La retención en la fuente es un mecanismo de cobro anticipado del impuesto a la renta donde los compradores de bienes o servicios deben retener un porcentaje sobre el pago a personas o entidades. No se aplica a importaciones, intereses, educación u otros casos. Los agentes retenedores deben llevar contabilidad y declarar y pagar mensualmente el impuesto retenido, otorgando un comprobante a la persona del cual se retuvo y un crédito tributario a su favor.