulismo, pueden confundirse con intoxicaciones.
Prevención
Si bien el modo más seguro de controlar estas infecciones es la
eliminación del consumo, no siempre se hace posible. Hay muchas
estrategias para reducir el riesgo de infecciones en drogadictos, en
particular los de comienzo reciente, quienes están en mayor riesgo.
Estos programas incluyen la provisión de servicios de inyección
supervisados médicamente, programas de intercambio de jeringas,
educación en la vía pública dirigida al uso de prácticas de inyección
estériles, evitar el uso de contaminantes o compartir jeringas, evitar los
sitios de inyección peligrosos, como el cuello o la ingle y el sexo no
protegido a la promiscuidad sexual. La vacunación contra el neumococo,
31. H. Influenzae de tipo b, y el tétanos, como así el screening de la TBC, el
HIV y las enfermedades de transmisión sexual, puede ayudar a evitar las
infecciones bacterianas y transmitidas.
Tratamiento
El manejo medico de las infecciones bacterianas en los drogadictos
comienza con el diagnóstico de drogadicción y las condiciones
coexistentes asociadas. Una parte de la estrategia terapéutica incluye el
abandono de la droga, la adherencia al tratamiento y las dificultades del
acceso intravenosos.
Es importante el control de los brotes locales y los perfiles de resistencia
bacteriana a los antibióticos.
Para el tratamiento de las endocarditis infecciosas de las cavidades
derechas en drogadictos intravenosos, aunque está indicado el
tratamiento convencional, se han estudiado los cursos cortos de
regímenes parenterales y orales. Los casos seleccionados provocados
por S. aureus sensible a la meticilina han sido tratados con una penicilina
resistente a la penicilinasa y un aminoglucósido (2 semanas) o
ciprofloxacina y rifampicina (4 semanas). Los criterios de exclusión para
el curso corto o el tratamiento oral de la endocarditis infecciosa derecha
por S. aureus son las infecciones por MRSA, casos complicados
caracterizados por una respuesta clínica baja (más de 96 horas),
vegetaciones valvulares grandes (más de 2 cm), complicaciones
extracardíacas o, drogadicción intravenosa en un paciente con SIDA.
Para los regímenes que requieren tratamiento prolongado, como para la
TBC, se utiliza el
tratamiento, con
observación directa. En
casos de enfermedades
de transmisión sexual,
además de las
recomendaciones
estándar, cuando fue
posible, el tratamiento de
una sola dosis fue
satisfactorio.
La elección del
tratamiento también debe considerar las diferencias regionales de
susceptibilidad antibiótica de las bacterias prevalentes. Con la
emergencia de MRSA de la comunidad como patógeno virulento, es
importante hacer cultivos para la sensibilidad antibiótica antes de iniciar
la terapia. También deben considerarse patógenos inusuales de acuerdo
con las características del drogadicto, incluyendo el tipo de droga y la vía
de administración. Los drogadictos intravenosos con fiebre sin foco
localizado presentan un problema diagnóstico particular y debe
sospecharse una infección. El 20% de los pacientes internados febriles
32. presenta endocarditis infecciosa. Sin embargo, dicen los autores, en
estos pacientes el diagnóstico basado solo en los criterios clínicos o de
laboratorio es difícil.
10. Factores que influyen en el desarrollo de una drogadicción
Según Kalina y llegando a una gran simplificación, la respuesta es la falta
de amor, el abandono y las consecuencias psicológicas
correspondientes.
Luego especificaremos otros factores que influyen, y los analizaremos
con mayor detalle. Volviendo a la falta de amor, el hombre al nacer y
durante una cantidad de tiempo importante, necesita dedicación,
atención y cuidados
amorosos para poder
desarrollarse e
integrarse
adecuadamente.
Cuando esta
condición falla, vemos
entonces aparecer
con gran frecuencia
los trastornos de la
personalidad y
también las
adicciones.
Esto nos lleva a
analizar algunos
elementos que Kalina
considera importantes para explicar el desarrollo de una adicción.
Factores constitucionales:
Estudiosos de la psicología infantil, como Klein, consideran que hay
niños que nacen con características psicológicas de origen constitucional
diferentes, por ejemplo hay niños que nacen con una menor capacidad
para tolerar la ansiedad, que son más impulsivos y que tienen
características diferentes a otros niños.
Se está investigando las bases neuroquímicas de la conducta y ya se
sabe por ejemplo, que el feto responde con alteraciones del ritmo
cardiaco, succión del dedo y movimientos a situaciones de estrés de la
madre.
Podemos suponer entonces que a través de mensajes neuroquímicos se
va plasmando una pauta de respuestas conductuales en germen, que
después del nacimiento se expresarán en diferencias de respuestas
psicológicas entre un niño y otro frente a la ansiedad, el miedo, la
frustración, etc.
Tampoco podemos olvidar que la ingestión por parte de la madre de
ciertas substancias como alcohol, tabaco, psicofármacos y otros, también
33. van a ejercer su efecto sobre la evolución y estructuración biopsicológica
del feto-futuro hombre.
Relaciones objetales tempranas: (constancia objetal)
Si al nacer un niño, su madre está bien sustentada por su pareja y por
condiciones ambientales adecuadas, es más posible que pueda ser
atendido por ella como un otro.
En esa fase y durante los primeros años el niño, necesita dedicación,
amor y cuidados que le permitirán desarrollarse e ir fortaleciendo su YO.
En la medida en que ha recibido mejor calidad de amor, respeto por él
mismo y un buen concepto de límites entre uno y otro, va
desarrollándose dentro de él, la génesis de una conducta madura.
Todo esto se logrará si las primeras relaciones del niño con la madre son
adecuadas y si el objeto primario, la madre, permanece constante y
disponible, por lo menos durante los primeros meses de vida.
El alejamiento de la madre o la incapacidad de dar todo este sustento al
niño, Kalina lo llama micro o macroabandono, y va a provocar
alteraciones de las relaciones objetales tempranas, y por lo tanto
dificultará el logro de un YO maduro posteriormente, lo que predispondrá
a la aparición de una adicción, si se cumplen además otras
circunstancias, porque este factor recién expuesto no es específico como
base predisponente.
Depresión Materna:
Existe un micro o macroabandono del
cuidado del niño en los casos de
depresión materna. Normalmente, frente
al nacimiento de un hijo las madres
tienen reacciones depresivas.
El parto y el período de postparto es
una etapa de cambios muy importantes
para la mujer. Hay madres que
presentan depresiones muy serias, y la
persona depresiva es alguien siempre hambrienta de estima.
En esta situación, la madre atenderá posesivamente a su hijo, no porque
este la necesite, sino porque ella lo necesite a él, o sino directamente lo
abandona.
Este es un proceso que se desarrolla y se extiende en el tiempo, y a
través del cual la madre usa al niño para ella misma, venciendo los
límites del niño para acomodarlo a sus necesidades.
Se produce una simbiosis que no se va a resolver en forma normal, a
través de los procesos de separación - individuación.
34. Las técnicas de acción para llegar al otro, en vez de las verbalizaciones,
las invasiones del territorio del otro y su manipulación permanente, los
modelos tóxicos, los dobles mensajes inductores, las mentiras, etc. van
configurando un cuadro particular.
Desarrollo del Self: (Si-Mismo)
El niño nace dotado de un equipo psicológico (self) que le permite
realizar su primera acomodación a la estructura de su ambiente. Su
forma y su estilo de adaptación dependerán del interjuego que se de
entre sus recursos constitucionales, psíquicos y biológicos, y los vínculos
con los objetos que el medio externo aporta (la familia mas próxima) y
entre estos dos, los sucesos infantiles.
En este punto, es de fundamental importancia el vínculo que se
mantenga entre la madre y el niño.
La capacidad de la madre para soportar la angustia, calmar y dar
consuelo, hacen que el niño se sienta bueno, querido y aceptado tal cual
es.
Esto estimula la relación afectiva y el contacto con la realidad. El sujeto
(bebé) necesita encontrar un objeto (madre) que le aporte gratificaciones
que dirija, modele y contenga sus impulsos, que alivie y regule sus
tensiones y que lo haga sentir grande e importante.
Cuando la madre no puede responder a los deseos y necesidades del
bebé, el self de este, se conforma desvitalizado, depresivo y con
importantes sentimientos de vacío.
Esta situación es el germen que en el futuro generará las ansias de
dependencia patológica (estructura adictiva).
También, podemos observar que son familias, en general con mala
alianza marital, donde muchas veces el precario vínculo que mantiene la
relación es un hijo dependiente e inmaduro que canjea su independencia
por la enfermedad.
De esta manera, la drogadicción pasa a ser el precio que se paga para
no crecer. Son familias que suelen tener un pasado con situaciones
ocultas, secretos familiares, pasados difíciles, que viven como
vergonzosos, con contradicciones y mentiras.
Puede suceder que el padre, una figura ausente de afecto y
preocupación por el hijo, que suele tener una apariencia de fortaleza,
utiliza la prepotencia para desvalorizar a la madre, acentuando su
predominancia, logrando de este modo el desamparo del hijo por ambos,
ya que una madre no respaldada por el padre del niño no puede cumplir
su rol con tranquilidad.
Es común también, que se trate de padres dedicados de manera
exagerada al trabajo, con poco contacto familiar, desinteresados de la
educación y aspectos afectivos de sus vidas.
35. Las características recién descriptas se constituyen en sustratos
cargados de hostilidad que estarán en la base de la patología del
superyo.
Sobreviene entonces una alteración del sistema de valores y una
incapacidad de asumir normas de autocrítica, capacidad de culpa y
preocupaciones frente a si mismo y hacia los demás, que devienen en
conductas delictivas.
Esta generación de estructuras vulnerables produce un daño más grave
en estas primeras épocas, por ser las que encierran el germen del
basamento de la personalidad, extendiéndose a etapas posteriores de la
educación, que no es otra cosa que la formación del carácter y del
sistema de valores a los cuales la persona se ajustará y tomará como
guía en la vida.
Relación con la figura paterna:
Para Kalina, la figura paterna es un factor clave para la aparición o no de
una drogadicción. Aunque su papel en los primeros momentos de la vida
no es tan capital como el de la madre, al dar estabilidad al hogar y al
vínculo entre la madre y el hijo, va generando las condiciones más
adecuadas para que el buen desarrollo del niño se efectúe
adecuadamente.
En la historia de la evolución de un futuro drogadicto, la figura paterna no
es capaz de sostener las dificultades de su esposa y por otro lado no
reacciona frente a la simbiosis madre - hijo, para evitar así hacerse cargo
de las necesidades y exigencias de su esposa y/o del hijo.
Lo que constituía una díada de explotación se ha transformado en una
tríada de explotación, al utilizarse al hijo para que la pareja subsista.
A través de ese pacto perverso se instala el modelo de "hacer la vista
gorda " (denominación de Kalina), algo así como una negación parcial
pactada, que luego el adicto introyectará y la convertirá en el modus
vivendi, así como la tendencia de ser un explotador - explotado.
En otras palabras, incorporará una ideología de vida donde una parte de
su YO hará la vista gorda a las actuaciones de la otra, en especial en
todo lo que respecta a las actuaciones adictivas.
Invasión de los límites del otro.
En el tipo de relaciones descriptas anteriormente, nadie es un otro como
un otro, sino que está al servicio del otro.
Hay una permanente invasión de los límites y se establecen relaciones
del tipo narcisista caracterizadas por la manipulación.
36. Hay además un permanente uso de la negación, por lo que no se
perciben o se niegan los que existen en la familia, pues "se piensan unos
a otros" y no conocen el valor de preguntarle al otro que le pasa.
Importancia del cuerpo y negación del mismo en el adicto. Negación
de la finitud:
En la disociación que hace Kalina del cuerpo y de la mente, el cuerpo
marca la condición bilógica del hombre.
El adicto
niega esta
circunstancia, hace "la vista gorda". Siente odio hacia su cuerpo, ya que
éste por su finitud le impide vivir la ilusión de la grandiosidad que busca.
Ahora bien, el adicto vive una paradoja trágica, como todo ser humano
necesita y busca un límite para poder integrarse al resto de la
humanidad, pero cuando lo encuentra se desespera porque este mismo
límite le marca su finitud.
En consecuencia busca sobrepasarlo, atacándolo y buscando una
grandiosidad que no puede ser satisfecha, y al encontrar un nuevo límite
ante la intolerancia del cuerpo al tóxico, reaparece nuevamente la
condición de finitud.
Observemos que en este juego se reproduce un modelo interpersonal
familiar, donde siempre se espera de él (o se desea) algo que no puede
cumplir.
Su búsqueda incesante de genialidad responde a su necesidad de
corresponder a ese deseo. Así, esto se repite una y otra vez, hasta llegar
a la sobredosis, que representa la posibilidad de marcar un límite que
detenga el ciclo, el límite máximo que es la muerte.
Esta negación del cuerpo y su finitud se complementa con el sentimiento
que tiene el adicto de tener un YO demasiado frágil, que ha sido invadido
y explotado desde pequeño sin respeto a sus límites.
37. Cuando encara su vida no tiene fuerzas para enfrentar los límites de la
realidad externa, y entonces recurre a las drogas que operan como una
fuerza extra que le ofrecen la ilusión de poder vivir una existencia con
una menor vulnerabilidad que la que realmente tiene.
Constelación y personalidad preadictiva.
Kalina dice que no hay trastorno de personalidad o condición
psicopatológica específica en la base de las adicciones.
Pero también plantea la existencia de algunas características que él
llama "constelación preadictiva".
En el perfil del adicto hay que buscar los modelos familiares que
complementan los factores predisponentes al desarrollo de esta
enfermedad.
A través de mensajes verbales y no verbales la familia se encarga de
mostrar al niño una serie de conductas adictivas que tienen que ver con
el uso abusivo de medicamentos, en especial psicofármacos, tabaco,
café, trabajo, comida, etc.
Con estas conductas está dando un mensaje de cómo enfrentar las
viscisitudes de la vida, lo que unido a otras condiciones externas va a
generar la adicción futura.
Mucha gente, adolescentes y adultos usan o experimentan alguna vez
con drogas; sin embargo no se convierten en adictos, los que se
transforman en drogadictos son los que tienen una "constelación
preadictiva".
El uso
indiscriminado de
medicamentos, el
uso del tabaco en
forma compulsiva
frente a cualquier
ansiedad, el uso
de alcohol o de
comidas frente a la
ansiedad, o el
comprar o trabajar
o hacer cosas
compulsivas para
calmar la angustia va construyendo en el hijo, un modelo donde el
pensar, esperar y controlar los impulsos no existe; en cambio la acción y
especialmente la acción tóxica sustituyen el pensar.
Así se genera una personalidad preadictiva que al juntarse con la droga
pasa a la categoría de adicta.
En otras palabras, en estos grupos familiares o equivalentes no se
aprende el control de impulsos porque no existe nadie que lo enseñe. No
hay modelos coherentes de reflexión, de espera.
38. El adicto está siempre pidiendo, es decir buscando la gratificación
inmediata porque no aprendió a mediatizar el impulso con el
pensamiento.
Es un ser crónicamente "hambriento". Por estas características es que
Freud planteó la importancia de fijaciones orales en la dinámica de la
adicción, y en esta fijación se fundamentó la clásica descripción de la
existencia, en la personalidad del adicto, de un YO débil, incapaz de
tolerar las frustraciones.
Estos grupos familiares o equivalentes, pueden ofrecer, modelos
simbióticos o cismáticos.
En ambos predomina la
rigidez de los roles,
separados en el cismático y
mantenidos juntos por
encolamiento en los
simbióticos como
fundamento para la
subsistencia del vínculo
parental.
Estos conceptos nos explican
la falta de repertorio de
recursos psicológicos que en
un futuro presentarán los
adictos para enfrentar las
dificultades de la vida.
Dentro de la constelación y
personalidad preadictiva
debemos reiterar aquellos
factores de índole
sociocultural que inducen el
desarrollo de las adicciones.
La cultura alcohólica y tabáquica de nuestro país es un ejemplo de esto.
CAPITULO III: APLICACIÓN DE LA MSS PARA PLANTEAR
SOLUCIONES VIABLES DE PNES
ESTADIO 01: PROBLEMA NO DEFINIDO SOCIAL
39. “DROGADICCIÓN”
Enfermedad que consiste en la adicción o dependencia a ciertas sustancia
tóxicas para nuestro organismo, las cuales afectan en distintos grados a nuestro
sistema nerviosos central, al igual que varias de nuestras funciones cerebrales.
Todo lo anteriormente manifestado, produce efectos a nivel fisiológico y
psíquico, que se manifiestan en alteraciones del comportamiento, de las
emociones, del juicio y la percepción del medio ambiente que nos rodea.
El consumo de drogas, legales e ilegales, constituye un problema de salud
pública muy importante. Los riesgos y daños asociados al consumo varían para
cada sustancia.
Además, es necesario tener en cuenta las variables personales como el grado
de conocimiento o experiencia del usuario, su motivación, etc. y las
propiedades específicas de cada droga así como la influencia de los elementos
adulterantes.
Lo que hace que una adicción sea una adicción nociva es que se vuelve en
contra de uno mismo y de los demás. Al principio se obtiene cierta gratificación
aparente, igual que con un hábito.
Pero más temprano que tarde su conducta empieza a tener consecuencias
negativas en su vida. Las conductas adictivas producen placer, alivio y otras
compensaciones a corto plazo, pero provocan dolor, desastre, desolación y
multitud de problemas a medio plazo.
Las consecuencias negativas asociadas a las adicciones afectan a muchos
aspectos diferentes de
la vida de una persona.
A veces, los/as jóvenes
prueban drogas por
curiosidad, por estar
bajoneados, o porque
el grupo presiona para
hacerlo. De ahí a
consumir con mayor
frecuencia y
necesitarla hasta
hacerse dependiente
hay un corto camino
que transita sin darse
cuenta.
ESTADIO 02: DEFINICIÓN DEL PROBLEMA EN CAUSAS Y EFECTOS
CAUSAS:
Erróneamente las drogas han sido utilizadas para:
40. La Búsqueda del placer: por la necesidad de sentir sensaciones diferentes es
una de las más contantes causas por las cuales la persona recurre a las
drogas.
La Búsqueda de mayor creatividad: artistas en
general hacen uso de las drogas para aumentar su
creatividad.
Superar los problemas personales: debido a la falta de
felicidad personal muchas personas son llevadas a caer en el
mundo de las drogas para enfrentar sus problemas.
Actitud de rebelión: los jóvenes encuentran en las drogas
un atractivo de oposición contra los principios de los
adultos.
Anhelo de independencia de la autoridad familiar y escolar.
Curiosidad: En ocasiones
los jóvenes con una
curiosidad insana, por
observar que algunos
adolescentes de su edad
imitan el acto de probar y
sentir el uso de cualquier
droga. Además algunas
drogas como los
inhalantes, son de fácil
acceso para ellos, son
autorizadas y vendidas a
bajo costo en cualquier
abastecimiento, lo que
ocasiona ventaja de
consumo.
Al aceptar el organismo la tranquilidad y relajación del efecto de la droga,
ocasiona que éste exija el consumo nuevamente, pero con la misma dosis ya
resulta insuficiente, lo que hace aumentar cada vez más la cantidad para sentir
los mismos efectos, dando paso a la adicción. Algunos jóvenes que
experimentan el sentir de bienestar o el simple hecho de "andar en un viaje" y
41. que al consumir la droga su organismo los rechaza de una forma brusca, por lo
general éstas personas no vuelven a intentarlo.
Necesidad de pertenecer a un grupo y ser “aceptado”
por el.
La presión del grupo, de compañeros o amigos.
Problemas de personalidad del sujeto
Deseo exagerado de figuración.
Querer escapar de la realidad y no hacerse responsable de
ella
No compartir lo que sientes o piensas, aislarte
CONSECUENCIAS – EFECTOS
Las he querido agrupar en dos grandes grupos:
Según El Tipo
Salud: el consumo de drogas origina o interviene en la aparición de diversas
enfermedades, daños, perjuicios y problemas orgánicos y psicológicos. Por
ejemplo: Hepatitis, Cirrosis, Trastornos cardiovasculares, Depresión, Psicosis,
Paranoia, etc.
42. Salud psíquica: Los adictos suelen padecer una amplia
gama de trastornos psicológicos, como estados de ánimos
negativos e irritabilidad, actitudes defensivas, pérdida de
autoestima e intensos sentimientos de culpa.
Salud Física: La adicción suele conllevar la aparición de
multitud de síntomas físicos incluyendo trastornos del
apetito, úlcera, insomnio, fatiga, más los trastornos físicos y
enfermedades provocadas por cada sustancia en particular.
Social: Los adictos a drogas, con frecuencia se ven envueltos en agresiones,
desorden público, conflictos raciales, marginación, etc.
Cuando se comienza a necesitar más a las drogas que a
las otras personas pueden arruinarse o destruirse las
relaciones íntimas y perderse las amistades. Se puede
dejar de participar en el mundo, abandonar metas y
planes, dejar de crecer como persona, no intentar
resolver constructivamente los problemas y recurrir a
más drogas como "solución".
Legal: Abusar de las drogas es contra la ley. Los
ofensores (tanto los que experimentan como los
que se dedican al consumo de drogas) corren el
riesgo de tener que pagar multas y/o ser
encarcelados. Un arresto puede significar
vergüenza, interrupción de los planes de vida,
antecedentes penales. Ciertas drogas pueden
desencadenar una violencia incontrolable y
conducir al usuario a crímenes que son
severamente punibles por la ley.
Economía: dado el ingente volumen de dinero
que mueve el mercado de las drogas y el
narcotráfico, tanto los consumidores como los
países contraen importantes deudas; se crean
bandas organizadas; se produce
desestabilización económica nacional, etc. El
uso continuo de drogas puede ser muy caro,
ya que sus costos se elevan a cientos y, en
ocasiones, a miles de dólares por año. Para